Beso Inésperado

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Au moderno

Boruto, con 15 años, se encontraba en su habitación, preparándose para ir a la escuela. Suspiró profundamente y se apoyó contra la puerta cerrada. Su madre, que estaba preparando el desayuno, lo escuchó y entró en la habitación.

— ¿Todo listo para ir a la escuela? —le preguntó con una sonrisa.

Boruto asintió con la cabeza, todavía un poco nervioso.

— Sí, mamá. Solo estoy un poco nervioso por la escuela.

Su madre se acercó a él y puso una mano en su hombro.

— Sé que no es fácil, pero estarás bien. Eres fuerte y tienes a tus amigos para apoyarte.

Boruto se relajó un poco ante las palabras de su madre y le dio una sonrisa débil.

Después de terminar el desayuno, Hinata acompaña a su hijo hasta la puerta de la casa.

—Ten cuidado en la escuela, cariño —dice ella, dándole un beso en la frente.

Boruto asiente con la cabeza y le devuelve el beso en la mejilla.

—Lo haré, mamá. No te preocupes.

Se pone sus zapatos y se prepara para salir. Su madre lo observa con ternura desde la puerta.

Boruto se queda un momento más en silencio, pensando en cómo despedirse de su madre. Después de unos segundos, se da cuenta de que quiere que ella le dé otro beso de despedida.

Se gira hacia ella y le habla con un tono un poco avergonzado:

—Mamá, antes de irme... ¿podrías darme otro beso de despedida?

Hinata se sorprende un poco por la pregunta de su hijo, pero se sonroja ligeramente.

—Ah, claro. Por supuesto que puedo darte otro beso de despedida.

Se acerca a él y lo abraza con fuerza, envolviendo sus brazos alrededor de su pequeño cuerpo. Le da un beso en la frente, en la nariz.

—Te quiero mucho, cariño. No olvides que estoy aquí para apoyarte siempre.

Hinata se sorprende un poco por la forma en que su hijo pide un beso en otra parte, pero no entiende exactamente a qué se refiere.

—Eh, cariño, ¿qué quieres decir con eso? ¿A qué te refieres con otro beso?

Pregunta ella, con una expresión de confusión en su rostro.

Después de escuchar la pregunta de su madre, Boruto se acerca a ella con rapidez y la abraza por detrás. Su cuerpo más alto que el de ella le permite envolver sus brazos alrededor de su cintura y besarla en los labios con sorpresa.

La besa con pasión y deseo, sin darle tiempo a reaccionar. Sus labios se mueven contra los de ella con urgencia, como si hubiera estado esperando ese momento durante mucho tiempo.

Hinata se sorprende y se queda inmóvil por un momento ante el inesperado beso de su hijo. Su mente se llena de confusión y sorpresa, pero a medida que pasa el tiempo, comienza a reaccionar.

Sus ojos se abren de par en par y sus manos se apoyan en los brazos de Boruto, tratando de alejarlo, pero sin poder encontrar las palabras para expresar lo que siente.

—Boruto, qué estás haciendo...
susurra ella con voz temblorosa.

Boruto se separa de los labios de su madre con una sonrisa en su rostro.

—Gracias por el beso, mamá —dice él, aún manteniendo la sonrisa.

Luego, se da la vuelta y sale corriendo de la casa, dirigiéndose rápidamente a la escuela.

Mientras se aleja, no puede evitar sentir una mezcla de emociones en su interior. Está nervioso y avergonzado por lo que acaba de hacer, pero también se siente más seguro y decidido.

Hinata se queda de pie en la puerta de su casa, con los labios aún hormigueando por el beso de su hijo.

Se queda ahí durante unos minutos, procesando lo que acaba de suceder. No puede creer que su hijo la haya besado así, tan repentinamente y sin previo aviso.

Ella sabe que su esposo está fuera, trabajando en su oficina, y se pregunta cómo reaccionará él al saber lo que ha pasado.

BORUHINA: Amor incorrecto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora