Capítulo 27: Fuegos Artificiales.
La figura de Tsukasa apareció detrás de Hanako, susurrándole al oído una pregunta que lo dejó helado. Alterando a los presentes, _____ sacó su arma y colocó su mano frente a Nene para protegerla.
—Tsukasa, ¿qué haces aquí?
—¡Está bien! —musitó Tsukasa—. ¿Sabes? Tal cosa no tiene importancia —se acercó a Nene—. ¿Por qué no dejas que esta chica se rinda? Ella misma dice que quiere hacerlo. Es una pena.
—¡Aléjate de ella, es una orden, Tsukasa! —gritó la exorcista, alzando su voz con determinación.
—Ambos son realmente egoístas. Quieren que viva, pero ella no quiere hacerlo —se acercó a su hermano—. Ya no puedes usar a un sustituto. Tienes que pensar en alguna otra manera, ¿cuál será, Amane? Esa chica de ahí también ha visto su esperanza de vida reducirse, ¿no?
—¿Qué?
—_____ —dijo Tsukasa, con una sonrisa maliciosa.
La joven frunció el ceño y se lanzó a atacar al espectro, pero este logró esquivarla con facilidad.
—Piensa, Amane. Puedes usarla de sustituto o...
—...Si destruyo los yorishiro de los misterios escolares, Dios dijo que concederá mi deseo —murmuró para sí mismo.
El daño psicológico en Amane era evidente, y no tardó en caer bajo las incitaciones de su hermano. Irritada, ______ apuntó con su espada a Tsukasa, lista para atacarlo.
Flush.
Con la esfera voladora que seguía al espectro siempre, ambas chicas fueron al límite del sexto misterio. La idea principal del hermano de Amane era enviar solamente a Yashiro pero, al dejar a _____ para que lo atacara, sería una total molestia, así que decidió enviarla.
Cayendo en una zona que se les hacía familiar, la de cabellos crema logró caer en los brazos de la mayor, sosteniendo con fuerza sus hombros.
—______ —murmuró confundida.
—Recuerdo este lugar. Aquí es donde...
—¡Sumire-chan!
Saltando de los brazos de su amiga, corrió hacia la cabaña donde habían estado tiempo antes junto a Hanako, logrando reconocer el lugar. Siendo perseguida por la mayor, ambas lograron toparse con el Yorishiro del sexto misterio.
Emocionadas, Nene y Sumire empezaron a hablar felices de volverse a encontrar. Caso contrario en la mayor quien miraba indiferente a la chica.
—Debes estar enojada porque no está Gon, ¿cierto?
No respondió.
—Nene, debemos salir de aquí.
Al ver su rostro triste con sus ojos a punto de lagrimear, fue muy similar al de un pequeño hamster, así que sin muchas opciones, suspiró y colocó su arma sobre sus hombros.
—Busquemos otra forma, sin necesidad de destruir el Yorishiro —agregó _____.
Dando un brinco de emoción, la sacerdotisa tomó a su amiga de la mano para poder pasear por el pueblo en busca de alguna salida que les fuera útil. Sin embargo, al comenzar a llover fueron obligadas a resguardarse bajo en techo de una de las casas.
Entregándole un pañuelo, _____ se recostó de la pared de madera.
—_____, ¿crees que todo vuelva a la normalidad?
La miró y se quedó en silencio.
—Imposible. Aunque las cosas vuelvan a ser normal, aunque Hanako vuelva y tu tiempo de vida se extienda, las experiencias vividas se quedarán ahí —acarició su cabello—. Un ejemplo es Tsukasa, ahora que sabemos que ese no es el hermano de Amane como tal, es imposible verlo igual.
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Susurros del más allá | Hanako-kun
FanfictionAún no estoy segura de lo que ocurrió. Esas voces, esas sensaciones, esos recuerdos... ¿existieron realmente o son producto de mi imaginación? Si estás leyendo esto, es porque decidí que todo lo que viví fue real. Pero, ¿acaso yo también soy real?