Prólogo

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Niki, con las manos entrelazadas detrás de su nuca, miraba al mar con una mezcla de preocupación y frustración.

—¿Y ahora qué se supone que haremos? Estamos en medio del océano, demasiado lejos para nadar hasta allá —protestó, su voz resonando con ansiedad.

Jay, con una actitud despreocupada, respondió con desdén.

—Estamos jodidos.

—¡Eso no ayuda, Jay! —gritó Helen, su tono reflejando la creciente tensión del grupo.

—Calmense todos —intervino Jungwon, tratando de imponer un poco de orden—. Creo que tengo una idea. ¿Y si voy nadando hasta la playa? Sé hacerlo muy bien y podría encontrar algo para llevarlos de vuelta. No hay muchas opciones posibles.

Mia lo miró con incertidumbre.

—¿Estás seguro de eso? Puedo ir contigo; nadar no se me da mal. De niño practicaba natación.

—Buena idea, hyung. ¿Me dejas tu play si no te veo más? —bromeó Niki, soltando una sonrisa traviesa.

—No te pases de listo —replicó Heeseung, dándole un ligero golpe en la cabeza.

—¡Aish! Era broma, era broma —se quejó Niki, masajeándose la nuca.

Jungwon respiró hondo, sintiendo el peso de la responsabilidad sobre sus hombros.

—Creo que puedo hacerlo —dijo, su voz firme a pesar de la preocupación que lo invadía.

Mia lo miró, aún dudosa.

—¿Estás seguro?

—Sí, hagámoslo —afirmó Jungwon con determinación. Mia asintió y ambos se dirigieron hacia el agua por una pequeña escalera en la parte trasera de la lancha

—Tengan cuidado, por favor. Vuelvan sanos y salvos —exhortó Lucy, su voz cargada de inquietud.

—No te preocupes, Lucy. Todo estará bien —agregó Helen, intentando infundir algo de esperanza en el ambiente.

Mientras Mia y Jungwon se adentraban en el mar, los demás los observaban hasta perderlos de vista. Luego se sentaron en el suelo de la lancha, esperando en silencio.

—No entiendo cómo es que nos abandonaron aquí. ¿Cómo pudieron hacernos esto? —se quejaba Luna, irritada y molesta. —Mi padre no debe saber de esto; él no lo permitiría. Pronto vendrán por nosotros.

—Debe ser una broma o una cámara oculta. Seguro es uno de esos programas que les hacen a ustedes los idols o un reality show de bajo costo. Tiene que ser eso —añadió Viollet, nerviosa y enojada.

—¿Estás diciendo que esto es nuestra culpa? —protestó Heeseung, indignado.

—Ja, mía no es —respondió Viollet con desdén.

—Por favor, no peleen. Tenemos que mantener la calma —intervino Helen, tratando de contener su frustración.

—Bueno, el ambiente está muy tenso. ¿Qué tal si jugamos a las cartas? Me las traje —sugirió Sunoo con una sonrisa inocente.

—¿Para qué te trajiste eso aquí? Ni que fuera a salvarnos la vida —protestó Viollet.

—Al menos nos salva del aburrimiento —replicó Heeseung, cruzándose de brazos.

—No tengo cabeza para pensar en ganarte ahora —dijo Viollet, desviando la mirada hacia otro lado.

—¿Crees que me ganarás? Jaja, qué ilusa —burló Heeseung con una sonrisa desafiante.

—¿Cuánto quieres apostar? —respondió Viollet mientras se acercaba a él, intentando intimidarlo.

Helen rodeó los ojos, sintiéndose al borde de perder la paciencia ante el juego que comenzaba a gestarse entre ellos.

Mientras tanto, Lucy se alejaba del grupo, su mirada fija en el horizonte. Intentaba organizar sus pensamientos y calmar su inquietud. Sunghoon la observó desde lejos y decidió acercarse a ella. Se colocó a su lado en silencio, compartiendo ese momento de incertidumbre sin necesidad de palabras. La conexión entre ellos era palpable; a veces, el simple acto de estar presente era suficiente para aliviar el peso del mundo que llevaban sobre sus hombros.

Lucy, con lágrimas en los ojos, apenas podía contener su angustia.

—¿Crees que todo esto es mi culpa? —preguntó, su voz temblorosa.

Sunghoon se giró hacia ella, su mirada llena de comprensión y apoyo.

—Claro que no. Vinimos aquí por nuestra propia voluntad. No imaginábamos que esto iba a pasar —respondió, manteniendo su mirada fija en la de ella.

—Yo los animé para que vinieran. Fue mi idea que estuviéramos aquí. Ni siquiera sé nadar, ¿cómo se me ocurrió? —dijo, bajando la vista, sintiéndose avergonzada.

Sunghoon, viendo el dolor en su rostro, tomó sus hombros con suavidad y la hizo girar hacia él. La diferencia de altura entre ellos era evidente, pero eso no le impidió acercar su mano al rostro de Lucy. Con sus pulgares, secó delicadamente las lágrimas que caían por sus mejillas.

—No te preocupes, ¿ok? Saldremos de esta isla sanos y salvos. Te prometo que todo estará bien. Solo cálmate, ¿sí? —dijo, intentando transmitirle calma.

Levantó el rostro de Lucy y le mostró una pequeña sonrisa. Ella asintió, sintiendo un alivio momentáneo. Sin pensarlo dos veces, lo abrazó tímidamente, aferrándose a su dorso. Sunghoon correspondió al abrazo, manteniéndola cerca durante unos minutos, compartiendo ese instante de conexión y consuelo.

Media hora después, la calma de la playa se interrumpió con la llegada de Mia y Jungwon, quienes emergieron del agua jadeando y exhaustos. Se dejaron caer sobre la arena, recostando sus cuerpos mientras recuperaban el aliento.

—¡Guau! Hace mucho tiempo que no nadaba así —exclamó Jungwon, todavía agitado.

—No recuerdo cuándo fue la última vez que nadé una distancia tan larga. Creo que fue en mi antiguo empleo como salvavidas —añadió Mia, intentando recuperar el aliento. Luego se incorporó, colocando las manos sobre su cintura—. Tenemos que encontrar algo para traer a los chicos hasta acá.

—Espera, dame unos minutos más —respondió Jungwon, esforzándose por levantarse mientras aún jadeaba.

—Vamos, no podemos esperar a que caiga la noche; sería muy peligroso —dijo Mia, comenzando a alejarse.

—¡Espera! —gritó Jungwon, intentando alcanzarla mientras su corazón latía con fuerza por la mezcla de adrenalina y preocupación.

...

El viento soplaba suavemente sobre la lancha, llevando consigo las esperanzas y temores del grupo. Mientras tanto, Lucy observaba a sus amigos con una mezcla de alivio y ansiedad; sabía que el camino hacia la seguridad estaba lleno de desafíos, pero también de la promesa de unidad y valentía en medio de la adversidad.

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Hola🙃, soy la escritora de este nuevo fanfic, estoy un poco nerviosa por como fluirá esta historia, espero con ansias que les guste, no soy la mejor escritora pero prometo dar lo mejor de mi, gracias por leerlo y llegar hasta el final de esta página. Si puedes votar por esta historia y compartirla sería de gran ayuda, estaría totalmente agradecida. En esta semana publicaré el primer capitulo por favor espera pacientemente y nuevamente gracias de antemano. Bueno ya no los aburro más 😅. Bye bye😘

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