𝑷𝒂𝒅𝒓𝒆𝒔 𝑷𝒐𝒓 𝑬𝒓𝒓𝒐𝒓 [𝑺𝒉𝒐𝒕𝒐 𝑻𝒐𝒅𝒐𝒓𝒐𝒌𝒊 𝑨𝒏𝒅 𝑶𝒄]

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La vida en U.A. estaba en plena ebullición. Shoto Todoroki, con su característico cabello bicolor y su actitud reservada, se había adaptado a la rigurosa rutina de la escuela de héroes. Su relación con Carla, una chica de 16 años llena de vida y pasión por la moda, había sido una fuente de alegría y consuelo en su vida agitada. Sin embargo, lo que parecía una vida perfecta pronto se tornaría en una prueba de fuego para ambos.

Una tarde, después de las clases, Shoto y Carla se encontraban en su lugar habitual, un pequeño parque cerca de la escuela. Carla había estado distante últimamente, y Shoto no podía evitar notar la tensión en su rostro. Mientras se sentaban en un banco, Carla finalmente rompió el silencio.

─ Shoto, hay algo que necesito decirte ─dijo Carla, mirando al suelo.

Shoto, con el ceño fruncido por la preocupación, la miró atentamente.

─ ¿Qué pasa, Carla? Pareces preocupada.

Carla tomó una respiración profunda antes de hablar.

─ Estoy embarazada ─dijo, con voz temblorosa.

El corazón de Shoto se detuvo por un momento. Miró a Carla, buscando algún signo de broma, pero su rostro mostraba una seriedad que no dejaba lugar a dudas.

─ ¿Estás segura? ─preguntó Shoto, intentando mantener la calma.

─ Sí, hice varias pruebas ─respondió Carla, con lágrimas en los ojos─. He estado evitando hablar del tema, pero no puedo seguir escondiéndolo.

Shoto asintió lentamente, su mente procesando la noticia. Se tomó un momento antes de responder.

─ Vamos a enfrentar esto juntos ─dijo Shoto, con determinación─. Haré todo lo que esté en mis manos para ayudarte.

Carla levantó la vista, pero su expresión seguía siendo de angustia.

─ No sé si estoy lista para ser madre, Shoto ─admitió─. Tengo sueños y planes que no puedo cumplir con un bebé a mi cargo.

Shoto se acercó a ella y tomó su mano con suavidad.

─ Entiendo que es difícil y aterrador, pero podemos encontrar una manera de hacerlo. Necesitamos trabajar juntos en esto, incluso si parece abrumador ahora.

Los días siguientes fueron un desafío. Shoto se esforzó por ser un apoyo constante, acompañando a Carla a consultas médicas y asegurándose de que recibiera el cuidado adecuado. Sin embargo, Carla seguía resistiéndose a la idea de tener el bebé. Faltaba a las consultas, se mostraba distante y evitaba hablar sobre el futuro.

─ Carla, tienes que entender que esto no es algo que podamos ignorar ─le dijo Shoto una noche, mientras estaban en su apartamento─. Necesitas cuidar de ti misma y del bebé.

Carla se volvió hacia él con una mezcla de frustración y desesperación.

─ No puedo simplemente cambiar todos mis planes de la noche a la mañana ─dijo─. No me siento preparada para esto.