un amor mortal

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Una noche oscura, bajo la tenue luz de la luna, Goku se movía con sigilo entre los edificios de una ciudad silenciosa. Su objetivo estaba cerca: un hombre peligroso que había evadido la justicia por mucho tiempo. Pero al llegar al edificio donde debía estar su víctima, Goku sintió algo extraño en el ambiente.

Al entrar en el apartamento, vio a una figura con el cabello largo y rojizo, una mujer que se acercaba a la víctima con la misma intención que él.

—¿Quién eres tú? —preguntó Goku, sorprendido, pero manteniendo la calma.

Rias lo miró, con una sonrisa peligrosa en su rostro.

—Eso no te importa, pero parece que estamos aquí por la misma razón —respondió ella, con una voz tranquila, pero desafiante.

Goku se tensó. Ambos asesinos sabían que no podían compartir la misma presa.

—No pienso dejarte llevar este trabajo —dijo Goku, sacando una daga.

Rias suspiró, sacando sus propias armas.

—Entonces, parece que tendremos que resolverlo de otra manera.

Ambos se lanzaron el uno contra el otro en una feroz pelea. Golpes, patadas, esquivas. La batalla se extendió por todo el cuarto. Aunque Goku tenía una fuerza impresionante, Rias era rápida y letal. Cada uno de ellos estaba a la altura del otro, pero ninguno podía lograr una victoria clara.

Finalmente, ambos saltaron hacia atrás, respirando con dificultad, pero ninguno dispuesto a ceder.

—Eres mejor de lo que esperaba —dijo Goku, con una sonrisa.

—Tú tampoco estás mal —respondió Rias, limpiándose un pequeño corte en su mejilla.

El sonido de las sirenas de la policía los interrumpió. Ambos sabían que era el momento de huir.

—Nos volveremos a ver —dijo Goku antes de desaparecer en la oscuridad.

—Espero que así sea —respondió Rias, antes de hacer lo mismo.

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En su escondite, Goku no podía dejar de pensar en ella.

*"Ella era increíble... Nunca había conocido a alguien así. Necesito volver a verla."*

Al otro lado de la ciudad, Rias tenía pensamientos similares.

*"Goku... Ese hombre... No puedo dejar de pensar en él. Es interesante, y sé que nos volveremos a cruzar."*

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Días después, mientras Goku hacía unas compras en un mercado, se encontró con una silueta familiar entre los pasillos.

—Tú... —dijo Goku, sorprendido.

Rias, con una sonrisa juguetona, lo miró.

—Parece que el destino nos quiere juntar —dijo ella.

Goku sonrió y se acercó.

—¿Sabes? No esperaba encontrarte aquí. Pero parece que tienes buen gusto.

Rias se rió suavemente.

—Y parece que tienes razón. ¿Qué tal si nos sentamos a hablar?

Ambos fueron a un café cercano. Mientras conversaban, la tensión de su primer encuentro desapareció. Descubrieron que tenían más en común de lo que pensaban.

—Así que... ¿también eres una asesina? —preguntó Goku, apoyando la cabeza en su mano.

Rias asintió, jugueteando con su taza de café.

—Lo soy. Pero no cualquiera, elijo muy bien mis objetivos. Y tú... Bueno, supongo que eres como yo.

—Exacto. No cualquiera merece morir, pero cuando lo merecen... me aseguro de que se haga justicia a mi manera.

Rias lo miró con admiración.

—¿Qué te parece si volvemos a intentarlo? Esa víctima de la otra noche... Todavía está viva.

Los ojos de Goku brillaron.

—Me parece una excelente idea. Pero esta vez, lo haremos juntos.

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Los dos comenzaron a trabajar como un equipo mortal, cazando a sus objetivos con precisión letal. Pasaban días y noches juntos, planeando y ejecutando sus misiones, y poco a poco, entre cada asesinato, empezaron a sentir algo más profundo el uno por el otro.

Una noche, después de un trabajo particularmente intenso, se quedaron solos, mirando las estrellas desde un tejado.

—Rias... —dijo Goku, rompiendo el silencio—, creo que me estoy enamorando de ti.

Rias lo miró sorprendida, pero luego sonrió.

—Yo también siento lo mismo, Goku. Creo que esto es más que una simple sociedad.

Goku tomó su mano, entrelazando sus dedos.

—Entonces, ¿qué te parece si seguimos haciendo esto? Pero ahora... como algo más que solo compañeros.

Rias asintió.

—Seremos imparables, Goku. No hay nada que no podamos hacer juntos.

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Desde entonces, Goku y Rias se convirtieron en una pareja imparable, asesinos letales y amantes apasionados. Cada vez que eliminaban a sus víctimas, lo hacían con una precisión y coordinación casi perfecta. No solo compartían su vida como asesinos, sino también como amantes, uniendo sus corazones en cada misión que emprendían.

Y mientras el mundo los temía, ellos se amaban cada vez más profundamente.

Fin.

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Espero que te haya gustado esta historia de Goku y Rias como una pareja de asesinos.

Goku x rias one shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora