𝙃𝘼𝙏𝙀 | Yeon Sieun

Capítulo IX

6 días antes de

El sonido del lápiz contra el papel resonaba en las paredes, hye se había ya acostumbrado tanto a su nueva rutina que ya le era difícil salir de ella, su estómago rugió, se iba tan temprano a la escuela que ya no le daba tiempo de desayunar en casa.

Volteó hacia atrás. —Ahora vuelvo. — el chico solo respondió con un gruñido.

Hye no tardó mucho, tenía claro que debía comprar, había descubierto que sieun prefería la leche de fresa, contrario a suho que prefería la de plátano, agarró un kimbap y dos panes para suho.

Al llegar al salón, parpadeó al ver una escena bastante difícil de encontrar, suho sentado en la silla frente a sieun ambos sumergidos en una charla, no pudo evitar reír.

—Si me dieran un won por cada vez que te veo despierto moriría de hambre.

Ambos chicos voltearon a verla, le entregó a sieun su comida recibiendo un pequeño gracias, hye aún no se acostumbraba a ello.

—Me trajiste leche de plátano ¿verdad?—preguntó suho con una gran sonrisa adorable que hacía resaltar sus mejillas abultadas, la castaña arrugó su nariz mientras acercaba su rostro al contrario.

—¿Por quién me tomas? — le ofreció la comida, este aceptando con gusto, volteó su rostro poniendo su mejilla frente a la castaña, está subiendo que quería con gracia le dió un pequeño beso en la mejilla.

Suho siempre había sido bastante cariñoso, la castaña amaba eso de él, era un hombre que no se avergonzaba de demostrar amor.

Se sentó junto a ambos a comer, y aunque sieun nunca había sido muy hablador ese día estuvo mucho más silencioso de lo normal.

Mucho más.

[•••]

La música de final de clases resonó en los pasillos, Hye entrecerró sus ojos hacia la espalda de sieun. Había estado raro, apenas y le había hablado, incluso le respondía con monosílabos y ella se estaba empezando a inquietar.

Bajaron juntos la colina hacia la parada de buses, camino a sus clases intensivas.

El camino fue silencioso, la clase lo fue aún más.

El cielo estaba oscuro, ambos caminaban juntos saliendo de la escuela intensiva, en ese lapso tuvo una pequeña llamada con suho.

—¿Entonces pollo frito?

—Prefiero carne.

—Bien, entonces nos vemos en mi trabajo.

—No iré a tu trabajo, me pondrás a trabajar.

—Oye, ¿cómo piensas eso de mi? solo que este es el mejor lugar que conozco, amas la comida de aquí.

—Bien, pero no lavaré ni un plato ¿oíste?

—Bien, bien.

Cuando cortó la llamada con suho pudo sentir el ambiente tenso, y realmente no supo por qué.

—Ah, sieun, ¿me acompañas a comprar un libro? será rápido.

—¿Por qué?

—¿Por qué? ¿a qué te refieres?

—Pídele a tu novio que te acompañe, tengo cosas que hacer — de repente este le había dado la espalda, hye parpadeó con sorpresa y rió bajito.

—¿Novio? ¿de qué hablas? —preguntó mientras lo alcanzaba, ambos se detuvieron en la parada de autobuses.