Capítulo 7- Live Forever.

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Advertencia, en este capítulo se tocará el tema de sobredosis y habrá mención a ETS.
Si pudieran leer la nota final, lo agradecería mucho.
Es importante.
AA.
.

No podía dormir, el sudor aún corría por su cuerpo y los temblores no lo dejaban descansar. Las pesadillas tampoco le hacían bien, ahora recordaba por qué había empezado a beber. Tras la guerra, odiaba las noches, antes habían sido su lugar seguro cuando vivía con los Dursley, nadie lo molestaba en las noches, no tenía que lidiar con su horrible familia materna durante las horas de oscuridad del día, pero ahora, se habían convertido en su peor enemigo. No quería que llegara la hora de dormir, cuando el atardecer estaba en su esplendor, era su señal para empezar a beber hasta desmayarse, o meterse cualquier droga para quedarse dormido. El pasar la noche con alguien desconocido tratando de olvidar su soledad era una opción, eso lo podría hacer.

Primero comenzó con pociones para sueño sin sueños, no funcionaron después de un uso diario, lo cual provocó el empezar a beber, eso ayudaba, hasta que dejó de funcionar, luego empezó con las drogas y las pastillas para el dolor. Ahora ya no tenía nada, ni un cigarro al cual aferrarse como si fuera su aire, eso lo estaba matando, sus uñas ya no eran uñas. Ya no podía rascarse porque se había acabado sus uñas, era un asco. Era su cuarto día, su primer día realmente sobrio, el lunes y el martes no se acordaba mucho por los dolores en el cuerpo. Pero el miércoles, fue una tortura, lo único bueno fue ir a la reunión, uno de sus peores días, y eso que había tenía malos días.

No tenía sentido quedarse en la cama, me levanté para ir a la habitación de Draco, él seguía inconsciente. Scorpius estaba en la cama pequeña de al lado, estaba dormido. Los envidiaba, envidiaba que ellos pudieran estar dormidos sin ayuda de nada, seguramente Ron, Hermione, Rose y Hugo, estarían igual de dormidos. Le di un beso en la frente a Scorpius y le puse de nuevo el peluche de dragón que yacía en el suelo, él siempre dormía con su peluche. ¿Cómo alguien tan bueno puede ser su hijo?

Bajé las escaleras para ir a la cocina, empecé a cocinar el desayuno, eran las 4 de la mañana, pero no importaba, necesitaba dejar de pensar. Puse la grabadora a un volumen considerado y la música empezó.

Maybe I don't really wanna know

How your garden grows

'Cause I just wanna fly

Lately, did you ever feel the pain

In the morning rain

As it soaks you to the bone?

Era una ironía que sonara esa canción.

El cocinar siempre le había ayudado, era la única actividad que podía hacer con los Dursley, era algo suyo y se consideraba bueno en esa actividad. Me hice un café con cinco cucharadas de azúcar, eso parecía ayudar, aunque también tomé una paleta de la bolsa que me había dado Florence, tenía razón, el azúcar funcionaba.

Cuando el desayuno estuvo listo, me senté para revisar la caja de Draco.

La respiración me falló cuando abrí la caja. Lo primero que pude ver fue la cámara que le regalé a Draco, la cámara instantánea. Había fotografías de nuestros viajes, una vieja camisa mía, era mi favorita, se la había prestado de pijama en algún momento del pasado. Draco la había guardado todo este tiempo, junto con nuestras fotografías. Recuerdos de nosotros.

¿Alguna vez revisaba esta caja con la intención de buscarme ahí? ¿Había utilizado mi camisa alguna vez? Las preguntas se acumulaban en mi mente y yo solo me quedé lo más tranquilo que puede entre tanto veía nuestros recuerdos. Una calidez se instaló en mi pecho cuando veía la sonrisa de Draco en las fotos. Era muy hermoso, aunque siempre lo había sido. Las lágrimas cayeron cuando encontré fotografías de Draco con su vientre abultado, otra con Scorpius en sus brazos, supone que esa foto era después de que hubiera nacido su hijo, ya que Draco se veía cansado y Scorpius estaba rojo en su piel. Desde ahora era mi fotografía favorita, busqué mi billetera para ponerla ahí, junto con la primera fotografía que teníamos Draco y yo juntos, había cargado esa foto desde que Draco me dio la copia.

El niño que vivió pero no aprendió a vivir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora