You Hate Me While I Love You || Ryeji

Capítulo 70

Seguí a Karina hasta la habitación muy feliz de poder volver a jugar videojuegos con ella y ella entró dejando la puerta abierta para que yo entrara y apenas lo hice cerré la puerta.

"A qué juego vamos a jugar..." Las palabras murieron en mi boca cuando la vi inclinada, moviendo algo, que no me importaba saber qué era, sobre la cama.

Estaba y no estaba bien que ella usara pantalones cortos tan ajustados y cortos porque yo no podía concentrarme adecuadamente en el juego y...

Será mejor que encienda el videojuego para distraerme de algunas cosas que me gustaban distraerme, pero que me ponían nerviosa.

"¿Qué?" preguntó y no tuve el valor de mirarla porque no tenía.

Ella me gustaba, yo le gustaba a ella, tuvimos sexo y no lo recuerdo, nos besamos hace unos minutos, pero nos hemos besado antes, incluso en ese cuarto, con esa pijama, que era rojo como la manzana del paraíso. Yo no estoy segura si era una manzana y si era roja, pero estaba en el paraíso y fue la responsable de la caída de Eva, pero yo no era Eva, yo era Winter, soy Winter porque no cambié mi nombre y...

"¿Estás bien?" Mi alma salió de mi cuerpo y regresó cuando noté que ella estaba cerca de mí, muy cerca, invadiendo mi espacio personal que quería ser invadido.

"El Ferrari rojo es mío." le advertí entregándole el joystick y me alejé, quitándome los zapatos y sentándome en la cama que ella había hecho.

Yo necesitaba distraerme de mi distracción, pero ella necesitaba colaborar conmigo y respirar a una distancia mínima de cincuenta metros de mí.

Pero ella no quería colaborar conmigo.

Sentí el colchón hundirse a mi lado y por el rabillo del ojo la vi con el joystick en las manos y la mirada almendrada pegada a la pantalla.

Mirada almendrada... No mirada almendrada, su mirada era marrón claro como las heces de un niño recién nacido, para que puedas entenderlo mejor y no se vea tan extraño.

"¿No das las órdenes?" Se suponía que debía mirarla a la cara cuando me hablara, pero involuntariamente mi mirada se dirigió a su escote.

¿Qué me estaba pasando?

"¿Sabías que Philip Sheridan fue general del ejército estadounidense entre 1883 y 1888? También le gustaba dar órdenes."

¿De qué estaba hablando?

"Lo sé" sonrió "Eso lo estudiamos en Historia, pero me refiero a los comandos del juego. Te gusta ser el jugador 1."

"Oh, está bien" Asentí y aparté la mirada de su escote hacia la pantalla y comencé el juego, pero no funcionó muy bien porque no podía concentrarme con ella tan cerca.

No sé qué pasó, pero algo pasó, se desencadenó dentro de mí y toda la concentración habitual que dedicaba a los juegos ya no existía.

¡Era el pijama, estaba segura!

"¡No se puede hacer así!" exclamó, pausando el juego y haciéndome saltar del susto. "Te estás golpeando en cada curva y no es divertido." Se levantó de la cama y fue al videojuego "Veamos una película y luego volvamos a jugar, ¿vale?"

Quizás la película me distraiga más.

"Tengo calambres en la mano porque estuve mucho tiempo andando en bicicleta y mis dedos se quedaron en la misma posición por mucho tiempo" Mentí y ella accedió a ponerme una película, cosa que no me importó saber cuál era, apagó la luz. Esa vez vi bien su rostro y ella me sonrió antes de tomar mi mano derecha.