UN RECUERDO DEL NORTE

SANSA

La marcha había sido muy agotadora pero tenía esperanza de que ese día al fin llegaría a encontrar a Jon, pues las noches habían sido largas y tenebrosas pensando en que si estaba sano y salvo, pero el lugar donde estaban llegando no era uno de los mejores.
Según sus hombres ese atardecer habían llegado a el puño de los primeros hombres, pues la noche anterior sus soldados habían divisado fuego en aquella colina.
Sansa había escuchado historias de ese lugar y batallas que se habían librado allí años antes no solo eso sino siglos antes, un lugar plagado de historias de los caminantes blancos, hoy con el nuevo amanecer que había llegado gracias a la batalla de la larga noche Sansa encontró una cima antigua y sin rastros de magia antigua, pues como su maestre había dicho años antes, la maldad y oscuridad que asechaba en estas tierras se había extinto para siempre.
Al llegar allí montaron un campamento, habían encontrado rastros de un asentamiento viejo y unos cadaveres de hombres asesinados y algunos comidos, ella no se animó a verlos, pero esa noche no apartó su espada de su cama. Sentía la necesidad de estar protegida.
Esa noche soñó que estaba en winterfell, dando su pecho a un pequeño frente a las llamas de su chimenea. En su habitación había una cuna y en ella dejó a ese pequeño, al darse vuelta encontró la silueta de un hombre sentado frente al fuego.
En su espalda reposaba unas pieles como las que usaba su padre, y en su regazo estaba la antigua espada de la familia, hielo estaba allí siendo limpiada por un paño blanco.
-debo blandir la espada porque ya he dado mi sentencia- dijo una voz conocida para Sansa que la hizo temblar por completo cuando se dio cuenta que Jon estaba frente a ella limpiando la espada de su padre, pero el hombre que veía ante sus ojos era un Jon snow con mas años y Sansa juraría que más batallas encima que la última vez que lo había visto.
Cuando quiso tocarle su rostro se despertó tan asustada por el respiro jadeante de ghost quien había entrado a su carpa y sus guardias no sabían cómo detenerlo.
-mi reina lo siento pero- dijo el hombre cuando el lobo se acercó a ella y trató de empujarla para que se levantara.
- que sucede viejo amigo- dijo Sansa cuando abrazó al lobo huargo con tanta fuerza, este último le mordió su ropa y trató de sacarla de la cama.
-que quieres ghost? Quieres mostrarme algo?- preguntó Sansa cuando salió de su cama y al colocarse una de sus mantas salió al exterior del campamento, viendo como el lobo enorme salió corriendo y a mitad de camino volteo hacia ella y sus grandes ojos rojos se clavaron enseguida en los suyos.
- quiere mostrarnos algo, sigámoslo de inmediato- ordenó Sansa cuando sus soldados marcharon de inmediato.
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El día había comenzado y la bestia los guiaba muy lejos del la colina donde habían descansado, pero esa misma mañana había llegado un cuervo con malas noticias del sur.
La triarquia había tomado muchos territorios cercanos a la ciudad de King lannding y pronto atacarían el reino de su hermano, y ella estaba tan al norte que no llegaría a protegerlo.
Además sus hombres no habían respondido a su llamado, pues creían que no eran asuntos del norte y que la triarquia cuando llegara a esas tierras se verían con los norteños, no antes.

Sansa muy en sus pensamientos marchaba pero nunca se dio cuenta que a unos pocos metros se encontraba un vigía que les lazo un grito en advertencia y el lobo huargo saltó en su defensa y en cuestión de segundos ese hombre era un cuerpo sin vida.
- debemos estar cerca- dijo uno de los guardia de Sansa cuando se sintieron más gritos y en cuestión de minutos estaban a rodeados por estos salvajes con hachas.
Sansa bajó de su caballo y desvaino su espada y en ese momento comenzó una batalla, pequeña pero a fin de cuentas una que dejó varias victimas, el lobo jamás se alejó de Sansa hasta acabada la pelea.
Fue cuando uno de esos salvajes trató de apuñalar por la espalda a Sansa que el lobo saltó en su defensa y lo tumbó, antes de morir dijo algo que ella logró entender enseguida.
- nuestros barcos...nosotros ya estamos en tu castillo- dijo  el hombre antes de morir por las mordeduras del lobo.
- mi reina por aquí- dijo el soldado que había encontrado a las carpas donde dormían estos individuos y fue ahí donde encontró a los prisioneros.
-tormound- dijo Sansa cuando se abalzo a abrazarlo y buscar la forma de cortar las cadenas.
- estás bien- preguntó ella cuando un hombre del fondo le dio una gran manojo de llaves que había sacado del cuerpo sin vida del nórdico que los protegía.
Sansa en su momento no se dio cuenta pero al tocar su mano al recibir las llaves para abrir el candado vio que detrás de tanta barba y suciedad que tenía ese hombre estaba el.

Notas: se viene los últimos 4 capítulos de esta temporada y luego cambia la forma de escritura, va a ser como escribí mis otras historias. Porque la narrativa se vuelve más grande debido a lo que se viene, amor, momentos muy subidos de tonos, personajes nuevos y batallas.