UN RECUERDO DEL NORTE

Una noche de tormentos

La tormenta sacudía el campamento, la lluvia parecía tan fuerte que Sansa pensó que todo se llenaría de agua en cada parte de su carpa.
Estaba en su escritorio con algunas de los mensajes que habían llegado de los diferentes señores del norte, algunos no habían sido atacados por los invasores de las islas de skagos.
Otros por su parte solo enviaban una carta con el emblema de la casa magnar, lo que significaba que habían sido tomados prisioneros.
En esa noche tormentosa y de muchos rayos, ella se encontraba iluminadas por algunas velas, pues como reina del norte, le habían armado una carpa a su nivel, solo que ella necesitaba un buen descanso pues desde que habían cruzado la muralla y dejado atrás castle black no había dormido bien.
Pero ella a sus pies tenía a la pequeña lady, pues si, Jon había encontrado a esa manada de lobos huargos al otro lado de la muralla, ghost los había guiado hasta una loba con crías pues parecían hijos del huargo de jon.
Esa tarde que habían encontrado a los pequeños lobos, Jon había tomado a uno de ellos una hembra con pelajes rojizos y blancos, además tenía los ojos rojos como ghost, en una de las noches en cástle black Jon había regresado del otro lado con ese hermoso regalo.
-creí que necesitarías alguna compañía en las noches, nunca reemplazada a lady, pero espero que pueda hacerte feliz como ghost lo hace conmigo- había dicho Jon cuando se apareció en su recámara con esa pequeña criatura en brazos.
Esa noche Sansa lo abrazó fuerte y levantó a su nueva loba en brazos.
- puedo saber cómo la llamarás- preguntó Jon con esa sonrisa tímida que siempre tiene.
- lady, no tengo otro nombre para ella que no sea ese, ella fue arrebatada de mí hace tanto tiempo atrás y hoy tú me traes de nuevo como aquella
Vez a otra, prometo jamás dejarla sola- dijo Sansa abrazándola y sintiendo ese hermoso pelaje en su rostro.
Jon por su parte la observada, sin poder pronunciar una palabra al respecto pero algo sintió en ese momento que hizo tratar de irse.
- Jon espera, gracias... puedes qued...- trató de terminar Sansa con ese nudo en la garganta de invitarlo a descansar en su aposento ya que se sentía demasiado sola.
-debes descansar Sansa, mañana partiremos a winterfell y serán días muy largos y pesados- dijo Jon dando media vuelta cuando sintió que Sansa se le quedó mirando por unos segundos y el trato de no frenar, pero Jon juró sentir que Sansa no dejaba de mirarle cuando bajaba las escaleras del castillo.
- si regreso y le digo que... no no basta - dijo Jon cuando en medio de la noche alguien le habló.
- aún no quieres abrir tu corazón no es cierto- dijo una voz conocida saliendo de la oscuridad.
-te dije que me dejaras en paz- afirmó Jon en medio de la noche y en el patio del castillo.
Deanerys estaba apoyada a la puerta de los establos, llevaba la vestimenta de aquel fatídico día y Jon juraba que entre las sombras que generaban las antorchas podía ver su daga en el pecho, aquella que le quitó la vida ese día.
- yo no estoy aquí, tú me tienes aquí o a donde tú vayas, yo estaré ahí- dijo deanerys tratando de acercarse a él.
-TU NO ESTÁS AQUÍ, TU NO ESTÁS AQUÍ- dijo Jon tratando de alejarse lo más que podía de allí.
- no... no lo estoy gracias a que tú me asesinaste, y ahora que piensas que tiene un nuevo propósito crees que te olvidarás de lo que hiciste- dijo deanerys cuando se acercó a su espalda y trató de apoyar su mano en el
Hombro de Jon.
- no... no empieces de nuevo... hice lo que tenía que hacer. Tu mataste a millones ese día y hubieras quemado a miles más si seguías con vida, tu idea de reinado era acabar con quien no pensaba igual que tu... tú no eras así, westeros te convirtió en esto y yo fallé en no apoyarte en esos momentos pero... ibas a acabar con ellos... ibas a matarlos, la matarías y jamás me hubiera perdonado- dijo Jon con lágrimas en los ojos a la luz de la luna y de las pequeñas antorchas.
- dilo Jon... di lo que te decías esas noches en las que tenías pesadillas, temias a lo que les haría si llegaba a winterfell, aún sueñas conmigo quemando viva a Sansa, Arya y bran- dijo deanerys cuando Jon vio que su rostro se ponía más oscuro y los rasgos de esa mujer se convertían en las de un cadaver putrefacto.
-jamás volverás amar alguien... ella jamás te amara como quieres... jamás dejarás de recordarme, yo soy parte de ti, de tu historia- gritó deanerys antes de abalanzarse hacia él y Jon tratar de cubrirse el rostro cuando ella gritó desde arriba.
-Jon estás bien- dijo Sansa cubierta con su capa y con una antorcha en la mano.
Jon salió corriendo de regreso a su habitación dejando a Sansa asustada por los gritos que había dicho Jon en medio de la noche, solo y con su rostro que parecía haber visto un fantasma.
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La noche no lo había dejado dormir a Jon, había tomado un tazón de sopa caliente y cubriéndose el torso con una camisa araptienga salió de su pequeña carpa que había armado, la marcha de esos días había sido larga pero atrás hace dos lunas habían dejado el castillo de la guardia de la noche.
Jon cambió solo a la luz de la luna, era una noche acalorada de verano, el viento suave que soplaba era un alivio para el, al comenzar una caminata lenta bajo las estrellas el sintió la necesidad de despejar su cabeza ya que estaba pensativo de todo lo que había sucedido los últimos días, si bien marchaba junto a Sansa, no habían hablado muy seguido desde que ella lo descubrió hablando solo en el patio del castillo.
Sin darse cuenta Jon se había alejado bastante del campamento, había llegado a un cruce entre caminos en medio de la noche y se veía a lo lejos que se acercaba una tormenta de verano peligrosa y con intenciones de no dejar de llover en varios días.
-caminatas bajo las estrellas son ayuda para una mente atormentada- dijo una voz de un hombre a las espaldas de Jon, quien se dio lentamente media vuelta y se encontró con un hombre calvo a simple vista.
-disculpe la molestia mi lord- dijo el sujeto cuando dio una reverencia y quiso alejarse de Jon.
- no pasa nada, estaba simplemente tomando aire- dijo Jon cuando este le dio una sonrisa y regresó a él.
- agotado del viaje o de las circunstancias del viaje- preguntó el sujeto al darse cuenta que no se había presentado.
-disculpe mi lord no me presente mi nombre es Gunter- dijo el sujeto dando una pequeña sonrisa.
-Jon... Jon snow, si un poco agotado del viaje y el clima- terminó Jon cuando vio que el sujeto comenzó a acercarse a donde parecía haber un tronco cortado al costado del camino.
El sujeto se sentó y sacó un pequeño espejo de su bolsillo.
- si es largo este viaje, los he acompañado desde lejos a la caravana, soy un comerciante de espejos, se viene tiempos de guerra de nuevo y el reino necesitará que su reina esté al nivel que necesitan- dijo Gunter cuando volvió su vista a Jon, - usted estará para ayudar a su reina- preguntó el hombre cuando Jon no parecía confiar mucho pero respondió.
- lo que ella necesite yo estaré ahí para ayudarla, es lo que me importa, ahora si me disculpa me retiraré- dijo Jon cuando dio media vuelta y gunter le respondió rápido.
- haría lo que fuera por ella no es así- preguntó el sujeto que estaba de pie en medio del cruce cuando Jon dio media vuelta y lo encontró allí y detrás de el sujeto comenzaba a verse la tormenta fuerte que ya estaba cada vez más cerca.
- siempre- dijo Jon dando media vuelta alejándose de él
Sujeto y de la tormenta que se acercaba .

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Sansa se había acostado de nuevo luego de ver tantas cargas el sueño y el ruido de la lluvia le había provocado demasiado sueño, al despojarse de toda su ropa y quedar en una suave túnica que acariciaba sus pechos y todo el resto de su cuerpo se recostó en su cama y sentía los truenos de la tormenta afuera de la carpa
- maldición esta cama es un desastre- dijo Sansa tratándose de acomodar para consiliar el sueño ya que era demasiado tarde, al acostarse trató de no pensar en mucho y en especial en Jon.
Aunque había visto a Jon esa tarde cortar unos leños para el campamento y lo había visto con pocas ropas debido al calor, recordaba su piel sudada y su cabello hacia atrás, había visto sus manos, no podía negar que algo dentro de ella estaba florenciendo, algo que hace años no pasaba, algo que estaba deseando sentir en mucho tiempo.
Sansa por unos segundos trató de llevar una de sus manos a su entrepierna pero de solo pensar que podía hacer trató de borrar esos pensamientos no correctos de su mente, cuando sintió algo moverse en su cama y al darse cuenta tenía una serpiente de cascabel enrollada dentro de las sábanas en un segundo se levantó de pie frente a la cama vio que ese animal estaba allí enrroscado enojado y haciendo ruido al verla parada, el grito de Sansa en ese momento fue grande que juro pensar que había despertado a todo el campamento pero con los truenos era imposible escucharla. Fue en ese momento extraño que todas las velas se apagaron y todo se volvió oscuro, desde la entrada de su carpa un viento entró y juro ver una sombra ingresas tan rápido que la empujó acercándose a la cama.
Fue en ese momento que sintió la mordedura en su mano y allí su vista se nubló pero al caer al suelo vio que una sombra negra se alzaba ante ella pero se desarmó al ver entrar a Jon con una antorcha todo mojado y llevarse puesta esa sombra negra que la observaba.
Su salvador o eso pensaba ella, solo sintió que su cabeza se apagaba y su pecho se cerraba, sentía irse de ese mundo sentía que ya no vivirá y vería un nuevo amanecer.

NOTAS: VOLVIMOS NUEVA TEMPORADA NUEVOS CAPÍTULOS NUEVOS PERSONAJES.
Se viene una historia con algunos personajes que van a ser importantes, con tramas que espero que les guste, solo les puedo comentar qué cosas antiguas han despertado y que el norte se volverá centro de algo mucho más grande, Sansa y Jon comienzan a sentir esa chispa de deseo.
Quiero que dejen su mg y comenten, compartan esta historia que me ayuda a seguir. Los
Quiero a todos