Capitulo 9. Ozzy

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Entonces, ¿Qué opinas?

Pregunta una voz a Ryley con cierta expectación proveniente del hombre grande de piel oscura, con un pañuelo en la cabeza y las mejillas henchidas en una sonrisa que está parado justo frente a él.

-Tiene un sabor... interesante. Cómo pescado pero sin ser pescado.-dice Ryley mientras se saca la cuchara de la boca- Está muy bueno, Ozzy.

El cocinero sonríe halagado desde detrás de su barra en el Snap Blu, la cafetería principal del Aurora. Ozzy siempre ha estado dispuesto a servir comida deliciosa a quien la pida, aunque Ryley, como buen amigo suyo que es, rara vez espera a las horas de servicio y siempre llega temprano para probar lo que sea que Ozzie haga para el día. A Ozzie realmente no le importa, disfruta de la compañía en las mañanas

-Genial. Me preocupaba porque es una receta nueva-dice Ozzy mientras sirve a Ryley una taza de café y su segundo tiempo, un pay de carne con patatas chinas.

- Pues está genial. ¿Qué dices que es esta cosa?

-Veloute de tardigrados.

- ¿Qué?

- Sopa de osos espaciales.

- Ahhhh. ¿Verdad que no es tan difícil hablar en estándar?

- No es mi culpa que seas un inculto de pelos parados.

-Auch.- dice Ryley con fingida indignación, para luego, acabar riéndose junto al cocinero. Ryley luego procede a terminar su desayuno mientras que Ozzy pone los platos en una máquina que los limpia automáticamente.

- ¿No te quedas para el postre?

- ¿Son nueces otra vez?

- Ya sabes que si.

- Entonces no. Ya estoy harto de comer esas cosas.

- Je. Culpa a tu jefa y al tarado de Berkeley por eso- menciona Ozzy con hilaridad.

-¿Cómo?

- Lanzaron al espacio todos los postres deshidratados.

- ¿Esos fueron los suministros que se perdieron con el agujero? Rayos, pense que era algo menos importante... Como el depósito de baterías.

Vuelven a reír, esta vez más fuerte, lo suficiente para que alguien se queje golpeando en el muro contrario de la cafetería, maldiciendo por la hora. A veces Ozzy olvida que hay cabinas ahí y que su jornada empieza mucho antes que las de muchos.

-Jeje. Bueno, ¿Cuánto te debo, Ozzy?

-Lo de siempre. Esto viene incluido con tu pase de comida.

Es una mentira, y Ryley lo sabe. El pase de comida solo incluye barras energéticas y café. Pero, a discreción de Ozzie, este puede dar ciertos pases premium.

- Je. Gracias, Ozzie. Eres el mejor.

- Lo sé, lo sé. Ahora ya vete antes de que alguien sepa que te doy comida antes de tiempo.

- Vale. Nos vemos en la cena.

-Nos vemos.

Pero la cena nunca llegó.

Esa fue la última vez que supo de Ozzy, la misma mañana de la catástrofe. Y era hasta ahora, una víctima más en la mente de Ryley, una sonrisa, un amigo que no volvería a ver, de ello estaba seguro.

-¿¡Qué demonios, muchachos!? ¡No nos advirtieron que esto podría pasar!?

Era su voz, no había duda. Y sonaba tan desgarradoramente asustado. Ryley jamás lo había escuchado asi, es más, Ryley no recuerda ni una sola vez que el hombre no se estuviera riendo.

Hope runs deepWhere stories live. Discover now