𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐦𝐚𝐥𝐝𝐢𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐲 𝐇𝐮𝐦𝐚𝐧𝐨𝐬 [ Sukuna y tu]

capitulo 25

NATSUMI

Me levanté con mucho dolor del cuerpo sin embargo estaba aún más preocupada por Suki. El había huido después de que Sukuna me reclamará sobre Kisho y Kenji

Me levanté torpemente mientras mire a mis espaldas en el futón a Sukuna el cual se encontraba dormido

Qué horas serían? Tal vez sea de noche...

Salí de la habitación. Tal vez Uraume lo este cuidando así que debería de ir a verla

Estaba apunto de cruzar el pasillo cuando una mano tapó mi boca y me estampó suavemente contra la pared de madera

–Uhmmm!

–Silencio, mujer de los dulces! – Era Kisho el cual me susurraba así que poco a poco el retiro su mano la cual se encontraba vendada

–Kisho...

–Je. Se que me extrañaste Mujer – Sonrió egocéntrico –Pero no te preocupes

– Que le ha pasado a tus manos? –La poca iluminación del lugar solo me daba a ver algunas vendas

– Tu esposo me ha cortado las manos

– Mi esposo que..!? – Me volvió a tapar la boca algo histérico

– Shhh! Vas a hacer que me corten la cabeza! – Murmuró bajito reclamandome

Aparte un poco sus "manos" para preguntarle que fue lo que ocurrió

– Una escena de celos. Eso ocurrió –Se tomó la cabeza algo adolorido – Y pensar que tienes ese imbécil como esposo, mujer de los dulces

–Te... Te corto las manos... En verdad?

– Si. Sin embargo mi técnica Ritual inversa me permite recuperarlas aunque...

El me mostró su mano derecha donde sus dedos del medio y anular no se regeneraron

Nunca imaginé ver a alguien sin dedos

– Lo más probable es que use esto – Saco de su bolsillo un material metálico – Puede reemplazar mis dedos...

Tan solo asentí culpable

– Lo siento... No sabía que ir a verlos iba...

– Fue mi culpa – Sonrió calmandome – No te preocupes

–  Entonces será la última vez que nos veamos – No quería que nada les ocurriera por culpa del Celoso de Sukuna

– Nah. Por supuesto que no –  Me jalo empezando a llevarme de nuevo a su habitación – El no tiene por qué enterarse

Sonreí emocionada ante la idea. Es decir.... En este lugar no tenía ningún amigo aparte de Uraume que parecía estar ocupada todo el día

Me deje llevar por Kisho. Al abrir la puerta Kenji nos miraba con un cigarro en mano