¿Crees en las casualidades? Porque yo no.
Frecuentábamos el mismo lugar, estábamos con las mismas personas, compartíamos los mismos horarios cada día desde nuestra infancia, ¿Cómo no pude notarlo durante 8 años? Conocernos no fue una casualidad, e...
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–Nunca saldrás de mi protección, Linda. ¿Cuándo lo vas a entender?
El sonido de sus pasos acercándose resuena por toda la habitación.
–No teníamos que llegar a esto, pero no estas poniendo de tu parte, ¿Cómo debería castigarte?
El frio filo del cuchillo recorriendo mi espalda me provoca espasmos hasta que un dolor desgarrador me abarca amenazando con caerme si no estuviera atada a esta silla.
–Mía y solamente mía, ¿entiendes, linda? –Me dice al oído mientras toma mi cabello con fuerza para después soltarme bruscamente e irse.
– ¡Halley despierta ya!
El grito de Ryan hace que regrese a la consciencia.
–¡Casi te atropellan! –Exclama embravecido y June bufa mientras me revisa– Tenemos que ir a la policía, debe haber una cámara o algo que tomara su matrícula, lo podrán rastrear y...–Dejo de escuchar sus palabras y me abrazo a mi misma, solo quiero olvidarme de esto.
Observo a June mientras se remueve incomoda, sé que quiere preguntarme algo, pero no sabe cómo hacerlo. Empieza a jugar con sus manos y huye de mi mirada, lo que tiene para preguntar no será bonito.
–Halley, ¿Has recibido algún mensaje o llamada? –Su tono de voz es cauteloso.
– ¿A que te refieres?
–Sabes a que me refiero, no finjas ignorancia conmigo, solo quiero una respuesta si o no–Pregunta tajante.
–No.
–Bien.
Se levanta y se va con Nash dejándome sola. Sé que he mentido, pero este no es su asunto, no debe verse involucrada en todo esto.
–Levántate Halley, nos iremos ya –Ryan determina y yo no me muevo– ¿No me escuchaste?
–Si lo hice, pero no te prestare atención– Me encojo de hombros y el frunce el ceño.
–Casi mueres.
–Pero no lo hice.
–Pudiste hacerlo.
–Pero sigo viva.
El resopla visiblemente molesto y yo me pongo de pie acercándome.
–Puedes irte y dejarlo ganar, o terminar lo que empezamos restándole importancia y poder, quiero ayudar a la fundación y no me iré hasta que cada caja este llena y hayamos podido lograr el objetivo, esa es mi decisión, nunca decidas por mí. Ahora decide por ti y yo respetare tu elección–Sentencio mientras me alejo, pero su mano detiene mi andar.
–No harás esto sola, lo haremos juntos.
Ojalá fuera verdad.
– ¿Cómo puedes llevar todo este asunto tan tranquila? Casi mueres...-Susurra curioso mientras aun sostiene mi mano. Busco sus ojos pero esconde su cara de mi.
