Un simple profesor

Un cafe frio

Tosiendo un poco, All Might le dice: —Solo me gustaría charlar un rato contigo.

—Lo siento, pero yo no tengo ganas ni tiempo para hablar contigo. No estoy de humor para escuchar las palabrerías que me quieras soltar. Con solo escuchar tu voz, siento enojo en estos momentos—dijo Izuku, intentando salir del lugar.

—¡Espera, por favor, joven Midoriya! Solo escúchame, por favor—dijo All Might, intentando agarrar su brazo.

Izuku golpea fuertemente el brazo de All Might para apartarlo de él. —¡Mierda! ¿Por qué todos ustedes son tan molestos? Fui claro con todos: ¡no tengo ganas de hablar! ¿Acaso es difícil para ustedes entender esa maldita palabra?—gritaba fuertemente Izuku.

—Pero, ¿por qué? ¿Por qué no quieres hablar con nosotros, Izuku?—dijo All Might con duda.

—¿Eh? ¿Acaso estás tonto, All Might?—dijo acercándose al ex símbolo de la paz, para luego agarrarlo fuertemente de la camisa—. Mírame bien, "símbolo de la paz". Te olvidaste de mí, de tu puto discípulo, el que hizo el trabajo que tú no pudiste. Me robaste el puto crédito,¿No es asqueroso y repugnante ya de por sí eso, All Might? Y no te hagas el tonto. Luego de que me fui, intenté contactarte, pero ¡ni una puta respuesta me diste! ¿Y por qué? Porque ahora que estoy aquí, todos quieren pedir perdón y cambiar. ¿Les pesa la puta conciencia? Pues a mí me importa un carajo cómo ustedes se sienten. Si lo hacen solo para sentirse mejor y no dormir con culpa, será mejor que se larguen de mi vista. Yo no tengo nada que perdonarte, ni a ti ni a los demás. Pero, ¿sabes lo que más me dolió? Que yo a ti te veía como un padre. Eras la persona a la cual yo aspiraba ser. Yo... yo en serio sentí una gran decepción cuando tú me hiciste eso—terminó de hablar Izuku, para luego irse rápidamente de ese lugar.

—Yo... yo en serio lo arruiné—decía All Might, cayendo arrodillado en el suelo.

Izuku corrió rápidamente al baño de hombres, para luego encerrarse, bajando la tapa del inodoro para sentarse.

—Para, no lo hagas, por favor no llores. Vamos, no es tu culpa—Izuku sacó rápidamente un cigarrillo, pero debido al temblor de sus manos, se le cayó—. ¡Maldición! ¿Por qué? ¿Por qué nada me sale bien? Yo... yo en serio soy tan patético. Un inútil más con un sueño frustrado. Yo solo quiero estar tranquilo, ¿es mucho pedir? Solo quisiera ser abrazado por mi madre. Te necesito mucho, m-mamá—Izuku comenzó a hundirse en un mar de lágrimas, intentando calmar los llantos—. Ya para, no seas tan patético—se decía a sí mismo, agarrándose del pelo—. ¿El héroe número uno? Qué tonto—finalmente, Izuku se calmó, agarró otro cigarrillo y lo encendió, tomando una gran calada—. No tengo perfume para disimular el olor, supongo que ya no importa.

Izuku se mojó un poco la cara para luego volver junto con su clase.

—¿Qué demonios pasó aquí?—dijo Izuku con asombro, mirando cómo todos sus alumnos estaban inconscientes.

—Creo que me pasé un poco de la raya—dijo Todoroki, con un poco de pena.

—Mejor ayúdame a llevarlos con Recovery Girl.

El primer día de Izuku acabó. La semana transcurrió de manera tranquila, los alumnos avanzaban de manera lenta, lo que frustraba un poco a Izuku.

—¿Cómo es posible que sigan siendo tan inútiles? ¿Acaso no quieren ser héroes? ¿Solo quieren reconocimiento y fama?—dijo Izuku fuertemente.

—¿Tiene algo de malo eso, profesor?—preguntó un alumno.

—No, no tiene nada de malo, pero al menos háganlo bien. No es cualquier cosa la que está en juego, son vidas las que están en peligro. Dime, ¿tú serías capaz de decirle a una mamá que su hijo murió por culpa tuya, por ser tan inútil? ¿Acaso eres capaz de afrontar eso?