Capítulo 3

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Aquella noche me costó conciliar el sueño, por mi cabeza se repetía una y otra vez la pequeña interacción que tuve con Rebecca Armstrong, su belleza me había hipnotizado, tan joven con un talento innato y una personalidad exquisita, todo eso la volvía una joven perfecta.

A la mañana siguiente fui a mi lugar favorito a escribir, era una hermosa cafetería donde el personal era muy amable, ese lugar me llenaba de paz y tranquilidad.

Mi editora había pedido que termine pronto la segunda parte de mí último libro juvenil, yo era escritora de todo tipo de libros, tenía una gran imaginación, aunque los que escribía para niños me costaba un poco más, era mucho mejor en libros de jóvenes y adultos.

Me puse mis lentes para concentrarme en lo que estaba escribiendo, la joven mesera me trajo mi café favorito y se retiró, ya saben que cuando estoy muy concentrada no levanto la vista hasta que termine la idea.

-Señora Freen, nos volvemos a encontrar. -Levanto la mirada y era ella.

-Señorita Armstrong, un gusto verla. -Bajé nuevamente mi mirada al computador para terminar mi idea.

-Veo que se encuentra muy ocupada, pensé que podríamos salir a pasear, ya que aquí no tengo muchos amigos...

-¿Me considera su amiga señorita Armstrong?. -Levanto una ceja y la vuelvo a mirar.

-Se ha vuelto la segunda persona más cercana a mí en esta ciudad, podría llamarla amiga.

-Pero usted no me conoce y viceversa, ¿cómo podría ser esto una amistad?.

-Podríamos conocernos más, si así lo deseas... -Era la primera vez que me trataba de tu, su mirada era algo... ¿sensual?, ¿me estaría coqueteando?, aclaré mi garganta antes de responder.

-¿Es eso una propuesta con dobles intenciones señorita?, lo digo por su mirada. -La miro entrecerrados los ojos y una sonrisa.

Se ríe y me mira. -¿Vamos?.

-No me ha contestado, no me gusta que no contesten.

-¿Deseas que esa propuesta tenga dobles intenciones?. -Esa mirada de nuevo, me pone muy nerviosa.

-¿Cómo se encuentra su novio señorita Armstrong?.

Su mirada cambió rápidamente. -Bien, ¿vamos a pasear o no?.

-Debo asistir a una reunión con mi editora, lamento que no podré en esta oportunidad, pero si lo desea, puede ser mañana a esta misma hora. -Su sonrisa volvió a aparecer.

-Te estaré esperando y por favor, tratame de tu, no tenemos mucha diferencia de edad.

-Si así lo deseas... está perfecto para mí Armstrong.

-Becky.

-¿Perdón?.

-Dime Becky.

-Comprendo, adiós... Becky.

Me retiré del lugar y fui a la editorial, en todo el camino pensé en Becky, de verdad sentí que fue coqueteo, pero ella tiene novio y yo estoy casada, ambas somos heterosexuales, ¿le entretiene coquetear con las personas?, ¿será que así es la gente de su edad?.

Me hice mil preguntas, pero no llegué a la respuesta de ninguna, en la reunión mi editora, Nam, me dijo que querían hacer de mi libro una película, eso ya lo sabía, pero ahora pedían mi presencia a la hora de grabar, deseaban que fuese lo más parecido al libro, acepté la oferta, la próxima semana comenzarían la grabación, ya que tenían a todos los actores.

Aparte de escribir me tocará observar, serán unos meses muy largos, o eso pensé en ese entonces.

Aquel día llegué más tarde de lo común a casa, al abrir la puerta me llevé una gran sorpresa, los hermanos Armstrong estaban presentes.

Un Amor Eterno. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora