Final ¿?

46 3 0
                                    

Otra vez no...., Otra vez.... – el murmullo parecía atascado en su garganta. Intento retroceder lentamente hasta que su espalda choco con el muro apilado de pupitres viejos.

Antes de que pudiera lanzarse hacia la rejilla de ventilación , Paco la agarro del tobillo impidiéndole cualquier huida.

Quieta ahí... pequeña salvaje! – le dijo subiendo la mano hasta sujetarla de la cintura .

Noooo...., noooooo..... pateaba Eva desesperada.-- la sujeto de los brazos ,empezando a chillar aterrorizada , sujeto las muñecas cruzadas tras su espalda , atándola con un cable suelto del suelo.

Sera mejor que paressss, o te lo aseguro sera mas doloroso! – dijo propinando un azote al culo de su hija ,-- Créeme , me encantara que te resistas....-- chilla cuanto quieras! – termino arrojándola sobre un oxidado escritorio .

Cabroooonnn...., sueltameeeee, hijoooo de putaaaaaa!-- Grito pataleando su hija .

Esoooo essss...., la altura perfecta !, pronuncio Paco detrás de su hija , acercándose. la sujeto de los hombros colocandola tan echada como pudo, la cabeza y los hombros asomando al otro lado, paso su mano sobre la gastada tela de su falda levantándola sin contemplaciones.

El carnoso culito apuntaba hacia arriba invitándolo, se relamió ante lo duro que seria esta vez su castigo. Poco le importaba los chillidos , los insultos eran su única arma .

Salidooooo de mierdaaaa, hijoooo de putaaaaa! – intento revolverse rabiosa.

Tu sólita te los buscaste, hija! – termino sentenciando mientras su mano agarraba la braga y estiraba con fuerza rasgando la tela. – Y aquí esta Papa, para corregirte !

Nooooooooo! Aulló Eva! – No me hagassss nadaaaa,-- sollozo devilmente.

Paco no pudo dejar de admirar el jugoso culo de su pequeña Eva, aquellas interminables piernas cubiertas por calcetines escolares. – Como no ponerse cachondo!-- se dijo.

Ay peque, no sabes como voy a gozar reventándote el ojete..., Dios sabe que voy a disfrutarlo bien a fondo!-- acabo riéndose con fuerza.

Por favoooor, pooooor favoooor – suplicaba entre lloros-- Te juroooo que ….! – lloriqueo.

Estaba empalmado , el bulto de su rabo estirando la tela de su pantalón empapado. Ante él, el cuerpo de su hija pequeña estirada boca abajo, la pobre llorando con las piernas colgando ; el culo al aire, la apetitosas cachas y los pelillos rizados en la parte baja. La postura perfecta.

Tomo algo de distancia, pudo escucharlo detrás de ella, retrocediendo, quizás después de todo había recuperado la poca cordura. Momentáneamente suspiro aliviada, aun no pudiendo moverse , sabia que seguía tras ella. Antes de que volviese a suplicarle escucho el ruido de algo mojado cayendo a peso sobre el suelo. Intento girarse, pero no pudo.

Había decidido soltar el palo con el que iba a castigarla, no quería cegarse por la furia y dañarla seriamente, la correa le pareció mas apropiada, se desabrocho los pantalones mojados ,recuperando la correa del suelo. Anudo una vuelta en su muñeca y se dirigió hacia la pequeña eva empuñándolo.

Recordaba muy claramente como había usado la misma artimaña para castigar a sus preciosas hijas mellizas, el primer azote voló en un seco movimiento de muñeca.

Zaaaaaaasss....-- golpeo a Eva , provocandole el pinchazo y la quemazón inmediatamente.

Se tensó aterrorizada, comenzando a chillar .

Grito a pleno pulmón, pero no le dio tiempo a volver a repetirlo y la zurro en la nalga izquierda. Retrocedió para poder contemplar las primeras señales rojizas cubriendo el glorioso culito de su niña pequeña.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 19 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Hijas rogando, Padre castigandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora