¡𝙴𝚗𝚝𝚛𝚎𝚗𝚊𝚍𝚘𝚛𝚊 𝙻𝚒𝚗𝚐! ⊰⁠⊹ฺ ෆ [LingOrm]

⁠*⁠.⁠✧ Capítulo 5｡⁠*ﾟ⁠+

- ¿De cuánto estamos hablando? - Ying pregunta en un susurro, sentada en el sofá justo al lado de Ranlada.

En la pantalla del televisor una película de Disney estaba pausada mientras que se escuchaba el microondas desde la cocina, dónde aorm se encontraba preparando las palomitas, canturreando mientras esperaba que estuvieran listas.

- De mucho - Ranlada dice abriendo los ojos, pero manteniendo el tono de voz bajo para que su madre no pueda oírla.- Igual que... ¡Igual que cuando aquella chica rubia venía a la panadería todos los días y olía demasiado a mora!

Ying abre los ojos con sorpresa, pera una sonrisa se dibuja en su cara.

- Esto es...interesante. Tu madre no suele usar mucho perfume - Se gira para mirar bien a su sobrina y sonrie cómplice - Ranlada Kornnaphat, necesito que me vayas informando.

- Oh, lo haré, te puedes unir a mi equipo con Piyawat.

Ying sonríe divertida.

- Estoy dentro.

Ranlada sonríe emocionada y asiente, como si aquello probará si punto.

Para ella, todo aquello era fascinante porque por primera vez desde que ella nació, ve a su madre sentir algo por alguien más. Y si es sincera, Ranlada adora a su entrenadora, la forma en la que le cuenta cosas de sus hermanas pequeñas, le enseña a jugar un deporte que le apasiona y es súper amable, divertida y pone nerviosa a su mamá.

Así que, si tiene que compartir a su persona favorita en el mundo con alguien, le gustaría que fuera con su entrenadora Ling.

- ¿Tu cómo sabías que te gustaba la chica de los tatuajes? - Pregunta entonces con curiosidad.

Ying suelta una pequeña risa, un tanto sorprendida ante la pregunta.

- Pues porque cuando la veo me siento bien y me hace sonreír mucho.- Intenta responder simple para que la pequeña castaña pueda entenderlo.

- La entrenadora Ling hace sonreír a mamá - Exclama un poco fuerte y enseguida se tapa la boca con ambas manos.- ¿Cómo te hace sonreír si no te gustan los tatuajes?

Ying vuelve a reír y niega.

- No nos tienen que gustar las mismas cosas para que me haga sonreír, pero si te soy sincera, ella cree que me gustan mucho los tatuajes.

La pequeña frunce el ceño h mira a su tía con sorpresa.

- ¿Pero eso no es mentir?

- No, porque los suyos me gustan mucho.

Ranlada asiente y sonríe.

- ¿Y que más?

- Bueno pues también quiero pasar más tiempo con ella, ver películas juntas y esas cosas cursis que hacen en las pelis.