Epílogo

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Pooh se inclinó y besó a su compañero en la boca, sorprendiendo al hombre un poco, lo que le encantó a Pooh poder hacer.

No fue difícil, sobre todo porque el hombre se aferraba a su pequeña hija, totalmente cautivado en presentarla al resto de los miembros de la manada, lo que había estado haciendo en cada oportunidad que tenía desde que ella y su hermano habían nacido.

―Feliz aniversario atrasado.― dijo Pooh.

Pavel sonrió hacia él, sus ojos brillantes cuando se agachó para tocar la cabeza todavía suave de su hijo, al que Pooh estaba sosteniendo.

Los dedos de Pavel amorosamente trazaron las orejas de lobo suaves que fueron asomándose por la parte superior de la cabeza del niño. El niño estaba durmiendo en ese momento, y las orejas del cachorro se crisparon un poco cuando su padre las acarició.

El corazón de Pooh se derretía cada vez que veía eso. Adoraba la forma en que su compañero parecía amar genuinamente las diferencias que Pooh y su hijo compartían, en comparación con los otros hombres lobo.

―Feliz aniversario atrasado para ti también.― Respondió Pavel, mirando hacia atrás hacia él, y luego presionando otro beso en su boca.

―Tus labios saben azucarados. ¿Qué estabas comiendo?― Preguntó Pooh.

Estaba teniendo un enorme deseo de dulces en ese momento.

―Hay cheesecake sobre la mesa justo ahí.―Le dijo Pavel, asintiendo con la cabeza hacia la mesa de picnic, donde se apilaban todo tipo de alimentos.

Mark se había vuelto un poco loco preparando todos los platos y dulces, pero la gente en la manada parecía estar disfrutando del hecho de que hubiera un chef profesional en la propiedad, ya Mark le gustaba poner su talento en utilidad en cada oportunidad.

Los miembros de la manada se reunían alrededor, celebrando o simplemente relajándose bajo el sol. El invierno vendría pronto, y hoy probablemente sería el último día cálido que tendrían hasta la próxima primavera.

Con el trabajo de Pavel, y sus responsabilidades para con el resto de la manada, y los nuevos gemelos, su celebración de aniversario tuvo que postergarse. No habrían hecho nada si no fuera por Mark, que no sólo había cocinado una tonelada sino que a escondidas organizando la mayor parte de todo esto, junto con algunos otros miembros de la manada, sorprendiendo tanto a Pooh como a Pavel.

Después de que Pooh le diera al alfa de la manada no uno, sino dos cachorros, prácticamente había sido aceptado de todo corazón por todos, incluso los que tenían sus dudas al principio.

Por supuesto, después de lo que pasó con Winner y Dean, Pavel seguía siendo excesivamente protector con Pooh, e incluso había echado a un par de personas, por el más inocente de los comentarios.

Pooh nunca había visto a Pavel gritar tanto, ni hacer que tantos lobos se agacharan y le tomó un tiempo antes de que fuera capaz de convencerlo de que a veces la gente simplemente bromearía de buena naturaleza, al igual que él y su hermano hacían.

Pavel lo había dejado ir, apenas, pero Pooh siempre podía decir cuando su compañero le observaba atentamente mientras estaba conversando con otros miembros de la manada, asegurándose de que sus sentimientos no se vieran afectados.

Pooh amaba al hombre por ello.

A pesar de que su hijo nació con las orejas de lobo y cola gris, e incluso tenía señales de garras en sus manos y pies, con cojines negros horribles en sus palmas protegiéndolo como Pooh usó hace años, Pooh nunca pensó en su hijo como un defecto. Quería evitar que su hijo supiera que esa palabra siquiera existía durante tanto tiempo como fuera posible.

Pavel estaba completamente de acuerdo con eso. El hecho de que su hija fuera una cambiaformas total nacida, y probablemente una alfa, gracias al olor que desprendía, era lo que realmente le gustaba al resto de la manada. Estaban dispuestos a pasar por alto el problema de Pooh cuando había dado a luz a un alfa.

Todavía se estremecía recordando ser cortado abriéndolo y el nacimiento doloroso. No estaba seguro de que quisiera darle a su compañero más, pero su madre le había dicho que iba a querer más con el tiempo.

Pooh todavía no estaba realmente hablando con Marlia. No tenía muchas ganas de ninguna manera. Todavía no, de todos modos. Le permitió ver a sus hijos porque ella era la abuela, pero estaba claro por la forma en que cargó al hijo de Pooh, y luego adoró a su nieta alfa, que la mujer todavía tenía algunas obsesiones.

Pooh no quería ese tipo de actitud en ningún lugar cerca de su hijo.

Pavel había convenido en que tampoco lo quería. De hecho, a Pavel no le gustaba mucho que la mujer estuviera alrededor de sus hijos en absoluto, y Pooh estaba bastante seguro de que su compañero odiaba a Marlia más que a nadie en la manada. Pooh ni siquiera odiaba a su madre, ya no.

Pavel casi que le había dicho que ella nunca iba a estar a solas con los nuevos cachorros, o incluso a su alrededor, hasta que escribiera una carta de cinco páginas, disculpándose con él, y luego firmara un contrato diciendo que ella nunca utilizaría la palabra. defecto alrededor de ninguno de sus hijos.

Pooh había pensado que el contrato era un poco excesivo, pero no argumentó en contra de ello.

Todavía estaba esperando que ambas cosas llegaran. Imaginó que Marlia empezó la primera página de su carta de disculpa, y luego, incapaz de pensar en más maneras de cómo escribir lo sentía, se rindió.

Marlia estaba demasiado enferma como para darse cuenta de que lo que había hecho estaba mal, y Pooh estaba bastante seguro de que una disculpa auténtica era algo que nunca iba a salir de ella. Eso estaba bien.

Pooh hacía mucho había dejado de sentir un vacío por eso. Mark siempre estaba echando a perder a su nueva sobrina y sobrino con regalos y ropa de todos modos, y él sería la gran familia amorosa que sus hijos necesitaban.

Mientras Pooh lo tuviera, tuviera a sus dos cachorros, ya su compañero entonces estaría bien. La risa de Pavel lo sacó de sus pensamientos.

―Tus ojos se volvieron vidriosos ante la mención del pastel de queso. ¿Quieres que te traiga un pedazo?

Pooh sonoro al hombre que amaba. ―Sólo si me alimenta, también.

Oficialmente esta terminado el primer libro de esta saga.
Y gracias a todas las personas que se tomaron el tiempo de leerla aún nos quedan dos libros más de ésta hermosa trilogía que espero adaptarlos.

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Quiero morder tus orejas <PavelPooh>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora