Roanoke ha estado llena de misterios, entre ellos la desaparición de sus colonos.
Ya en el siglo XX , existen pequeños pueblos a lo largo de Estados Unidos muy apartados de las grandes ciudades, con particularidades, la principal es. Si un chico de...
La ceremonia de graduación había terminado hace media hora y todos los asistentes estaban esparcidos despidiéndose y tomando fotografías.
Katniss ese día había optado por un vestido verde agua de seda que la hacía parecer una sirena.
—¡Dejenme y les tomó una foto! — dijo la compañera de habitación de Katniss, Annie Cresta.
Katniss se puso en el medio, sosteniendo su diploma, a su derecha se colocó Laurence Snow y a su izquierda su madre y hermana. Ella sonrió ampliamente y sus padres tenían una mirada de orgullo.
Luego de las fotografías, Katniss se quitó el birrete y la toga, su largo cabello negro cayó como cascada. Ella se separó de su familia para saludar a compañeros de clase.
Cato aprovechó la distancia y se acercó a ella.
—Everdeen — la saludó.
—¿Hadley? ¿Qué haces aquí?— preguntó Katniss viéndolo con leve sonrisa.
Cato le extendió un vaso de la cafetería. Ya se acercaba el otoño y la cafetería de la universidad empezó a promocionar su menú de temporada, entre ellos el Pumpkin Spice Latte que Katniss siempre ordenaba.
—Tu último Pumpkin Spice Latte — le sonrió Cato.
Él y Katniss solo habían interactuado pocas veces. Cato se había inscrito al programa de jóvenes tutores de la Universidad solo para estar cerca de Katniss luego de que él se graduara.
Katniss sonrió y aceptó el latte.
—Gracias Hadley — dijo Katniss — Fue un gusto conocerte.
Cato le sonrió, ella se fue dándole un sorbo al Latte.
Sin saber que había una gota de sangre de Cato en el café.
—Pronto, Katniss — pensó Cato —Estaremos juntos.
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Katniss se tiró a su cama en su habitación de la infancia y recogió su laptop.
Necesitaba ver el servidor de Discord que administraba totalmente dedicado a Midnight Huntress
Desde que era adolescente, Katniss amaba esa saga de libros. Y desde los quince administraba varios foros dedicados a los libros.
A principios del próximo año sacaría el tercer libro de la segunda trilogía de ese universo y Katniss ya lo había pre ordenado, pero si sus planes de mudarse salían bien, tendría que pedirles a sus padres que le enviaran el libro a su nuevo hogar.
En noviembre, Katniss tenía en mente emprender un viaje en carretera por Carolina del Norte, Virginia y luego regresaría a casa para año nuevo y luego volar hacia Washington.
Antes de graduarse, había llegado una lista de escuelas que querían entrevistarla para el cargo de maestra en primaria, algo que la entusiasmaba mucho.
—¡Katniss! ¡La cena!
Se levantó cuando escuchó a su padre desde la sala.
Cuando estuvo al borde de la escalera, se sentó en el pasamanos para deslizarse hacia la planta baja de su casa.
En la entrada de la puerta estaba papá, aun con el saco de color gris que usaba para el trabajo, pero su corbata estaba suelta.
—¡Comida China! — anunció papá levantado dos bolsas de papel con diseño de papel chino en color rojo blanco.
—¡¿Es del Palacio de Jade?! — preguntó mamá desde el segundo piso.
Mamá bajó y Prim la siguió.
Todos se dirigieron a la cocina, era viernes y rara vez usaban el comedor. Papá se quitó el saco y mamá empezó a servir la comida.
Había fideos fríos salteados y pollo en salsa negra con arroz frito.
Los cuatro se sentaron en la mesa redonda de la cocina mientras contaban de su día. Mamá contó de la señora Flanagan, que al fin fue dada de alta. Papá dijo que pronto la asistente del subdirector financiero daría su baja de maternidad para luego sacar una invitación a su baby shower en los Hampton
Prim que ya le enviaron un correo de la universidad de Princeton donde le enviaron el número de su habitación para habitar en el Campus.
La familia celebró cuando Primrose logró conseguir beca completa en una universidad de la Ivy League, aunque se tendría que mudar a New Jersey, prometió que trataría de venir a Staten Island cada fin de semana.
—Ya armé mi mapa para mi recorrido de trabajo —contó Katniss — Primero iré a los dos pueblos en Virginia y luego a los tres en Carolina del Norte.
—¿Y cuales son los pueblos en Carolina del Norte? — preguntó papá con seriedad.
—Ya reviso — Katniss sacó su celular de su suéter y buscó en su blog de notas — Caray, Wilson y Brevard.
Katniss no pasó por alto el alivio de suspiro de sus padres.
—Estaré de vuelta para año nuevo — dijo Katniss — Pa, quería pedirte un pequeño favor...
—Te deposite $400 dólares para tu viaje de trabajo — contestó con una sonrisa.
— Gracias papi — sonrió Katniss.
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Coriolanus escuchó atentamente a su joven pupilo.
Katniss pronto iniciará una gira por Carolina del Norte y Virginia por cuestiones de entrevistas de trabajo.
—... podemos hacer que el señor Undersee envíe un correo con una oferta de entrevista de trabajo para Katniss — sugirió Cato— y he vigilado a Katniss. A ella le gusta tener muchas opciones.
—Nos puede resultar — dijo Coriolanus — Hablaré con él mañana. Es una buena Cato.
—Gracias, pastor Snow.
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N/a:
El vestido de Katniss
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