𝐱𝐯𝐢𝐢𝐢

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Heeseung quería que Sunoo tuviera un día tranquilo, pues ya mañana se cumplirá la semana en la cual Sunoo debió haber buscado un escondite lejano del portal que unia su dimensión con la de los humanos.

No tenía un buen plan en mente, pero sabía que no iba a permitir que tocaran a Sunoo bajo ninguna circunstancia, incluso si debía ocasionar otra guerra entre ángeles y demonios lo haría con tal de protegerlo de su misma especie.

—¡Sabe muy rico!, no pensé que fuera un bueno preparador de comida humana.—Dijo Sunoo llevando a su boca otro trozo de carne que había preparado

—No se dice así, puedes decir simplemente cocinero y ya.—Corrigió Heeseung, Sunoo lo miró y asintió

—Aún hay muchas palabras que debo aprender, no me familiarizó con la mayoría de ellas.—Sunoo llevo otro bocado a su boca, degustando el sabor de la carne condimentada

El ángel había llenado por completo la despensa y la nevera, tal vez aprendería a cocinar mucho mejor de lo poco que ya sabía, además, podría hacer eso como una actividad para pasar el tiempo con el demonio, ya que este también mostraba interés en la comida.

—Bueno, tendremos un buen tiempo para adaptarnos al planeta tierra.—Dijo Heeseung mirando hacia la pantalla, ambos se encontraban nuevamente en la habitación que compartían

Está vez el potestad fue quien eligió la película, aunque estaba más concentrado en ver a Sunoo, como este se emocionaba con lo que pasaba en la cinta, como degustaba la comida que había preparado con tanto esfuerzo, como sus mejillas se pintaban de carmín por su sonrisa. Sunoo es tan hermoso que no podía dejar de mirarlo.

Recuerda el primer momento en que bajo a la tierra, pensaba hacer lo que cualquier otro ángel hubiera hecho, salvar a alguna persona que tuviera problemas, pudo haber cumplido con su misión de no ser porque probó la tentación humana, terminó siendo guiado a los peores rincones de la humanidad y desde entonces, entendió que los ángeles deben ser independientes de los humanos, ni siquiera ellos dependen de ellos o de sus rivales para cometer actos de bondad o de maldad.

¿Cómo hubiese sido su pequeño diablillo cuando fue a la tierra por primera vez?, ¿Acaso tuvo las mismas dudas que él?, tuvo suerte de haberlo encontrado aquel día en el bosque, de no ser por su personalidad libre y despreocupada, Heeseung hubiera exterminado a Sunoo como su instinto le guía.

Dio un bocado a la comida que Sunoo había preparado, sabía delicioso, definitivamente Sunoo se iba a adaptar muy bien a la vida cotidiana. Por un momento pensó en todo lo que podrían hacer juntos en un futuro, tal vez aprendería muchas cosas juntos, incluso podrían tener una mascota de verdad.

Al mirar a su lado, se encontró con la piedra mascota de Sunoo envuelta en una manta, al parecer el demonio le gustaba abrigar a su mascota aunque está no necesitará precisamente estar en vuelta en una manta.

—Al señor Pringles le está gustando la película, ¿Qué crees que pase señor Pringles?, ¿El chico huira nuevamente y tendrá una vida feliz, o los entes del mal irán tras de él?—Le preguntó a su mascota, Sunoo soltó un chillido de alegría pues para él, la roca le dió la respuesta que quería

—Oye Sun, ¿Qué son tú y el señor Pringles?—Preguntó Heeseung tomando a la piedra en sus manos

—Diría que es mi mascota, pero el señor Pringles ya parece mi hijo, lo he cuidado tanto tiempo y él me ha escuchado tanto tiempo que hay una conexión mucho más grande que mascota y dueño.—Dijo Sunoo viendo al ángel analizar la piedra

—Me parece bien, ¿El señor Pringles no estará en busca de otro papá?—Preguntó mirando con una sonrisa a Sunoo, este parecía emocionarse por la idea de que Heeseung sea el otro papá de la roca

WELL, WHAT ARE WE? ; HEESUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora