Keira:
Una niña cuyo rostro se desvanece a través de mis recuerdos, me llama desde la oscuridad, sin pensarlo ni tener el control de mi cuerpo la sigo a través de un paisaje fantasmagórico cubierto por el manto blanco y brillante de la nieve.
Puedo ver el increíble parecido de nuestra cabellera lo cual me desconcierta. Un escalofrío recorre mi espalda al ver las manchas de sangre en su vestido, que contrastan directamente con el blanco de la nieve.
Ella voltea hacia mí, en la penumbra de la noche puedo distinguir como cae sangre por sus pequeños brazos, manchando la nieve mientras me invita a seguir por ese camino sola. Mis pies parecen moverse por sí solos y se hunden sin vacilar en el rojo teñido de la nieve que ahora tiene la forma de un río de sangre.
Al elevar la vista me encuentro con la mirada perdida de una mujer cubierta de heridas tiñendo aún más la pureza de la nieve. Un escalofrío pasa por todo mi cuerpo al lograr reconocer el rostro como mío, alguien me toca el hombro al voltear me doy cuenta de que es Ryan, tiene una mirada triste abre la boca para decirme algo pero un cuchillo lo atraviesa por la espalda puedo ver su pequeña punta sobresaliendo de su pecho que se mancha de sangre. Quiero tocarlo pero algo lo arrastra hacia ¿Un bosque?
Frente a mí, aparece la inquietante sombra que me atormenta desde siempre, envolviendo mi cuerpo por completo, dejándome inmovilizada. Un dedo esquelético se posa en mis labios, silenciando cualquier pregunta o palabra que pueda emitir. Una risa macabra resuena en el aire, acompañada de un escalofriante grito que podría ser de aquella niña. La sombra se desvanece delante de mí como si fuera neblina, dejándome sumida en un trance imposible de explicar.
Poco a poco vuelvo a tener el control de mi cuerpo, mis manos no dejan de temblar y el frío combinado con el miedo me ocasionan un estremecedor dolor de cabeza.
Una voz un tanto chillona resuena suavemente en el lugar y puedo percibir que a medida que la voz se vuelve más clara el lugar donde estoy se empieza a desvanecer, aquella voz llama con preocupación, ¡Keira, Keira! Abro mis ojos de manera abrupta ocasionando que la luz penetre directamente en ellos.
Mis ojos se entrecierran mientras los froto con fuerza intentando que regresen a la normalidad. Cuando por fin logró enfocar la vista me doy cuenta de que estoy en la habitación de Yris. El ambiente está impregnado con un suave aroma a chocolate que solo hay cuando Yris se enferma. Puedo sentir la suavidad y el calor de su cama, mis manos aún tiemblan y aun tengo escalofríos en el cuerpo, siento que parezco un perrito asustado.
—Keira ¿cómo te sientes? me alegra que estés despierta al fin, parecía que te estabas ahogando —me dice Yris quien se encuentra a mi lado y parece haber notado mi situación.
No puedo emitir respuesta alguna y mi cuerpo no para de temblar. Por un momento sentí que moriría.
—¿Keira? —pregunta Yris poniendo su mano sobre mi hombro.
—Yo.. —No puedo responder, sigo temblando. Siento que explotaré o me dará alguna hipotermia.
—Intenta hacer respiraciones para que te calmes, te traeré un vaso con agua y un tranquilizante. —Dice Yris al no obtener respuesta concisa de mi parte, ella está apunto de salir. Pero regresa y se sienta en la cama, seguido de eso ella me braza, puedo sentir su calidez y me siento segura junto a ella.
—Lo volviste a soñar ¿Verdad? -pregunta ella, aun abrazándome. Su pregunta me tomó por sorpresa y yo solo asiento con la cabeza.
—Esta vez, había algo diferente. Lo ví a él, Ryan también apareció en ese sueño —respondí con una voz temblorosa. Todo mi cuerpo aun temblaba. Sentía escalofríos a pesar de estar abrigada.
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Keira : Algo torcido se aproxima
Mystery / ThrillerKeira vive en un pequeño pueblo situado en los limites de Suiza llamado Sefix. Despues de un intento de secuestro fallido en su primer dia de clases las cosas solo empeorarán para ella y sus amigos, desde asesinatos en una fiesta asta secretos que n...