El Camino en las estrellas ✨

Sin Importar Que!

  Sergio estaba acostumbrado a las pesadillas ya que eran parte de su vida casi cotidiana y no había nada que él pudiera hacer para detenerlas, su mente ya conocía como un ensayo el momento exacto en el que su cuerpo solía despertarlo completamente cubierto de sudor frío,  con lo cual su mente prolongaba aún más el miedo y era exactamente cuando su padre lo lanzaba por las escaleras...

¡Por favor Noo!.. Esas pesadillas recurrentes eran una rutina sincronizada que acompañaba a su cuerpo y mente todo el tiempo... Siempre era en el mismo instante dentro de esta cuando se despertaba todas las noches completamente empapado en sudor.. pero hoy era algo diferente, se encontraba en una cama extraña completamente confundido y tratando de pensar en alguna excusa para hacer un poco menos vergonzoso el momento.

De alguna manera su cuerpo también estaba reaccionando de una manera completamente diferente, un calor misterioso comenzaba a fluir desde su cabeza a los pies llenando cada poro de su ser...

Descubrirse en una situación inusual ya era de por sí algo incómodo y todo esto estaba aún más lejos de lo que estaba acostumbrado... ¿y ahora qué? El no lo sabía ni siquiera  tenía idea de que la persona que estaba a su lado llevaba más de cinco minutos intentando despertarlo, sin suerte.

Su cuerpo  temblaba gracias a la reacción que su mente siempre experimentaba cuando sufría esos sueños, sin darse cuenta que sus barreras mentales se estaban desmoronando en la oscuridad de la noche.

Dicen que incluso en el reino de los sueños, las pesadillas suelen llevarnos a su mundo oscuro, envolviéndonos en sus mentiras, siendo algo que a pesar de todo no se puede evitar y la  mente no puede dejar de reaccionar al sentir el miedo.

Por otro lado, Max estaba completamente perdido, su experiencia en esto era todo lo contrario, por lo general, él era el que se consolaba,  No el que  consolaba...

Sin saber qué hacer o decir, ya que por lo general su hermana Anny era la experta en estas situaciones  y en este momento ella estaba más que dormida, lamentablemente el reloj daba las dos de la mañana...

Sergio es solo una pesadilla, solo una pesadilla." Mecánicamente su acompañante  comenzó a repetir esas mismas palabras que su hermana solía decirle hace muchos años cuando despertaba en medio de la noche llorando, producto de las pesadillas.

Con movimientos muy delicados tomo a  Sergio y lo acercó a su pecho, tratando de disminuir la respiración agitada y todo aquello dentro de su cabeza provocando que su cuerpo temblara sin control...

Hey, todo está bien , te lo juro".. su voz era tierna, gentil y por una fracción en el tiempo Sergio pensó que Max era alguien a quien conocía desde siempre, su voz era un sedante para él, algo que lograba hacerlo sentir protegido sin saber por qué...

Poco a poco las  convulsiones y los espasmos que le había dejado la pesadilla fueron disminuyendo y su respiración se iba relajando por completo hasta llegar a un punto estable.

Mierda" pensó una vez al estar de regreso en la habitación sintiéndose completamente expuesto y a la vez protegido, eso era algo para lo que aún no estaba preparado, llorar y despertar sudando en medio de la noche por pesadillas ya era algo vergonzoso por decirlo así .

"Todo está bien" continuaba Max diciendo sin tener  idea de lo que realmente estaba pasando por la mente de Sergio y aún así seguía repitiendo las mismas palabras una y otra vez, acariciando su cabello con una dulzura electrizante.

   Algo tan sencillo  que lo hacía sentir protegido, pero ¿por qué?...

Él podía  mentirse a sí mismo en cualquier momento, pero esa esencia y  la seguridad que el cuerpo de Max estaba  emanando por todos lados dándole  una energía combinada muy extraña, el palpitar en su corazón estaba aún más vivo y su pecho vibraba con tanta fuerza como si fuera un tren que va cuesta abajo sin frenos...