Días después
Hay una palabra que define la situación de aquel grupo: Incertidumbre, ese miedo a lo desconocido por falta de información, aquello de no saber que puede venir a futuro en las distintas vivencias de todos, ese desconocimiento siembra una semilla de temor en el pecho de cada uno; sin embargo, también tenían la sensación de que las cosas podrían mejorar, solo era cuestión de tiempo, ¿pero cuánto sería para poder respirar con calma?.
Mientras Mingi estaba en su trabajo, Wooyoung se había encargado de estar al pendiente de Yunho en el hospital, para su suerte no tenía trabajo, ya que los niños estaban en vacaciones por lo cual tenía tiempo de visitar al castaño el cual aún se mantenía en sueño profundo, San por su parte se había quedado en casa terminando de revisar los historiales de los pequeñitos que atendió semanas atrás.
El pelinegro suspiró mirando a su amigo, era una imagen extraña, recostado en esa camilla, con una máscara de oxígeno y varios cables en su cuerpo que lo mantenían vivo además del monitor que dejaba ver que su corazón latía lentamente al ritmo de su respiración; se veía tan tranquilo que le daba algo de miedo que pasara a mejor vida mientras él estaba ahí, pero confiaba en él, sabía que aquel sueño había sido más bien una realidad alterna.
Con cuidado se acercó a él, sentándose en la silla que habían dejado a su lado y tomando de paso la mano del pálido castaño antes de suspirar.
-Volví después de unos días, estuve algo ocupado pasando los reportes de los niños, incluso varios de ellos saben de ti y te enviaron una carta que espero puedas leer... sé que estarías encantado porque también eres maestro de primaria.
Wooyoung se había acostumbrado a no recibir respuesta de nada de lo que decía, incluso los doctores dijeron que aún y si hablaba había posibilidades de que Yunho no lo escuchase al no estar consciente, otros, en cambio, decían que si podría escucharlo, fuera como fuera él siempre había sido muy charlador y sabía que el castaño amaba hablar con él.
-Ya pasaron tres semanas desde que llegaste aquí, algunas cosas han pasado y posiblemente sé que estarías feliz, no sé si tu alma está mirándome desde el techo como me dijiste o no, pero de todas formas vas a saber los chismes de estos días. -mencionó con una sonrisa, aunque no fuera vista por el cubrebocas que debía usar en la UCI. -Yeo y Jongho están en proceso de adoptar a dos niños, no hemos podido conocerlos porque siguen en el orfanato y aún no pasan a la casa temporal con ellos, pero sé que van a lograrlo, Hongjoong y Seonghwa... bueno, aún no se arreglan del todo, pero según me dijo Jiheon están mejorando aunque parece que Seonghwa no se la está dejando fácil, ¡Oh!, también cambio su color de cabello con la asesora de imagen en la empresa de Mingi, parece un copito de nieve con el cabello blanco.
Hace unos días se habían reunido en casa de Yeosang y Jongho junto a la mujer de protección infantil que había pedido conocer el círculo social de ambos para el tema de los infantes, ahí todos se enteraron de la noticia del crecimiento de la familia; si bien la fémina les había advertido que posiblemente al ser una pareja homoparental podrían nacer algunas trabas en el proceso no se detuvieron y los demás también conversaron con la mujer, eran un grupo de dos abogados, un maestro, un médico, un veterinario, y un fotógrafo de una empresa conocida, ¿qué mejor sustento económico y afectivo iba a ser mejor que eso?.
-Claramente, Hongjoong no fue a la reunión por decisión propia para no incomodar a Seonghwa, pero de todas formas se enteró de todo, incluso Yeo invito a Jiheon, pero tenía que atender algunos pacientes en el hospital, pero la chica de protección infantil dijo que hablaría luego con ella al ser la única mujer del grupo, sea como sea eso ha sido el resumen con nosotros... Oh bueno, supongo que quieres saber de Mingi.
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Second chance «Yungi»
Fanfiction¿Que pasaría si te casas con la persona incorrecta?, ¿dicho matrimonio puede tener salvación?, esa era la única esperanza que tenia Yunho viviendo bajo el mismo techo con la persona que el solía jurar era el amor de su vida. ¿Creer en segundas oport...