Una sonrisa en la oscuridad

Primer encuentro.

Anastasia y su mejor amiga Nadia empezaron hace una semana primero de bachillerato de ciencias de la salud.

Anastasia y Nadia estaban sentadas y Anastasia notó a un chico rubio en una esquina de atrás del todo.

-¿Quién es?-preguntó Anastasia.

-Es un repetidor, creo que se llama Jack.-dijo Nadia.

-Se ve muy solo, voy a sentarme con él.-dijo Anastasia cogiendo sus cosas.

-No habla con nadie.-dijo Nadia.

Pero Anastasia ya estaba yendo hacia el chico.

Se sentó a su lado y dejó sus cosas, Jack no le dirigió la palabra ni una sola vez.

Empezó la clase de matemáticas y Anastasia empezó a tomar apuntes.

Durante las dos siguientes horas se siguió sentando al lado del chico.

Nadia y Anastasia estaban sentadas en un banco y justo le dieron a Anastasia sin querer en la nariz con un balón de baloncesto.

De la nariz de Anastasia empezó a salir mucha sangre.

-¿Alguien tiene un pañuelo?-preguntó Nadia.

Jack fue allí y le dio un pañuelo a Nadia.

-Gracias.-dijo Nadia.

Tocó el timbre y todos fueron a sus respectivas clases.

Jack se sentó en su sitio y empezó la clase de física.

Después la profesora se tuvo que marchar y Jack arrancó un hoja de su cuaderno y empezó a copiar de nuevo lo que tenía escrito.

Después abrió la mochila de Anastasia y cogió su archivador. Por último metió esa hoja en el archivador y lo volvió a meter en la mochila.

Posteriormente tocó el timbre, Jack cogió su mochila y la de Anastasia para llevarla a la otra clase.

Anastasia entró y se sentó de nuevo al lado de Jack.

Tenía puesto hielo en la nariz.

A última hora el profesor faltó y los alumnos que vivían cerca se podían ir a sus casas.

-Me voy a casa de mi tía a comer.-dijo Anastasia a la profesora de sustitución.

Después Anastasia se fue a casa de su tía que estaba casi al lado del instituto.

Jack la siguió y cuando Anastasia se metió en casa de su tía se marchó.

Al día siguiente Anastasia se volvió a sentar al lado de Jack.

Ese día Nadia estaba enferma y no fue.

Un chico estaba molestando a Anastasia en clase.

-Déjala en paz, métete en tu vida. Pesado.-dijo Jack.

El chico paró de molestar a Anastasia.

-Gracias.-dijo Anastasia.

Jack no dijo nada, pero sonrió.

-Te llamas Jack, ¿no?-preguntó Anastasia.

Jack asintió.

-Yo soy Anastasia aunque supongo que lo sabrás.-dijo Anastasia-. Ibas a clase con mi hermano David.

-Sí.-contestó Jack.

Después una profesora llamó a Anastasia y salió de clase.

Entonces el mismo chico que estaba molestando a Anastasia tiró la libreta de Jack al suelo.

Jack se levantó para recogerla, pero este lo golpeó haciendo que se cayera al suelo.

El chico siguió golpeando a Jack, que estaba en el suelo.

La profesora intervino y sacó a todos del aula.

Después sacó al chico y habló con él.

Jack tenía la boca sangrando.

Anastasia se acercó con un pañuelo y le limpió la sangre que tenía alrededor.

-¿Estás bien?-preguntó Anastasia preocupada.

-Sí, estoy bien.-contestó Jack-. No te preocupes.

La profesora le trajo hielo a Jack para que se lo pusiera en los labios que los tenía un poco hinchados.

A segunda hora la profesora faltó entonces Anastasia se recostó en la mesa, apoyando su cabeza en sus brazos y cerró los ojos.

Jack sacó su libreta y empezó a dibujar el rostro de Anastasia mientras dormía.

Cuando terminó guardó la libreta.

Anastasia en el recreo estaba sentada en un banco dándole de comer a los pájaros.

Hasta que alguien se sentó a su lado, era Jack.

-¿Qué haces aquí?-preguntó Anastasia.

-Haciéndote compañía.-dijo Jack.

-Gracias supongo.-dijo Anastasia con una sonrisa.

-Tus ojos son verdes.-dijo Jack.

-Poca gente lo nota, la mayoría siempre dice que los tengo marrones.-dijo Anastasia.

-Yo los tengo azules verdosos.-dijo Jack.

-Yo cuando era bebé tenía los ojos azules.-dijo Anastasia.

Sonó el timbre y volvieron a clase.

Estaban en clase de Lengua y entonces Jack habló.

-¿Sabes que antes Rusia era una monarquía?-preguntó Jack en un susurro.

-No.-dijo Anastasia mirando a Jack.

-Al rey se le llamaba zar. El último fue Nicolás II que fue ejecutado junto a su familia por la revolución rusa. Tuvo 4 niñas y 1 niño que era el heredero, pero tenía hemofilia. Murieron el 17 de julio de 1918. La revolución empezó en 1917 por eso Rusia abandonó la Primera Guerra Mundial.-susurró Jack.

-¿Cómo sabes eso?-preguntó Anastasia en otro susurro.

-Almaceno cosas en mi cerebro que veo en internet.-susurró Jack.

Llegó última hora, educación física y tocaba atletismo.

Anastasia ya estaba agotada de tanto correr y tuvo que parar.

-Eres muy floja.-dijo Jack.

Anastasia le sacó el dedo y Jack se rio.

-Claro como tú tienes las patas largas.-dijo Anastasia.

Era verdad Jack era alto mientras que ella era bajita.

-No es mi culpa que seas una enana.-dijo Jack.

-Discúlpame rascacielos.-dijo Anastasia.

Después cada uno se fue a su casa.