The Tower and The Dragon | hotd

1. Visenya Targaryen

La princesa Rhaenyra Targaryen, la adorada hija del rey Viserys I Targaryen cabalgata junto a su padre hacia Poso Dragón, camino a eligir un huevo.
Su padre le había dado el gran honor de eligir un huevo para su nuevo hermano o hermana, ya que la reina Aemma estaba próxima a entrar en labores de parto, así que el próximo bebé necesitaba un huevo para poder enlazarse al dragón qué saliera de este.

Al llegar a Pozo Dragón los maestres recibieron al rey y a la princesa.

- Mi rey-dijo uno acercándose con una reverencia - mi princesa, yo los llevaré hasta los huevos-saludo con una reverencia.

-Maestre - fue el rey quien saludo, tomó la mano de su hija y caminaron detrás del maestre.

Al llegar la joven princesa se maravillo al ver los huevos. Uno en especifico llamo su atención era gris con detalles que al alumbrar el sol destellaban en un color dorado. Ese era el elegido.
Lo tomó en sus manos, los maestres sonrieron encantados por la elección de la princesa.

- Ese huevo es de una nidada Ala de Plata, mi princesa - dijo el anciano viendo a la pequeña quien sonrió.

- Quiero que este sea para mi hermano padre - hablo con el huevo en manos.

- Entonces, ese será, mi pequeña - el rey miró por última vez antes de dirijirse al maestre - hagan que el huevo permanezca listo, mi esposa pronto dará a luz y quiero que el huevo esté lo más pronto posible con el bebé.

- Como usted ordene mi rey - reverencio al rey, y se marchó junto con los huevos.

Otro maestre le pidió a Rhaenyra el huevo, ella gustosa por su elección se lo dio.
La princesa estaba euforica, pero no solo por haber elegido ella el huevo de su futuro hermano o hermana, si no que esa misma tarde daría su primer vuelo con su dragona syrax.
Vio a un maestre acercarse con la joven hembra quien emitió un chillido al ver a su jinete, batiendo sus alas en forma de saludo.
Aunque no fuera muy grande, su dragón ya tenía el tamaño suficiente para llevar un silla y su jinete en el lomo.

Se dirijieron al exterior de la cueva, Viserys contemplaba la escena, su hija, su adorna primogénita estaba a punto de realizar su primer vuelo, siendo la Targaryen más joven en lograrlo.
Orgulloso la vio subir a los lomos de su dragón, sujetando fuertemente los pomos de la silla, la cual había sido hecha solo para ella, con los mejores materiales, adornada con oro y plata, y al frente el logo de la familia Targaryen, el dragón tricefalo, una silla digna de un princesa Targaryen.

- Mucha suerte mi pequeña dragona - dijo viendo desde lo bajo a su hija.

- muchas gracias, padre - agradeció la princesa - me hubiera encantado volar contigo y el terror negro.

- El tiempo de Balerion en esta tierra fue largo, y algo tortuoso, fue un dragón que vivió para la batalla y la causa Targaryen junto con Aegon I - relato el rey con la mirada algo baja - Pero me alegra saber que pudo morir en tiempos de paz, conmigo - sonrió finalmente para su hija.

- Deberías volar junto a otro dragón - propuso la princesa mirando a su padre - Talvez Vermithor.

- Soy feliz y dichoso viéndote a ti hacerlo, mi pequeña, ahora sujetate bien, que tu madre me matara si algo te pasa - concluyó el soberano.