Capítulo 11

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La nueva esclava

Joss

Por fin algo de tranquilidad. En la mañana Malkie se fue con su novia la pelirroja, y hace menos de un segundo Kiara se fue dejándome sola.

Puedo ver series más dieciocho con mucho sexo.

Que felicidad.

Me dispongo a cambiar la tele, pero justo alguien se atraviesa en mi camino. Kienan, mi querido mejor amigo.

—¿Que? —lo observo sin interés alguno.

—Necesito un consejo de mejor amiga —se sienta a mi lado—. Es urgente.

—¿No tienes otra mejor amiga?

—No, porque eres única e irreemplazable —me da una palmadita en la cabeza—. Jamás encontraré a alguien igual de enana que tu.

—Íbamos tan bien...

—¡Ese no es el punto, Joss! Necesito hablar seriamente.

—Adelante.

—Tengo miedo de dos cosas —se acomoda mejor en su lugar, acercándose más a mi—. La primera es de que Nika se haga gay y la segunda es de que Malkie se me haga lesbiana.

Malkie es lesbiana, aunque no me lo ha dicho, pero yo estoy segura de eso desde que cuando tenia ocho años miraba las revistas de moda de su mamá solo para ver a las modelos porque las encontraba lindas.

Yo hacia lo mismo.

Y Nika es gay. Todavía es pequeño como para que el lo sepa, pero yo estoy muy segura de aquello. Mi gay radar no falla.

A Kienan por homofibico le salieron tres hijos homosexuales.

—¿Por...?

—¡No quiero hijos desviados! O sea, si lo son me molestaría mucho, pero no se los diría a la cara. Los dejaría ser felices... creo.

—Entonces déjalos ser felices. Que te importe mierda.

—Pero no pueden ser felices con alguien de su mismo género...

—¡Claro que si, idiota! —una oleada de enojo me recorre desde la planta de los pies hasta la cabeza—. ¿Tu acaso piensas?

—Oye, no te lo tomes tan personal, Joss.

—Pero es que tu lógica es estúpida. ¿Porque no serían felices con una persona que aman? ¿Tu amas a Malia?

—Si...

—¿Y eres feliz con ella?

—Claro que si.

El la ama, pero no más de lo que yo lo hice. Malia no lo sabe, pero yo era capaz de sacarme el corazón y dárselo. La ame demasiado.

¿Porque se tenia que fijar en Kienan y no en mi? Yo le puedo dar todo lo que el no puede.

Malia tiene gustos muy humildes.

Un error terriblemente perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora