07

111 12 1
                                    

“SILENCIO INCOMPLETO”

OLIVIA LIFTON:

Aún podía sentir su olor, el olor de su colonia y un tenue olor a tabaco...

Eran las dos de la mañana y aún no conciliaba el sueño, seguía pensando en la imagen del señor Hargreeves... La manera en que se acercó a mi, el tono de su voz... La tensión que se sentía entre nosotros, el ambiente tan pesado y tenso... La manera en la que me veía, lo vulnerable que me sentía al estar prácticamente desnuda frente a mi profesor, pero había algo, algo que al mismo tiempo me hacía no avergonzarme de mi desnudes, algo que me hacía querer seguir así para él...

No puedo esperar para verlo mañana...

.
.
.
.
.
.
.
.

Sigo mirándome en el espejo, hoy me siento muy bien...

Miro el vestido que he escogido para hoy...

Es un vestido elegante y sofisticado. Es de color negro con un diseño ajustado al cuerpo, lo que resalta más mi silueta. Tiene tirantes delgados y un escote en forma de corazón sutilmente definido, con un ribete blanco que agrega un toque de contraste delicado. La longitud es media, alcanzando justo debajo de las rodillas, lo que le da un aire formal pero moderno. La caída de la falda es fluida, y los zapatos de tacón alto complementan el look, añadiendo un estilo refinado.

Termino de pintar mis labios con ese rojo que tanto me gusta. Juego un poco con mi cabello y me sigo mirando en el espejo.

Me pongo mi saco, un saco cruzado en color negro y me miro al espejo...

No sé cómo Demian se atrevio a traicionarme, soy genial...

Tomo mi bolso y salgo de mi habitación.

—Liv... Buenos días —Amy me saluda, está usando una de las camisas de Viktor y está tomando una taza de café... Supongo que ella si tuvo una buena noche.

—Hola, Amy —le sonrío.

—¿Vas a conquistar el mundo o a tu profesor? —me mira con picardía.

—... ¿Qué? —la miro confundida.

—Viktor me contó que uno de sus hermanos es tu profesor y que pasa algo entre ustedes dos —le da un sorbo a su café.

—No... No pasa nada entre el señor Hargreeves y yo —digo seriamente.

—Seguro... De cualquier forma, ese labial te queda genial —me sonríe —. Y ese vestido... Dios, te va genial —me escanea de arriba a bajo.

—Gracias —le sonrío dulcemente.
—¿Aún hay café? —señalo la cafetera.

—Sip... Iré a despertar a Vik... Está algo agotado —se muerde el labio con pícardia y corre de vuelta a su habitación...

Yo rio levemente ante sus palabras y saco mi termo de la alacena para servir algo de café...

.
.
.
.
.

—¿Entonces... Ayer fue a verte? —cuestiona Gisele ante la historia del señor Hargreeves en el departamento y... Le conté todo.

—Si... Fue a disculparse por tratarme mal el otro día —explico.

—Es raro... ¿Por qué no espero hasta hoy? —alza una ceja.

—Lo mismo le pregunté... Dice que para entonces ya sería muy tarde y además estaba en el bar cuando llegue... Seguía tan molesta con él que ni siquiera lo saludé, ignore su existencia —digo orgullosa.

THEACHER'S PET [CINCO HARGREEVES]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora