Desconocido: Tienes que tomar decisiones o lo haré yo.
Desconocido: Soy generosa por lastima, corran o mueran. Solo tienen 10 minutos, me encanta jugar con mi presa.
No sé de dónde saco las fuerzas, pero con cada paso que doy, llevó a Hanna a cuestas, a pesar de sus constantes quejas. Su peso es considerable, pero me repito que soy capaz de soportarlo, que puedo seguir adelante. Ella llora y me suplica que la suelte, pero en mi mente no hay lugar para esa opción. La desesperación me impulsa a correr, a buscar la mansión que parece esconderse de mi vista, como si se burlara de mi esfuerzo.
A medida que avanzó, el barro se adhiere a mi ropa, haciéndola aún más pesada, y mi cuerpo se siente agotado. La lluvia ha comenzado a césar, pero mi piel está empapada y fría. En mi espalda, Hanna ha dejado de llorar, y solo puedo escuchar sus suspiros cansados, lo cual me alivia un poco. La lucha interna entre el deseo de descansar y la necesidad de seguir adelante se intensifica, pero el instinto de proteger a Hanna me mantiene en movimiento.
Finalmente, cuando mis ojos se posan en la mansión, un grito ahogado escapó de mis labios al ver mi auto en llamas. La desesperanza me inunda; no hay forma de que podamos escapar de aquí. Con determinación, camino a la casa y bajó a Hanna de mi espalda, obligándola a subir las escaleras, sintiendo cómo los sollozos de Hanna se intensifican con cada peldaño que subimos. La llevó al sótano, donde creo que estará a salvo, ignorando sus protestas. En este momento, mi única prioridad es mantenerla a salvo, porque si no lo hago, ambas corremos el riesgo de perderlo todo.
—¿Qué carajos hacemos aquí?
—Debes esconderte mientras resuelvo esto.
—¿Pretendes enfrentarla?
—No hay otra opción.
Al principio, las bolsas negras que parecían superfluas cuando llegué a la mansión me resultaban completamente innecesarias. Sin embargo, hoy me doy cuenta de su gran utilidad. Las tomó con determinación y empiezo a sacar algunas camisetas de su interior. Con un impulso de urgencia, comienzo a desgarrar las, sintiendo la tela elástica entre mis manos. A mi lado, Hanna me observa con una mezcla de incredulidad y curiosidad, pero, a pesar de su sorpresa, decide seguir mis instrucciones sin dudar.
—Sube tu vestido, te vendare.
—Esto es una locura.
Con rapidez, subo el vestido de Hanna para poder atender sus heridas. Ella tiene dos disparos en el abdomen y uno más en la pierna, lo que me obliga a actuar con rapidez y precisión. Envolver la tela elástica de la camiseta alrededor de sus heridas, aplicando una presión firme para detener el sangrado. Cada movimiento es crucial, y la tensión en el aire se siente palpable mientras me concentro en asegurar que no pierda más sangre. La mirada de Hanna, aunque llena de dolor, refleja una confianza creciente en mis acciones.
Una vez que he logrado vendar su pierna, me dirijo a su pie herido y repito el proceso con la misma dedicación. Cuando finalmente termina de estar vendada, tomó otra camiseta y se la extiendo, preparándola para que se cubra. Con un gesto decidido, despejo todo lo que obstruye el escondite que hemos preparado, asegurándome de que esté listo para que ella entre. Le indico con un gesto que es el momento de refugiarse, y en sus ojos veo una mezcla de gratitud y determinación, lo que me motiva a seguir adelante en esta lucha por su seguridad.
—No preguntes, Brias lo hizo —susurro—. Ahora escondete.
—Gracias, Delaney —sonríe acercándose y escondiéndose en la pequeña guarida—. Te debo la vida.
—No es momento para eso, cubre tu boca con el trapo para evitar sonidos.
—Debajo de mi cama hay una escopeta —informa antes de que pueda cerrar su escondite.
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H de ? :¿Quién mató a Brais?
Детектив / Триллер¿Escribir la biografia de un muerto? Delaney Rymer es una escritora que está luchando contra la propuesta que le cambiaría la vida, aunque su instinto le dice que no debe escribir la biografía de la biografía de un muerto. A pesar de sus reservas...