El click de la puerta sonó y se vislumbró la silueta de Hinata, que se veía muy avergonzada. Mantenía la mirada fija en el suelo, aún le costaba demasiado mirar de nuevo a Sasuke. Ni siquiera sabía de donde le había salido la valentía para hacer algo así, no parecía ella misma.
—So-solo quería saber lo que o-ocurría. ¡Juro que no tenía otras intensiones! —dijo tan deprisa que Sasuke tuvo que meditar un poco para entender lo que decía.
Ella seguía con la mirada baja y con la cara muy roja. Sasuke la observó y soltó un suspiro mientras se despeinada un poco el cabello. Si bien su plan siempre había sido tirarse a la chica, ya que le había perecido interesante, se había dado cuenta qué, si se involucraba más con ella todo se complicaría.
Tenía demasiadas cosas en mente como para liarse ahora con alguien. Además, verla de esa manera lo hacía sentir incómodo, casi como si hubiera estado a punto de abusar de ella.
—Solo olvidémoslo. Me haces sentir culpable —dijo Sasuke un tanto irritado.
Hinata lo miró algo sorprendida, pero agradecida. Además, aunque ahora estaba muy avergonzada por haber hecho lo que hizo, algo dentro de ella le decía que no se arrepentía.
—No fue solo su culpa, yo también me dejé llevar —dijo en un tono suave mientras apartaba su mirada.
Después de unos minutos de silencio sus ojos se cruzaron, las negras orbes la observaban, pero esta vez no la miraban con lascivia, sino con parsimonia. Aún no conseguía entender al chico, pero una parte de ella le decía que estaba perdido.
Tal vez podía sonar loco, pero ella lo entendía, porque también se había encontrado allí. Si Naruto no la hubiera ayudado en aquel entonces se habría hundido más en aquel pozo. Gracias a él había podido avanzar y hacer frente a sus temores.
Podía sonar osado, pero ella también quería hacer algo así por él.
—¿Podemos ser amigos? —dijo con nervios, pero también con sinceridad.
Aquella pregunta tomó desprevenido a Sasuke, hace unos segundos acababa de decir que involucrarse con Hinata no le traería nada bueno. Pero al ver como ella lo miraba, fue incapaz de negarse a su petición.
—Si es lo que quieres —soltó con indiferencia, aunque en el fondo no se sentía así. —Será mejor que te esperes un poco más para salir. Ya casi van a ser las diez, a esa hora se apagan las luces y podrás irte sin que nadie lo note —dijo tranquilo haciendo que Hinata asintiera.
Tal y como dijo el chico se esperó a que fuera la hora indicada y se escabulló entre los pasillos, llegando al ala femenina sin más problemas. Aunque se había pegado un buen susto, ya que cuando estaba por salir había escuchado unas voces a lo lejos, si se hubiera quedado parada la habrían atrapado. Menos mal que su cuerpo decidió responder a último momento y escapar.
Ese día Hinata se prometió no volver a hacer ninguna cosa tan osada como esa. Aún no podía creer que actuara de aquella manera.
Tal vez había sido algo desvergonzada, pero no se arrepentía. Además, de verdad que quería ayudar a Sasuke.
Aún no sabía qué era lo que afligía al chico y con el carácter que se manejaba sería difícil sacarle algo. Pero no se pensaba rendir, Naruto no lo había hecho con ella así que ella tampoco lo haría. Ese era el camino que había elegido.
oOoOoOoOo
Al día siguiente Sasuke se levantó con cansancio acumulado, lo que casi había pasado con Hinata no le había dejado pegar ojo. Cuando la chica se marchó fue directo a la ducha para despejar esa sensación que la chica había dejado en su cuerpo. Pero, al volver a su cama y sentir el olor de ella impregnado en sus sábanas sus deseos volvieron a desencadenarse.
No había podido dormir hasta que se deshizo de las sábanas con el olor de la chica. Cosa que no entendía, ese no era ni de lejos su primer rodeo. Estar con alguna chica era una cosa fácil para él, no sabía porque Hinata lo desestabilizaba tanto.
Tal vez debía seguir con su primera idea y no acercarse más a la chica, sentía que si se involucraba con ella todo se complicaría.
Abrió la puerta del salón y fue directo a su asiento, casi no había podido pegar ojo, esperaba que la Hyuga se sintiera de la misma manera, de verdad que lo había dejado con ganas.
—Buenos días Uchiha-san —dijo Hinata con una linda sonrisa, haciendo que él la mirara con cansancio y algo irritado al verla tan radiante.
—¿Dormiste bien? —dijo haciendo que esta asintiera. —Pues fuiste la única, estuve hasta tarde limpiando mi habitación intentando borrar tu olor.
Tan pronto dijo esas palabras se dio cuenta de su error, casi parecía como si le estuviera dando demasiada importancia a la chica.
—¡L-lo siento mu-mucho! —dijo en un tono más alto de lo que pretendía, haciendo que varias miradas se fijaran en ambos.
Sasuke soltó un suspiro lleno de resignación estaba seguro qué, desde fuera parecía que la estuviera intimidando.
—Relájate, solo era una broma —dijo con cansancio.
Hinata lo miró seria, de verdad que a veces no lo entendía, no sabía si lo que estaba diciendo ahora era cierto o no. Pero sentía que si se seguía comiendo más la cabeza solo sería peor. Además, ya lo había decidido, iba a ayudarlo, así que se tenía que acercar a él.
—E-entiendo —dijo tratando de sonar serena.
—Hyuga, no tienes que sentirte incómoda, no te voy a comer. Ahora mismo sí que te ves como una ratona —dijo algo juguetón, pero en vez de conseguir avergonzar a la chica le mostró una sonrisa sincera.
—Me gusta cuando Uchiha-san sonríe —dijo con inocencia logrando que el corazón de Sasuke pegara un pequeño bote.
Iba a decirle algo a la desvergonzada chica que se encontraba frente a él, pero para suerte de ella entró uno de los profesores dando inicio a las clases.
Sasuke en ese momento no lo sabía, pero aquella palpitación solo era el comienzo.
Notas de la autora: Hola, sé que me demoré, pero ya he vuelto otra vez, perdón por toda mi ausencia estuve de viaje. Bueno, volviendo al cap, parece que Hinata y Sasuke ya se están comenzando a acercar, veremos qué pasa con esto.
Espero que les haya gustado.
Ya nos leemos.
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Mi chico malo
FanfictionHinata tenía problemas familiares, ya que su padre siempre la menospreciaba y tenía toda su atención en su hermana, pero gracias a Naruto ella deja de ser tan tímida. Con la llegada de un nuevo chico, el mundo monótono de Hinata se pondrá patas arri...