112. Su capacidad de autocuración.

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Cheng Zheng frunció los labios con fuerza, mientras una tormenta se gestaba en sus ojos negros como el carbón.

Li Hengyuan se acercó a Cheng Zheng para darle un beso y le aseguró: "Estoy bien. Puedes verlo tú mismo".

Con eso, Li Hengyuan se giró para mostrarle la herida en su espalda a Cheng Zheng.

Cuando la princesa Xilan apuñaló a Li Hengyuan con la daga, este se movió sutilmente para proteger sus órganos vitales sin que nadie se diera cuenta. Aunque sangraba en ese momento, su herida no era grave.

Además, Li Hengyuan tenía una fuerte capacidad de autocuración, que era un secreto que había estado guardando durante mucho tiempo. No le prestó mucha atención últimamente porque no había resultado herido durante un tiempo. Ahora que estaba herido, su capacidad única de autocuración apareció de nuevo.

Mientras Cheng Zheng se dirigía hacia aquí, la herida en la espalda de Hengyuan se curaba a gran velocidad. Y cuando Cheng Zheng vio la herida, estaba casi curada.

Cheng Zheng pudo ver cómo la herida se curaba a una velocidad increíble. La piel que la rodeaba se movía suavemente como si estuviera viva. Un minuto después, la herida en la espalda de Hengyuan se curó por completo, sin dejar cicatriz, solo una pequeña marca roja que demostraba que ese lugar alguna vez estuvo herido.

Durante el proceso de curación, Li Hengyuan podía sentir algo de dolor y picazón. Cuando esos sentimientos desaparecieron, supo que la herida había sanado por completo. Se dio la vuelta para mirar a Cheng a los ojos y dijo: "¿Lo viste? Este es mi secreto. ¿Pensarás que soy un monstruo?"

La voz de Hengyuan estaba mezclada con preocupación, como si temiera que Cheng Zheng se mantuviera alejado de él debido a su habilidad especial.

¿Cómo podría Cheng Zheng haber sido engañado por Li Hengyuan? Sabía que a Li Hengyuan no le preocupaba realmente que la capacidad de autocuración lo aterrorizara. Hengyuan simplemente puso una mirada lastimera para no aferrarse al tema de que Hengyuan había sido apuñalado.

Con un suspiro de impotencia, Cheng Zheng envolvió a Li Hengyuan en sus brazos, haciéndole escuchar los latidos acelerados de su corazón.

Li Hengyuan nunca sabría cómo se había sentido Cheng Zheng. Cuando escuchó que Xilan había apuñalado a Li Hengyuan y había caído inconsciente, su corazón casi dejó de latir y el pánico abrumador casi lo ahogó.

Cheng nunca había tenido miedo antes, pero en ese momento tenía tanto miedo de perder a Li Hengyuan que se apresuró a ir a la Clínica Xuan Su lo antes posible.

No se sintió aliviado hasta que llegó a la clínica y vio que Li Hengyuan no estaba gravemente herido. Sin embargo, sus pasos seguían flotando como si estuviera caminando sobre nubes.

Esta fue la primera vez que Cheng Zheng tuvo este tipo de emoción, que nunca querría volver a experimentar.

Al escuchar los latidos acelerados de su corazón, Li Hengyuan finalmente se dio cuenta del impacto que este incidente tuvo en Cheng Zheng. Envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Cheng y se disculpó sinceramente: "Lo siento, cariño".

No tenía miedo porque sabía que tenía una capacidad única de autocuración. Pero Cheng Zheng no sabía que podía curarse tan rápido. Además, el mensajero podría haberle hecho creer a Cheng Zheng que estaba gravemente herido.

Li Hengyuan se dio cuenta de que debería haber sido más considerado. Por lo tanto, le hizo una promesa a Cheng Zheng: "De ahora en adelante, siempre pondré mi seguridad en primer lugar. Incluso si las circunstancias me obligan a arriesgar mi vida, no lo haré".

En lo que respecta a Li Hengyuan, recibir el apuñalamiento de Xilan era necesario dadas las circunstancias.

Al menos Xilan se había convertido en la parte culpable en ese momento. Cuando la gente volviera a hablar de esto, creerían que fue culpa de Xilan, en lugar de culpar a Cheng Zheng por traicionarla. La historia de amor que había encargado a alguien que escribiera y el incidente en el que Xilan había intentado matarlo garantizarían que nadie tuviera motivos para difamar a Cheng Zheng y decir que Cheng era una persona desagradecida.

Cheng Zheng sabía que Li Hengyuan sólo hacía eso por él. Además, Hengyuan le había asegurado que nunca volvería a hacerlo. Cheng Zheng se tragó todas las quejas que estaba a punto de hacer y besó a su amada agresivamente como si estuviera dejando salir toda su ira y preocupaciones a través de este beso para que este último aprendiera una lección.

Cuando Cheng Zheng finalmente soltó a Li Hengyuan, ambos labios ya estaban hinchados debido al beso que duró siglos.

"No lo vuelvas a hacer nunca más", dijo Cheng Zheng con voz ronca. A pesar de la poderosa capacidad de autocuración que poseía Hengyuan, Cheng Zheng sabía que sentiría dolor cuando lo apuñalaran.

Sabiendo que Cheng Zheng no quería que sufriera ese dolor, Hengyuan prometió que nunca volvería a hacer algo así.

Al ver que Cheng Zheng finalmente se relajó, Hengyuan dijo en tono burlón: "Bueno, ahora que estoy gravemente herido, ¿debería quedarme en la mansión por un tiempo para recuperarme?"

Al oír eso, Cheng Zheng finalmente sonrió. "Por supuesto. Qing Yun y los demás pueden encargarse del asunto de la escuela. Quedémonos en la mansión para recuperarnos. No iremos a ningún lado".

Li Hengyuan asintió repetidamente.

Cheng Zheng continuó: "Sobre Xilan, me ocuparé de ello desde aquí".

Li Hengyuan asintió. No veía motivos para oponerse.

Por la tarde de ese día, la noticia de que la consorte del Señor del Suroeste había intentado matar a la consorte legítima y le había causado graves heridas se extendió por toda la llanura occidental. Por ello, cuando la gente vio que Xilan era escoltada fuera de la ciudad al día siguiente, todos creyeron que Xilan se lo merecía, en lugar de criticar a Li Hengyuan o a Cheng Zheng.

Ning Zhiyue estaba bordando cuando escuchó la noticia de su sirvienta, y solo se detuvo por un segundo antes de volver a su trabajo como si no le importara nada el incidente.

"Dama..." Cuando a la sirvienta se le ocurrió que su amo ahora era un civil, cambió el título: "Señorita, ¿cree que la Consorte Li realmente resultó herida?"

Ning Zhiyue no respondió, pero no creía que Li Hengyuan hubiera resultado herido.

Li Hengyuan parecía imprudente e impulsivo, como si nunca hubiera pensado en las consecuencias antes de actuar. Pero, ¿era realmente así? Sin mencionar el pasado, hace mucho tiempo, basta pensar en lo que había sucedido recientemente. Cuando Li Hengyuan se enfrentó a Zhou Zhe, todos pensaron que había sido una acción imprudente. Pero, ¿cómo resultó? Zhou Zhe se vio obligado a mudarse de su mansión, y Li Hengyuan aprovechó la oportunidad para convertir la mansión de Zhou en un campus de escuela pública, lo que lo ayudó a ganar el apoyo de los civiles.

¿Debería este tipo de hombre ser descrito como imprudente o impulsivo?

Además, si Li Hengyuan fuera un hombre imprudente e impulsivo, ¿por qué Cheng Zheng, un hombre que nunca antes había mostrado interés en nadie más, se habría enamorado de él?

En definitiva, Ning Zhiyue no se creyó la tontería de que Li Hengyuan estaba gravemente herido. Solo difundieron esos rumores para hacer que Xilan pareciera más culpable y así tener una razón legítima para enviar a Xilan al condado Sureste.

Ahora que lo pensaba, Ning Zhiyue se sintió afortunada de haber tomado una decisión inteligente en ese momento.

A esos dos hombres no les importaba nadie más que el otro. Xilan conocía a Cheng Zheng desde la infancia, pero Cheng Zheng cortó su relación sin dudarlo. Como concubina que solo podía ver a Cheng Zheng unas pocas veces al año, ¿qué podía esperar?

Ning Zhiyue se rió suavemente y la tristeza se mezcló en el sonido que flotaba alrededor. 

Renacimiento: Una cura para el corazón oscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora