147. El giro

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No todos eran tan leales como Zhao Yan o Meng Qi. El corazón humano es lo más impredecible del mundo.

Cualquiera que tuviera un poco de cerebro se habría dado cuenta de la situación a la que se enfrentaban en ese momento. Independientemente de si el Maestro Xuanyuan estaba vivo o muerto, Jiang Shangyouyu y su gente ya habían controlado toda la Isla de la Serpiente Loca. Si luchaban contra él, no sería diferente a golpear una roca con huevos.

Aunque estaban agradecidos con el Maestro Xuanyuan, no tenían intención de sacrificar sus vidas por él.

Pronto, estas personas tomaron dos bandos diferentes. Zhao Yan y Meng Qi se enfrentaron a Jiang, mientras que el resto de los directores bajaron sus armas, mostrándole a Jiang que habían elegido su bando.

Un hombre siempre debe seguir la tendencia. Ahora que el Maestro Xuanyuan había perdido el poder, no tendrían ninguna posibilidad de ganar incluso si se resistieran. Bien podrían dejar caer sus armas, con la esperanza de que Jiang les permitieran mantener sus posiciones originales.

Aunque a muchos de ellos no les gustó este resultado, para seguir con vida no tenían otra opción.

Simplemente hicieron lo que tenían que hacer para sobrevivir.

Aunque Zhao Yan y Meng Qi no se sorprendieron por la decisión que habían tomado otras personas, todavía estaban indignados. Sin mencionar a los subordinados, los siete directores de división le debían la vida al Maestro Xuanyuan. Si no fuera por el Maestro Xuanyuan, ninguno de ellos estaría aquí hoy. Sin embargo, estas personas traicionaron al Maestro Xuanyuan sin dudarlo.

Jiang sabía que se encontraría con cierta resistencia en su camino para apoderarse del puesto de amo de la isla, y estaba preparado para ello. Frente a la decisión que habían tomado Meng Qi y Zhao Yan, se burló: "¿A qué te aferras? Xuanyuan Hong ya está muerto. ¿De qué servirá defenderlo? Deberías seguirme, ya que soy el único que puede hacer que nuestra organización sea más fuerte. Si no lo haces, puedes unirte a Xuanyuan Hong en el infierno. Creo que se alegrará de ver a dos de sus leales subordinados".

Esta fue su última advertencia para Meng Qi y Zhao Yan. Si se negaban a obedecer, Jiang Shangyouyu estaba dispuesto a recurrir a la fuerza.

"¡Pooh!", gritó Zhao Yan enojado, "Jiang Ming, ¿por qué no me matas? ¡Prefiero morir antes que ser gobernado por ti!"

Meng Qi no dijo nada, pero la rabia ardiente en sus ojos había mostrado su determinación.

Jiang se volvió hacia otros directores: "Mátenlos. Recibirán lo que merecen después de matarlos".

La noche se hacía más espesa y el viento más fuerte. La luz plateada de la luna brillaba sobre el mar y las olas rompían contra la orilla.

Esta estaba destinada a ser una noche sin paz.

Las palabras de Jiang fueron llevadas por el viento y permanecieron en los oídos de aquellos directores.

Jiang quería que estos directores mataran a Zhao Yan y Meng Qi para demostrarle su lealtad.

Sin embargo, antes de que pudieran responder, una voz profunda bajó desde arriba: "¡Me gustaría ver quién diablos se atreve a tocarlos!"

Todos los directores presentes estaban familiarizados con esa voz fuerte y poderosa.

"¡Maestro!"

"¡Su Señoría!"

Zhao Yan y Meng Qi levantaron la vista con una expresión de sorpresa agradable. El Maestro Xuanyuan estaba de pie en el segundo piso del edificio sobre pilotes, y su mirada era tan aguda como si hubiera llamas ardiendo en sus ojos.

Cuando Jiang Shangyouyu miró hacia arriba y vio al Maestro Xuanyuan, se sorprendió instantáneamente.

¿Cómo podría esto ser posible?

¡Estaba seguro de que el amo de la isla ya estaba muerto! ¿Cómo era posible que ese hombre hubiera vuelto a la vida?

Jiang estaba en estado de shock y lleno de desconcierto, pero logró calmarse muy pronto. Aunque Xuanyuan Hong estuviera vivo, ¿y qué? Ahora que había controlado toda la isla y todos los animales venenosos, ¿por qué debería tenerle miedo a Xuanyuan?

Sin embargo, las criaturas venenosas de esta isla ya habían comenzado a moverse en ese momento. Jiang aún no se habían dado cuenta.

Jiang Shangyouyu pudo controlar la Isla de la Serpiente Loca porque contó con la ayuda de los asesinos profesionales de la Liga Wusha y de los animales venenosos de esta isla. Ordenó a esos animales venenosos que vigilaran cada patio de esta isla. Si alguien se atreviera a salir de sus casas, esos animales venenosos los atacarían y les quitarían la vida de inmediato.

Jiang pensó que había controlado a esos animales venenosos. Pero no sabía que cuando apareció el Maestro Xuanyuan, los animales venenosos ya no lo escucharon. Se dirigían hacia el edificio sobre pilotes uno tras otro como si fueran guiados por alguien.

Esos animales venenosos sabían esconderse bien. Cubiertos por la oscuridad de la noche, llegaron al lugar de reunión en silencio.

Guiados por una serpiente de colores, los animales venenosos se detuvieron cerca del edificio construido sobre pilotes de manera ordenada. La serpiente de colores silbó con la parte superior del cuerpo hacia arriba. Se podía ver por sus pequeños ojos que estaba emocionada.

La Llama Roja patrullaba la periferia del edificio sobre pilotes antes de arrastrarse hasta Cheng Zheng y Li Hengyuan. Frotó su cabeza contra la mano de Hengyuan como si estuviera pidiendo una recompensa.

Después de todo, fue el líder el que trajo a todas esas criaturas venenosas hasta aquí.

Li Hengyuan acarició la cabeza de la serpiente para elogiarla antes de darle otra instrucción.

Los animales venenosos comenzaron a moverse de nuevo, pero esta vez, no se movieron hacia el edificio sobre pilotes, sino que se arrastraron hacia los lugares ocultos alrededor para buscar a esos asesinos profesionales.

Xuanyuan Zhe no se dio cuenta de nada de esto. Después de que el Maestro Xuanyuan apareció, toda su atención se centró en el maestro. Estaba emocionado pero nervioso al mismo tiempo, emocionado de que su padre estuviera vivo, pero nervioso sobre si su padre podría manejar la situación actual. Si no podía ...

Xuanyuan Zhe no tuvo el coraje de pensar más.

Jiang Shangyouyu no se dio cuenta de lo que estaba sucediendo en la oscuridad. Aún pensaba que tenía todo bajo control.

El maestro Xuanyuan bajó las escaleras y caminó hacia Jiang con calma, paso a paso.

Después de haber sido desintoxicado, parecía saludable en ese momento. Le dijo a Jiang Shangyouyu mientras se acercaba: "Jiang Ming, si te rindes ahora, te perdonaré por lo que has hecho. Sin embargo, si insistes en tomar el camino equivocado, acabaré contigo personalmente".

Si el Maestro Xuanyuan decidiera castigar a alguien personalmente, sería mucho más que una muerte rápida. Convertiría a esa persona en su rata de laboratorio y la usaría para probar venenos una y otra vez, hasta que esa persona sea torturada hasta la muerte.

Jiang Shangyouyu solía tener miedo de sus medios, pero ahora, el creía que el Maestro Xuanyuan solo estaba fanfarroneando.

Jiang se burló mientras decía: "Eso suena aterrador, pero ¿aún tienes la habilidad para lograrlo, Xuanyuan?"

Como si fuera a responder la pregunta de Jiang, un hombre cayó al suelo no muy lejos. El hombre vestía un traje negro y una máscara. Aunque tenía la mitad de la cara cubierta, aún se podía ver la expresión distorsionada en su rostro.

El hombre de negro se movió varias veces en el suelo antes de quedarse inmóvil para siempre. 

Renacimiento: Una cura para el corazón oscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora