Lonely || MinChan ♥︎

Capítulo 32.

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Cuando Christopher regresó a su oficina esa tarde, como lo había pedido su tío se encontraba en la sala de juntas esperando por él.

Joy le había dado a su jefe una carpeta con los documentos que el investigador le había dado con referencia a su tío y también las propuestas que sus abogados le habían hecho llegar al Alfa mayor, donde le hablaban de sus ofertas para comprarle las acciones que su padre le había heredado.

—Sobrino... Creí que habías dicho que trabajabas sin descanso en esta empresa... Pero vengo y no estas...¿Así es como cuidas de nuestros intereses?. —Bang no se molesto en contestar y solo tomo asiento frente al hombre, abriendo las carpetas que llevaba en sus manos y poniendo algunos documentos frente al tío.

—Esta son tus deudas y esta es la oferta por tus acciones.

—Las cuales no están en venta.

—¿Cómo piensas pagar?... —Pregunta Christopher serio sin mover un solo músculo de la cara y mostrandole los estados de cuenta del tío frente a él. —Tus cuentas están en cero, tus tarjetas al tope, no conseguirás préstamos con estos saldos.

—El apellido Bang te abre muchas puertas.

—Exacto... Y he hablado con los gerentes de los bancos para que te las cierren, porque esta compañía no responderá por tí.

—¡No puedes hacerme eso! ¡Esta también es mi empresa!...

—Puedo y ya lo hice, y esta empresa es mía y un mínimo porcentaje es tuyo, y no la voy a perder por tu irresponsabilidad y tu vicio del juego... Mi oferta es demasiado generosa, cubriras tus deudas y podrás sobrevivir sin mover un dedo por unos años, como lo has venido haciendo toda tu vida, o te haces responsable por una vez y aprovechas esta oportunidad que te estoy dando para recomponer tu vida, ahorrar y trabajar. Depende de tí.

El tío estaba hecho una furia, aflojo el nudo de la corbata que seguramente le incomodaba por no estar acostumbrado y se puso de pié.

—Tienes un maldito talento para molestarme.

—Es solo uno de tantos. —Contesta Bang levantando sus hombros, sin darle importancia y el tío bufa.

—Eres un hijo de .... —Bang se pone de pie y toma su tío del cuello arrastrándolo hasta la pared detrás de él.

Bang era un poco más alto y más musculoso que su tío.

—No te atrevas a maldecir a mis padres, porque gracias a ellos estas aquí y sigues con vida. Porque si por mí fuera no hubiera movido un dedo por tí. —Dijo Bang y lo dejó de pié, antes de girarse y regresar a su silla, acomodándose tranquilamente como si nada hubiera pasado.

El tío sudaba y finalmente se quito la corbata y la guardo en la bolsa de su desalineado saco y desabotono los primeros botones de su camisa antes de sentarse.

—Quiero lo doble.

—No.

—Entonces no venderé.

—Bien. —Dice Bang y toma los documentos guardándolos en las carpetas, saca una hoja de otra que tenía a su lado y la gira con su tío.

—Este es un aviso, la compañía adelantará su auditoria interna este año, por lo cual no se podrán hacer movimientos bancarios de grande cifras por los próximos cuatro meses, así que no habrá depósitos a tus cuentas hasta una vez terminada la auditoria... Creo que eso es todo.