En la primera foto de todas, la que estaba colocada más a la izquierda en el interior de la taquilla, ambas salían con una sonrisa tímida dibujada en sus rostros. Nada de muecas raras o poses extravagantes, simplemente Brittany y Santana en estado puro.
—Vamos San, solo será un momento, ¡y parece divertido!—exclamó Brittany, arrastrando a la morena al interior del Fotomatón que había en el centro comercial de Lima.
Santana soltó una pequeña carcajada al ver lo excitada que estaba la rubia, mientras que echaba unas monedas a la máquina para que empezase a funcionar. Ambas se colocaron sentadas la una al lado de la otra, mirando a la cámara fijamente sin saber muy bien que hacer, hasta que el flash saltó por primera vez.
En la siguiente foto Santana había girado la cabeza para depositar un beso sobre la mejilla de la rubia. Esta instantánea le gustaba especialmente a la morena, ya que en la puerta del refrigerador de su casa tenía una exactamente igual, con la diferencia de que eran diez años más pequeñas.
"
La sonrisa de Brittany creció aún más cuando notó los labios cálidos de su novia apoyados en la piel de su mejilla, dándole un beso que duró hasta que el flash saltó por segunda vez.
La rubia giró la cabeza rápidamente, con la intención de que sus labios se encontrasen con los de Santana, pero la latina tuvo más reflejos y se alejó de Brittany, mirándola con una mueca burlona dibujada en su rostro. La rubia frunció el ceño, cruzando los brazos por delante del pecho mientra que la latina soltaba una risotada juguetona.
"
La tercera foto hizo reir a carcajadas a ambas chicas, logrando con esto varias miradas por parte de los estudiantes que pasaban por el pasillo en ese momento. Brittany salía con gesto molesto, pellizcándole a Santana el moflete de la cara entre los dedos índice y pulgar. La piel estirada de la latina le daba un aspecto demasiado cómico como para no morir de risa con la instantánea.
"
Santana soltó un pequeño gemido de sorpresa cuando de repente Brittany atrapó su moflete con los dedos, estirando la piel de su rostro, aunque sin llegar a hacerle daño. El flash saltó por tercera vez, aunque las chicas realmente no se percataron del detalle.
—¡Auch!—se quejó la morena una vez que consiguió liberarse—¡Eso ha sido un golpe bajo, Britt!
—No te he golpeado... ¡y ha sido en la cara! Ese sitio no está tan abajo...—la rubia se quedó en silencio un momento, dándose cuenta de que tal vez, y solo tal vez, había dicho una nueva tontería sin sentido—Además, ¡tú te lo buscaste!
Santana hizo un pequeño puchero con el labio inferior, poniéndole ojitos a su chica. Y en cuestión de segundos Brittany pareció olvidar todo lo ocurrido y borró el ceño fruncido de su rostro. La latina sonrió cálidamente, y tras ponerse de rodillas sobre el asiento para tener algo más de movilidad, rodeó con sus brazos el cuello de Brittany. El flash saltó de nuevo, anunciando que la cuarta foto acababa de ser realizada.
"
Santana recorrió con la punta de los dedos la cuarta fotografía, siento como el corazón se le aceleraba al verse así misma abrazando a Brittany mientras que ella sonreía de nuevo, mostrándole los dientes a la cámara. Generalmente la rubia solía ser más dada a las muestras de afecto en público mientras que la latina se dejaba a hacer, así que la foto era definitivamente una agradable novedad para ambas. La morena le pasó un brazo por la cintura a Brittany, atrayéndola hacia ella.
"
La rubia no tardó demasiado en corresponder a la latina, abrazándola también con fuerza mientras que enterraba la nariz en el hueco de su cuello, aspirando su aroma. Después de unos breves instantes ambas se separaron, mirándose fijamente a los ojos.
—¿Me dejas besarte ahora?—pidió Brittany, mordiéndose el labio inferior.
Santana asintió un par de veces con la cabeza, feliz. Entonces la rubia se inclinó hacia adelante, atrapando los labios de la latina entre los suyos justo en el momento en el que el flash saltaba por quinta vez.
"
Brittany apoyó la cabeza sobre el hombro de Santana, mirando con cariño la última instantánea. Con cuidado, colocó otro imán en la esquina de la foto, asegurándose de que las cinco imágenes quedasen bien sujetas al metal, junto con otras fotos del Glee Club o las Cheerios. Santana aprovechó la posición para depositar un beso casto sobre la cabeza de Brittany.
La rubia se incorporó, dejando que sus ojos azules se perdiesen en los marrones de la latina, como en una especie de hechizo que solo terminó de completarse cuando sus labios tocaron los de la otra chica. Santana giró levemente la cabeza para darle a su novia un mejor ángulo, disfrutando una vez más del placer de poder sentir la lengua de Brittany jugueteando con la suya.
—Te quiero...—susurró la morena antes de volver a besar de nuevo a la rubia. A la mierda Figgins y su estúpida regla de las muestras de afecto en público.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
