Una Clase de Obsesión

0.8

Idaly

No se que pensar de esto que acaba de suceder, pero últimamente me han pasado cosas muy extrañas, primero todo lo relacionado con mi intercam...bio, espera un momento, lo que este lunático me está diciendo que desde hace 4 años que literalmente me ha estado acosando... Hace cuatro años yo no conocía Italia, seguía en Chile, eso significa que él ha estado ahí...

— Hace 4 años atrás no conocía Italia, es mi segunda vez aquí... —el estaba parado frente a la puerta, con un arma en una mano y un anillo en la otra, esperando mi respuesta, pero, aunque quisiera concentrarme en la manera que acaba de amenazar si no aceptaba el anillo, era lo que menos me importaba ahora, mi cabeza solo puede procesar en el momento en el que de dónde me conoce exactamente.

— ¿Quieres respuestas? Te las daré siempre y cuando decidas lo más evidente, una es la muerte y la otra es una...

— Cárcel en vida, eso es lo que es la segunda opción, me estas chantajeando porque dentro de esas opciones hay condiciones, no soy estúpida —trato de mantener toda mi compostura posible en no flaquear por tener un arma delante, haciéndome la idea de que si escojo la segunda opción, mi vida, la vida que había planeado en libertad ya no estaría como a mí me gustaría.

— Yo no he dicho jamás que eres estúpida, eso es algo que tú no tienes, eres bastante inteligente, y sin que yo te dijera, descubriste todo en el menor tiempo posible, para cualquier otra persona esto le hubiera tomado tiempo asimilarlo... ¿Acaso no lo entiendes? El querer respuestas tiene sus decisiones, depende de ti, qué opción prefieres, la opción uno —levanta ligeramente el arma en su mano derecha — O la opción dos —levanta ahora su mano izquierda con un resplandeciente anillo en la palma de su mano.

Aunque esto sea muy manipulador de su parte, literalmente tiene mi vida entre sus manos, en una está la muerte y en la otra mi libertad...

— Escojo la opción uno —tomó el arma entre mis manos y puedo decir que es bastante pesada, al menos para mí.

Mi decisión toma por sorpresa a Alexander, no me mira a mí, si no al arma que tengo entre mis manos, la sigue con la mirada meticulosamente, creo que se está planteando seriamente que eso puedo utilizarlo en contra suya.

— ¿Eso es lo que de verdad escogerías? Si es así, bien, disparate, me ahorraras el sentimiento de culpa si lo hacía yo mismo —la mano con el anillo seguía extendida, aún el anillo resplandecía en la palma de su mano, eso significaba que aún estaba la opción de arrepentirme, pero no, yo no me iba a arrepentirme, como el dijo, "Si no me tenía para él, no me tendría nadie", sin pensarlo dos veces bajo el seguro y coloco el dedo sobre el gatillo, posicionando el arma en mi cabeza.

No estoy del todo cuerda en este momento, solo sé muy bien que, si él quiere hacer una jugada en base a manipulación, pues entonces no lo dejaría jugar solo.

— Sabes, no creo que en tu sano juicio me pasarías un arma que esté cargada, se muy bien que no eres imbécil, así que déjame primero probarla para comprobar realmente si tiene balas en su interior, ¿Te parece? —inconscientemente sale una carcajada de mi interior, que hace que Alexander entrecierra sus ojos, pero sin perderme de vista por si hago un movimiento repentino.

Alzo el arma directamente hacia él, lo cual él no se inmuta, no reacciona ante el arma que está frente a su pecho, pero antes de que pueda apretar el gatillo, toma el arma desde el cañón y se la posiciona en su frente, quedando inclinado delante de mí.

— Vamos, dispara, estoy bastante fascinado por conocer una parte lunática de ti, no tienes ni idea de lo cuanto me esta fascinando esta nueva faceta tuya ahora mismo, así que dispara... ¡VAMOS CARAJO, DISPARA! —grita prácticamente en mi cara, pero aun así el coraje que traigo me hace enloquecer y aprieto el gatillo, pero de un rápido movimiento Alexander la quita de su frente haciendo que la bala vaya en dirección al suelo.