𝑪𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 31

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Ante el comentario de Meghan Ciro supo que era una sabía decisión. Dio un suspiró y hablo de forma seria.
- Te apoyo Meghan, no importa si mata algunos cazadores, o si mata a unos alfas, las manadas y la orden pueden seguir su camino, pero si le das lo que quiere, todo se acabara para todos.
- Es cierto Hermana, no importa si nos mata, tu no cedas. Le dijo Leonardo con una sonrisa
- No hagas lo que el quiere. Exclamó Danniel.
Meghan se acomodo en el suelo observando el lugar, cada uno estaba encadenado a una pared, a los lobos les colocaron un collar con puas de plata si se transformarán en lobos, aquellos instrumentos se les incrustarian en el cuello matandolos al momento. Ciro estaba encadenado de manos y pies y Meghan también.
- Dijo que lo haría... Susurro la joven pero todos escucharon claramente.
- Ese maldito de Elíseo ... Que tendrá planeado.
- No lo sé... Pero debemos estar alertas.
Las puertas se abrieron Elíseo entro arrastrando el cuerpo de un hombre. Todos miraron de quién se trataba, el hombre está inconsciente, dos lobos lo encadenaron en la pared y le pusieron las mismas cadenas que los lobos.
Meghan abrió los ojos al darse cuenta que era Gabriel, estaba herido, sangraba de la cabeza, su corazón se estrujó, no quería verlo de esa forma, la lastimaba, odia a Elíseo por herirlo.
Gabriel fue emboscado y capturado cuando regresaban al darse cuenta que había sido una trampa.
Meghan cerro los ojos llorando y se quedó dormida, pues lo podia hacer nada para ayudarlo, una hora más tarde escuchaba la voz de una mujer y al hacerlo el corazón de Meghan se estrujó.
- Suéltame, yo no tengo dinero para  pagar un rescate, que quieres de mí?... Cuestionaba la mujer que poco a poco se iba acercando a dónde se encontraba Meghan.
- No, no, no, no, eso debe ser una pesadilla... Decía con la voz cortada mirando a la entrada esperando ver a las personas que acaban de llegar.
La puerta se abrió, Elíseo arrojo a lo pies de Meghan a la mujer que trajo.
- Te traje compañía querido corderito.
- Como te atreves!!! Voy a matarte.
- Te dije que lo harías, no es así?
- Meghan! Por dios estás aquí? Tranquila cariño saldremos de aquí, yo te sacaré de aquí.
- Lo siento tanto Edith, perdón por meterte en esto...
Eliseo sabía que Meghan no haría lo que quería así que decido traer un estímulo para obligarla hacerlo, por su aroma e investigando descubrió que vivía con Edith y que ellas tenían un vínculo muy fuerte así que la capturó para tenerla como rehén.
- Que estas diciendo cariño? Esto no es tu culpa, estos tratantes de blancas pagaran por todo lo malo que han hecho.
- Tratante de blancas? Ja!!!  Se burló Elíseo.
- No puedes ir por la vida tomando a mujeres  y obligarlas a hacer cosas inmorales.
- Cállate! Solo estás aquí para motivar a mi dulce corderito. - Sonrió de forma macabra mirando a Meghan.
- Que? Meghan conoces a este hombre? Oh dios mío! hay más ahí? Que es todo esto?
- Como te atreves a involucrar a un humano en esto?! Eres un desgraciado.
- Se que la ves como tú madre, así que pensé que sería lo más conveniente para que esté cuando nos unamos ya sabes, para que ella te entregué a mi
- Jamás seré tu mujer.
- Corderito tu serás la Luna del nuevo Rey Alfa, debes sentirte honrada.
- Vete al carajo.
- Suficiente de charlas, necesito muchas pócimas, ponte a trabajar o tendré que utilizar motivación? Dos lobos tomaron a Edith y otro levantó a Meghan liberandola de las cadenas.
- Infeliz...
- Meghan que está sucediendo?
- Tranquila Edith, estarás bien, me aseguraré de ello.
Los hombres se llevaron a Meghan y a Edith la encadenaron en su lugar, ello observo detenidamente a los otros Prisioneros.
- Usted no es el hombre que Solía visitar a Meghan?
- Si, soy Ciro.
- Usted sabe lo que está pasando?
- Si.
- Porque tiene a Meghan? Porque estamos todos encadenados? Que quiere ese hombre?
- Señora Edith... Ese hombre no es un hombre.
- Que?
- Es un lobo.
- Por favor no juegue conmigo.
- En este mundo existen cosas que no son creíbles, todas las leyendas, cuentos, mitos y relatos todos ellos no lo son, son historias de hechos reales. Todo es real, los lobos existen, los vampiros existen, las sirenas, hadas y elfos, todo es real. En este lugar viven lobos y esos hombres que ve encadenados junto al que la trajo aquí son lobos y son los líderes de su manada. El hombre que la trajo aquí es Elíseo y el quiere ser el único lobo Alfa, para ello necesita de Meghan.
- Por qué? Ella también es un lobo?
- No, ella es una Meiga, una mujer con habilidades únicas, tiene la capacidad de crear pociones increíbles por ello la necesita, quiere que Meghan cree una pocion  para disminuir el poder de los otros lobos. Además para asegurarse de que siempre tendrá poder quiere a Meghna como su esposa.
- Maldito degenerado! Y que van hacer para ayudarla? Y a todo esto quienes son todos ustedes? Y cuál es su relación con ella? Pregunto observando a todos. Gabriel ya estaba despierto, aunque no pudo ver a Meghan sabía que ahí estaba por su aroma.
- Yo soy Ciro, soy un cazador y soy su mentor.
- Yo soy Danniel, soy un lobo y soy su ex.
- Yo soy Gabriel, soy un lobo y debía ser su pareja. Soy su pretendiente.
- Yo soy Leonardo, soy un lobo y soy como su hermano mayor.
- Esto parece un reality show... Y bueno si son lobos no tienen a más compañeros que los vengan a sacar de aquí.
- Si, deben estar en camino, no tardarán en encontrarnos dentro de las grutas. - Habló Danniel
- Grutas?
- Es en donde estamos. - Respondió Leonardo.
- No, estamos debajo de la represa.
- Que?!!! Todos exclamaron pues ellos creían que estaban en aquel lugar.
- Me trajeron en un auto y pude ver el recorrido, estamos debajo de la represa abandonada.
- Eso está en el otro extremo del bosque.
- Maldición, fue una trampa para desviar a los refuerzos.
- Y entonces nadie vendrá?
- Si lo harán, solo que tardarán más de lo esperado.
- Y mientras, que haremos?
- Aguantar.
- Y Meghan?
- Ella es fuerte, estará bien. - Hablo Ciro.
Tres horas más tarde unos lobos traían de regreso a Meghan.
- Cariño, estás bien? Te hicieron daño?
- Edith... Te sacaré de aquí, veré la forma.
- No te preocupes, no tienes que hacer nada de lo que te pidan, no lo hagas por mi.
- Edith tu no debías estar aquí, voy a protegerte.
- Deja de pensar en los demás, solo busca una forma de salir de aquí.
- Tenemos una semana para encontrar una forma de salir de aquí.
- Una semana?
- Es lo que tarda en crearse la pócima.
- Meghan! No puedes hacer un veneno contra ellos? - Exclamó Ciro emocionado pensando que así saldrían de ahí.
- No, también lo pensé, pero Elíseo solo medio los ingredientes y las cantidades necesarias. No puedo hacer nada.
- Meghan tengo esto, te sirve? Edith se quito el collar que Meghan le había regalo.
- Edith... Lo trajiste!
- Si, lo uso todos los días, pues fue un regalo tuyo, dijiste que me protegería.
- Si, se me ocurrió hacer un collar como el mío.
- Que tiene ese collar?
- Tiene un concentrado de Aconito.
- Que es eso? Pregunto Edith observando el collar.
- Es un veneno letal para los lobos.
- Meghan úsalo y sal de aquí. Le pidió Gabriel.
- Aún tenemos unos días, veré alguna forma para salir de aquí. Conservalo tú Edith por si acaso.
- Hey basuras, tengan. - Un lobo llegó y les aventó una bolsa de sandwiches y botellas de agua.
Edith los tomó, los iba a repartir, pero se dió cuenta que ellos no podrían comer al estar encadenados.
- Meghan comamos nosotras primero para poder darles a ellos.
- Si.
Las mujeres comieron el sándwich, para luego ayudar a los otros a comer, Edith le dió de comer a Leonardo y Danniel, mientras que meghan le dio de comer primero a Ciro y luego a Gabriel.
- Me hubiera gustado que esto se diera en otra situación.
- No te emociones, solo lo hago porque no puedo dejarte sin comer.
- Te preocupas por mi?
- Necesitamos estar bien para poder pelear cuando sea necesario.
- Te prometo que te protegeré con mi vida, haré lo que sea necesario sin importar nada. Meghan yo...
- Solo come Gabriel, quiero dormir un poco.
- Gracias.
A la mañana siguiente Elíseo fue personalmente por Meghan.
- Corderito despierta.
Meghan y Edith estaba dormidas abrazados una a la otra, ambas comenzaron a despertar.
- Buenos días corderito, es hora de trabajar.
- Tengo hambre, quiero ir al baño, necesito bañarme.
- Claro, claro, primero lo más importante el desayuno, sino no trabajarás bien. Y después todo lo demás. Después de todo debo consentir a mi futura esposa.
- Me das asco.
- Ja! Me encanta tu rebeldía, ojalá la mantengas hasta el último momento. Andando.
- Edith y los demás también necesitan ir al baño y comer.
- Lo que tú pidas mi Luna. Ustedes ya saben que hacer. Se dirigió a sus subordinados.
Un lobo entró a la celda y se llevó a Edith al baño.
- Ya está, puedo ser muy complaciente con los míos, solo no hagas estupideces.
- Vamos tengo que ver las plantas.
- Adelante. Salió Meghan y detrás de ella Elíseo posando su mano en su baja espalda.
- Ese maldito de Elíseo voy a matarlo. Rugió Gabriel jalando las cadenas y provocando que lo lastimaran.
- Solo vas a lastimarte! Lo reprendió Danniel.
- A caso no viste como la tocó?!!!
- Si, pero no podemos hacer nada.
- Ya deberían estar aquí los refuerzos... Susurro Leonardo.
- Y que pasará cuando lleguen? La voz de Edith sonaba nerviosa.
- Será una gran pelea, habrá mucha sangre, muertos y solo los más fuertes se mantendrán en pie, pero eso sucederá si Meghan no termina la pócima, por el contrario si ella la termina antes de que lleguen los refuerzos...
- Que pasará?
- Nos masacraran a todos.
- No, debemos hacer algo.
- Solo podemos esperar.
Por la noche la luna llena invitaba a los lobos a transformarse, a correr por el bosque y ser libres, y a otros mas  a entregarse a su pareja, en el caso de Elíseo el solo quería liberar su tensión sexual. A mitad de la noche se metió a dónde estaban los prisioneros, quería tomar a Meghan.
- Suéltala!!! Exigió Gabriel.
- Maldito degenerado, apestas a sexo! No toques a mi hermana!!!
- Mierda! Estás cadenas no ceden... Meghan...
- Suéltame, déjame... La joven se resistía Pero su fuerza no se compara en lo más mínimo con la del lobo. Edith estaba asustada sin embargo no dejaría de intentar ayudar a Meghan, los lobos intentaban sacarse las cadenas Pero todo era en vano.
- Deja a mi hija!! Gritó Edith arrancándose el collar que llevaba para arrojarlo a Elíseo. El líquido escurrió por el rostro del lobo quien grito al sentir ardor, momento que aprovecho Meghan para safarse de su agarre
- Malditas perras! Quería tratarte decentemente Corderito, Pero lo pones todo difícil, que te cuesta quedarte inmóvil con las piernas abiertas.
- Prefiero estar muerta!
- Eso se puede arreglar. - Eliseo camino con odio hacia la joven, la tomo del cuello, apretando para que le fuera imposible respirar. - Pero no voy a caer en tu juego, no, no voy a matarte aún, te necesito para que termines tu trabajo. - La soltó separándose de ella unos pasos, momento que aprovecho la joven para tomar una gran bocanada de aire. - Pero esto no se quedará así. - Giro hacía Edith y la golpeó un par de veces, Meghan se enfureció y atacó a Elíseo Pero este la recibió con un golpe en el estómago para luego abofetearla haciendo que su labio sangrada, no con forme con eso, la arrojo al suelo y le dio un par de patadas.
- No!!? Gritaron todos al ver a la joven en el suelo.
- Voy a matarte Elíseo!!! Gritaba con furia Gabriel jalandose para quitarse las cadenas Pero lo único que ocasionaba era lastimarse cada vez más, su piel ya estaba abierta, la sangre escurria aún así deseaba arrancaste las manos para proteger a Meghan.
- Eres mía Meghan! Que te quede claro, así que harás lo que yo te diga. A hora, quédate ahí en el suelo y abre las piernas.
Por fortuna de la joven un lobo llegó a interrumpir con algo importante.
- Alfa tenemos problemas.
- Maldición! Que no ves que estoy ocupado.
- Disculpe mi señor pero...
- Habla de una vez. De que se trata? Pregunto fastidiado.
- Nos han encontrado.

Continuará...

ꜱɪ ᴛᴇ ɢᴜꜱᴛᴏ ᴇꜱᴛÁ ʜɪꜱᴛᴏʀɪᴀ ᴛᴇ ɪɴᴠɪᴛᴏ ᴀ ʟᴇᴇʀ ᴍÁꜱ ᴇɴ ᴍɪ ᴘÁɢɪɴᴀ:

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•❉্᭄͜͡•🌸𝑳𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒆 𝒔𝒖 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒂 𝑹𝒖𝒊🌸•❉্᭄͜͡•

La Meiga y el Lobo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora