~ Capítulo 05 ~

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♡ El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos - William Shakespeare

Niall

¿Qué mierda me está pasando? Desde que le dije a la familia de Alex las suposiciones que tenemos hacia ella no he parado de pensar sobre eso.

Llevo cuatro meses en la pasantía, y ya había pasado todo esto, pero nunca sentí lo que siento ahora a respecto con Alex. Me siento raro, como si fuera mi culpa las suposiciones que tenemos con los demás enfermeros.

-¿Qué sucede Niall? -pregunta una de las enfermeras.

-Nada, solo estoy cansado -por parte era verdad.

-Solo te queda media hora, tranquilo -me sonríe.

-Gracias por el apoyo Súsan -le sonrío.

-De nada -devuelve el gesto-. Por cierto mañana están los resultados de la paciente Alex Johnson de la habitación 123 y el señor de la habitación de al lado falleció hace unas horas, tienes que llamar a la morgue -dijo como si nada.

Me senté en la silla que estaba en la sala de descanso, tome mi cabeza con las manos y suspiré.

-Lo siento Niall, olvidé que eres nuevo -dijo muy preocupada-, llamaré yo a la morgue, no te preocupes.

-Está bien Súsan, es solo que aún no me acostumbro a este tipo de cosas -vuelvo a suspirar.

-Si lo sé, me pasaba lo mismo hace dos años -pone su mano en mi hombro.

Súsan empezó medicina hace dos años como acaba de decir y cuando entré yo fue la primera quien me explico muchas cosas para aprender mejor. Ella tiene veintidós años y es muy bella, aunque no es mi tipo. Su cabello es negro, muy negro y brillante, lo lleva más abajo de su cintura. Es alta, más o menos como yo; sus ojos son grises y su piel extremadamente blanca.

-¿A ti te costaba? -le pregunté y ella asiente.

-Me tomó varios meses acostumbrarme, no voy a negar que cada vez que me llaman para retirar un cuerpo sin vida de una habitación no siento angustia.

-Niall -me llama William entrando a la sala de descansos.

-¿Qué sucede Will? -le pregunto.

-Tu estarás encargado de la chica de la habitación 123 -oh dios, esto no puede ser.

-¿Alex Johnson? -asiente-, ¿Por qué yo? Franck es el que se encarga de ella no yo.

-Renunció a cuidarla por alguna razón, como vi que tu te llevas bien con ella decidí que tú lo harías -dicho esto sale de la sala de descanso.

Como verán yo no era el encargado de Alex, sino que era Franck, las veces que yo fui a esa habitación era por él me mandaba a hacer esas cosas. Ustedes se preguntaran, ¿Cuál es el problema? El problema es que, como ya dije, me sentía raro desde que hablé con el padre de Alex.

-¿Estás bien? -me pregunta Súsan.

-Si, debo ir a ver como esta ella -digo y me retiro a su habitación otra vez.

En menos de cinco minutos estoy allí, entro a la habitación y ahí está el chico de la primera vez qué entré a esta habitación, Erick creo que era su nombre si no mal recuerdo, besando otra vez a Alex, ¿Por qué siempre se besan cuando yo llego a la habitación?

-Un, lo siento -digo rascando mi nuca.

-¿Otra vez tú? -dice el moreno molesto.

-Ya dije que lo siento, solo haré unos chequeos y me iré para que puedas besar a tu novia en paz -dije algo enfadado.

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