Secrecy [ KTH - JJK ]

Capítulo 14

—¿Tienes listo el pedido, Gguk?—Wooyoung preguntó a la vez que se acercaba a la encimera al ver a su compañero de trabajo con sus codos apoyados en ésta y su mirada perdida en algún punto de la cafetería.

—Si, solo... solo dame un momento— Jeongguk murmuró mientras dejaba el café y el sándwich en una bandeja y se lo tendía a Wooyoung, quien al recibirlo, miró lo que había escrito en la nota y lo que estaba en la bandeja.

—Ggukie, era un Capuccino con una donut de chocolate, no un Café helado y un croissant.

Ante aquellas palabras, Jeongguk se levantó y tomó la nota que le estaba tendiendo su amigo para poder leerla y suspiró con frustración al ver que éste tenía razón.

—Perdón Woo, lo arreglo de inmediato.

Después de un par de minutos, Jeongguk ya había cambiado la orden, por lo que busco a Wooyoung con la mirada, hasta que lo encontró atendiendo a un par de nuevos clientes, por lo que decidió esperar.

Al estar listo, el pelinegro caminó hacia donde estaba Jeongguk para entregarle el nuevo pedido, a la vez que retiraba la bandeja con el pedido anterior.

—Estás muy distraído últimamente…

—¿Tú crees?

Wooyoung tarareó en afirmación. —¿Ocurre algo?

—No es nada—murmuró el castaño con su rostro afligido, por lo que Wooyoung asintió no tan convencido y decidió llevar la orden a la mesa correspondiente.

Al finalizar, se acercó nuevamente a la encimera, esta vez para entrar al área de Jeongguk, y quitarle la orden de sus manos para entregársela a otro, luego, tomó el codo del castaño y lo arrastró hacia el almacén con la intención de platicar en privado.
 
—Ya suelta—habló después de haber cerrado la puerta con seguro—Has estado muy distraído y en tu rostro se nota que estas apunto de llorar así que cuéntame lo que está pasando.

El nombrado agachó su mirada y mordió su labio intentando contener las ganas de llorar, pero necesitaba desahogarse con alguien.

—O si no quieres, puedo llamar a Yoon-

—El lunes me llamaron de la universidad—susurró suave, interrumpiendo a Wooyoung, quien calló inmediatamente para prestar atención a las palabras que comenzaron a salir de su amigo—. Me dijeron que ya no me pueden aplazar más la deuda y que si no pago de aquí al viernes, no podré graduarme.

—Eso es en dos días, Ggukie—Wooyoung habló un tanto alarmado.

—Lo sé—le respondió con un sollozo, por lo que sin pensarlo dos veces, Wooyoung lo tomó de un brazo para atraerlo hacia su cuerpo, logrando que  las lágrimas qué estaba intentando contener, cayeran con facilidad—. Tanto estudiar para tener buenas notas y no poder graduarme por falta de dinero.