Capitulo Catorce

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Desconocido


Te ves tan hermosa como siempre. Caminando tan despreocupada, y tan elegante a la vez.

Cada prenda que usas la lucís muy bien, te quedan como una segunda piel. Tu pelo suelto es acariciado por el viento, a la luz del sol mechones de tu pelo se ven de un castaño muy bonito.

Por mirarte, me choco con las personas que van caminando en sentido contrario a mí. Sos mi más bonita distracción.

Acomodó mi gorra un poco más a mi frente para que no pudieras verme o reconocerme incluso. Cada tanto miras a mí dirección, como sí supieras que estoy aquí, contigo, cuidándote.

Si alguien me preguntara sí volvería hacer lo que hice con esos dos chicos que te lastimaron una vez, lo haría sin dudarlo un solo segundo. Se que muy dentro tuyo, estás agradecida conmigo, por más que no sepas que lo hice.

Si alguien me viera ahora, pensaría que te estoy siguiendo como si fuera un acosador, pero en realidad, solo te estoy cuidando, para que no te pase lo mismo que esa noche. No quisiera volver a cortar otro cuerpo como antes.

Tan solo el recuerdo me hacía dar nauseas, pero no lo pensaría dos veces si lo pide Ellie.

Conozco el recorrido que haces, estas yendo a buscarlo a él. Un hombre que no te ama, que solo te usa y no te valora por lo que sos y quien sos. En cambio, yo daría todo por tenerte a mi lado, te acompañaría hasta los rincones más oscuros del mundo.

Lo esperas afuera de su trabajo, te quedas sola sentada, con el miedo reflejado en tus ojos. Por cada persona que pasa cerca tuyo es un saltito que pega tu cuerpo, se nota que estás asustada, te da miedo sacar tu teléfono en la calle, tenéis miedo a que te hagan lo mismo que la otra vez.

Yo te protegería a toda costa, hasta de una araña diminuta, siempre estarías acompañada de alguien. En cambio, tu estúpido novio, te deja sola a la intemperie, esperando por él, en vez de salir e irse contigo.

Mire sobre tu hombro, a la vidriera en donde él está, y se lo ve muy pegado y cariñoso con otra chica, mientras tú estás ahí afuera esperándolo, él ríe mientras vos estas cegada por el miedo de la sociedad que te rodea.

Tarde o temprano, tendré que encargarme de Marco. Verlo me genera asco, siento un rechazo hacia él muy grande.

A lo lejos veo la intención de ese chico, acercarse a vos. Tratas de no mirarlo para que no te hable, pero no funcionó.

Se te para al frente y no logro descifrar qué te dice. Me cruzo a la vereda en que te encuentras y si hace falta rescatarte. Noto lo incomoda que te hace sentir, trató de acercarme más a vos, pero con una sonrisa y un "no gracias", lograste que se fuera.

Vuelvo en la zona alejada que estaba antes, y me siento en una de las banquetas de la calle. Me quedó observando cada uno de tus movimientos, memorizo cada prenda que llevas puesta y tus gestos hacia cada persona que pasa cerca tuyo.

Marco sale por la puerta de su trabajo, y vos vas directo a abrazarlo, dejas un beso en sus labios y se dan la vuelta para volver a irse por donde viniste. Me levanto de la banqueta, para irme tras de ustedes sin que me noten y comienzo a caminar lentamente.

Marco te abraza por la cintura y te pone en frente de él, te da un beso apasionado, y vos tratas de alejarte un poco, pero te sostiene con fuerza y finalmente te rendís ante su beso y se lo sigues como si el mañana no existiera en absoluto.

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⏰ Última actualización: Oct 10 ⏰

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