Mentira De Patas Cortas (Suga-BTS)

Capítulo 22

Puse los pies dentro de mi casa luego de un largo día de trabajo. Estaba cansada, ese día trabaje más de lo habitual, por esa razón solo me di una ducha y luego salí a relajarme un poco a la terraza.

Mientras estaba en la terraza, alguien llegó a casa y tocó el timbre, me levanté del sofá en el que estaba sentada y me asome por el balcón para poder ver quién estaba ahí.

-¡Mamá! - era mi madre quien estaba en casa, así que corrí hacia la puerta para abrirle.

-¿Cómo has estado? - me abrazó - Tu embarazo ya es notable.

-No estoy bien, pero sigo de pie. - suspiré para no llorar delante de mi madre.

-Tu esposo fue a buscarte a casa y eso me dejó preocupada, por esa razón estoy aquí junto a tu padre.

-Me da gusto que estén aquí, así me hacen compañía en estos días que se avecinan.

-Claro, siempre estaremos para ti y para tus hermanos.

-¡Gracias!

Instale a mis padres en la habitación que antes ocupaba la hermana de Suga, pues de seguro Eun Bi vendría a casa esa tarde con su padre como de costumbre y se quedaría en su habitación.

Más tarde, justo después que mis padres se instalaran, mi madre llegó a la cocina para hablar conmigo mientras yo preparaba la cena.

-¿Qué tiempo tienes de embarazo?

-Tres meses.

-¡Vaya! - mamá se paró a mi lado - ¿Cómo está todo aquí?

-¿Cómo crees que está? - volteé a verla.

-No lo sé, pero al ver a Suga en casa sentí que algo andaba mal y por eso estoy aquí.

-Pues sí está todo mal, incluso nos vamos a divorciar.

-No puede ser. - mi madre se sorprendió - ¿Qué fue lo que los llevo a tomar esa decisión?

-Yoon Gi extendió la hipoteca y le compró con ese dinero una casa a la madre de su hija.

-________, ¿Eso te molesta? - asentí - ¿Por qué?

-Mamá... - solté el cuchillo - Yo hice cosas que no debía por salvar esta casa cuando Yoon Gi se quedó sin trabajo. - bajé la cabeza - Incluso hasta lo traicione con otro hombre.

-¿Por dinero?

-No. Lo que sucedió fue que me sentí protegida al lado del chico mientras todo aquí era un caos.

-Entiendo. - mi madre colocó su mano sobre mi hombro.

-Ha sido un tiempo duro para mí, porque hasta una hija de mi esposo llegó a casa, su familia entera se vino a vivir con nosotros y luego su ex esposa también.

-¿Cómo soportaste todo eso?

-No lo soporte, por eso me fui de aquí, hice cosas indebidas y ahora estoy a pasos de quedarme sola con mi bebé.

-No estarás sola, tu papá y yo siempre estaremos contigo. - mi madre me abrazó - Vamos a terminar la comida.

La cena estuvo lista y mis padres se sentaron en la mesa, con sus caras sonrientes me esperaban, así que me aleje de la puerta en dónde esperaba a Yoon Gi y me senté con ellos en la mesa.

-¿Quieres esperarlo un rato más? - preguntó mamá.

-No, vamos a comer.

Lave los platos y salí un rato al balcón, podía ver el anocher con tranquilidad, cosa que no hacía desde hacía mucho tiempo. A lo lejos vi la camioneta de Yoon Gi, venía lentamente hacia la casa, por lo que esperé a que llegara para poder hablar con él una vez más sobre el tema del divorcio.

Cuando Yoon Gi se bajó de la camioneta, traía con él un sobre grande en la mano, el cual me pasó al estar delante de mí.

-Iré por mis cosas. - no habló nada más, solo entró a la casa y listo.

Abrí el sobre y vi los papeles del divorcio ahí, resignada entré a la casa y tomé un bolígrafo de mi lapicero, luego caminé hacia mi habitación y comencé a hablar con Yoon Gi sobre esa decisión.

-Voy a firmar los papeles, pero dime una cosa antes. ¿Qué te hizo tomar esta decisión tan rápido? Esta mañana no querías separarte de mí.

-Hable con Jimin hoy en la empresa. - listo, ya sabía que había sucedido - Jimin me contó que te dio trabajo y que te llevó a la cama con facilidad. ¿Qué clase de mujer eres?

-¿Me estás diciendo fácil?

-¿No lo eres? - cambió la mirada - Firma los papeles, no tengo nada que hacer aquí.

-Esto es increíble. - firmé los papeles - Toma.

-Vamos a vender la casa, así que recoge tus cosas también porque ya tengo quien la va a comprar.

-Está bien. - me acerqué a la puerta - Mi parte del dinero se la puedes dar a tu hija, a ella le hace más falta que a mí. - me miró serio, pero no dijo nada.

Mi esposo salió de la casa molesto, no se despidió de mí ni de mis padres, quienes estaban apenados con la situación.

Dos días más tarde comencé con los preparativos de la mudanza, pues el chico que iba a comprar la casa había venido a verla y pronto se estaría mudando a ella.
Fue poco el tiempo que tuve, por lo que me llevé solo lo que necesitaba a mi nuevo apartamento cerca de Siena.

-¿Ya es todo? - preguntó papá al traer la última caja.

-Sí, es todo. - dije viendo el desorden que ahora tenía que arreglar.

-Este lugar es muy pequeño para el bebé y para ti, deberías considerar mudarte pronto.

-Cuando reciba el dinero voy a buscar una nueva casa, puedo pagarla si vivo sola con el niño. - sonreí.

...