Me enamore de la persona que menos esperaba...

VIII

Había pasado un mes. Tan rapido como sentir que pasaste un año entero. Skye todavía le cuesta enteder sus sentimientos, mientras Everest terminaba su trabajo y fue en camino a su casa en Bahía Aventura.

Al llegar a Bahía Aventura, sintió el calor que hacia bastante que no lo experimentaba. Tanto así que se quito su capucha y se la puso como para la cadera.Es un amor de cachorra. Al llegar a su primera parada, sintiendo que los rayos de Sol se posaban en su cuerpo, dando sombra su figura.

Había llegado a su hogar, donde no estaría
Tracker. La Husky deja aún lado sus maletas y empezaria a buscarlo. Tanto tiempo aprovecho pero no hubo nada, solo vio una camara donde Tracker se había olvidado llevar. Everest se dirigió a su habitación, que estaría totalmente como la dejo, Su cama ordenada, su escritorio.

Everest no pudó contenerse en llamar a Marshall, su Ex y su amigo más cercano. Al escuchar la llamada que fue marcada de inmediato, también fue de inmediata de responder.

¡Marshall ya llegué!-Aseguró la Husky con tanta alegría que se tiró de una vez en su cama.

¿De verdad? Bueno, ya voy para allá con un regalito!-Dijo el Albino todo emocionado. La husky sospecharia las intenciones de Marshall con el misterioso regalo, ¿Seria una de sus bromas? ¿Seria uno de sus chismes? ¿Seria uno de sus momentos favoritos?. Puede ser alguna de sus comentarios posibles pero uno de ellos debe ser.

Se había colgado tan rapido la llamada, tanto así que se escuchaba desde lejos un carro que acechaba cerca de la casa de Everest.

La Rusa bajo hacia la Sala principal, para inspeccionar si era broma que Marshall haya llegado tan rapido. Pues no estaba equivocada, Marshall había llegado tan veloz como un corredor en los juegos olímpicos. Pero había alguien que estaba cubierto con unos trapos oscuros, igualmente amarrado a la vez.

Un escalofrío recorrio por el cuerpo de Everest, pensó si de verdad merecía un regalo enorme solo por su llegada.

Marshall fue recibido de forma cómoda con aquel persona que fue cubierta.

Ooh.. Marshall, pensé que era un regalo diminuto..-Dijo Everest impresionada por el regalo que sea una persona, pero parecía familiar la altura de este y su figura.

Pues no mi ciela, este regalo es menos esperado y un poco más grande de lo normal.-Dijo el Albino todo emocionado y ansioso que como vaya a reaccionar la Husky.

¿Qué tal si te parece que te ofrezca unas galletas?-La Rusa quisó ofrecerle algo al bombero pero este prefirió no acceder a la petición de esta.

Marshall susurrá al oido de la persona misteriosa, que al instante esta se colocó de pie y le pidió a Everest que le soltara las cuerdas de regalo que la sostenían.

La Husky sin pensarlo hizo la petición de esta, que al instante se reveló que quien era el misterioso regaló era..

Skye...