006 ▬ I'm the one who touches you

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Días después, Lilith apareció en la iglesia con un aire de despreocupación cuidadosamente estudiada. Quería verlo, necesitaba verlo, pero no podía presentarse así como así. Entonces, encontró la excusa perfecta al ver a la hermana Sonia cerca del altar.

—Hermana, qué hermoso lugar —dijo Lilith con una sonrisa—. Estaba pensando que sería interesante conocer más sobre la congregación, ¿sería posible que me hiciera un recorrido?

La hermana Sonia, siempre dispuesta a servir, asintió con entusiasmo. No se veía a menudo a visitantes tan interesados en la vida detrás de la iglesia.

—Por supuesto, querida —respondió la hermana con una sonrisa amable—. Será un placer mostrarte todo. Es un lugar muy especial para nosotros.

Lilith siguió a la hermana Sonia, quien le mostraba con detalle cada rincón: la sacristía, los jardines, la pequeña biblioteca donde se guardaban viejos textos religiosos. Todo parecía impecable, lleno de paz. Sin embargo, el interés de Lilith no estaba en esos espacios.

Mientras caminaban por el corredor que conectaba con las habitaciones de los residentes, Lilith sintió su corazón acelerarse. Sabía que estaban cerca del lugar que realmente le interesaba.

—¿Y aquí es donde viven las hermanas? —preguntó con fingida curiosidad, sus ojos fijos en la puerta que sabía que pertenecía a Charlie.

—Así es. Aquí tenemos nuestras habitaciones —respondió la hermana Sonia con orgullo—son modestas pero muy cómodas.

Lilith asintió interesada, guardándose la sonrisa luchaba por mostrarse.

Finalmente, llegaron a la puerta que Lilith había estado buscando. El nombre del padre Charlie estaba grabado en una pequeña placa de bronce. La puerta cerrada, silenciosa, parecía esconder algo más que la sencillez que prometía la hermana Sonia.

Lilith, con su voz cargada de inocencia calculada, comentó:

—¿Y el padre Charlie vive aquí también? —Sus ojos brillaron un poco más cuando la hermana asintió—. Siempre me ha parecido fascinante la vida de alguien tan entregado a su fe.

❝𝗣𝗘𝗖𝗔𝗗𝗢𝗦 𝗖𝗔𝗣𝗜𝗧𝗔𝗟𝗘𝗦❞ CHARLIE MAYHEWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora