Enamorado de un prostituto (Hyunlix)

13

La mirada de Hyunjin se frunció al notar las manos entrelazadas de ambos.

El corazón de Felix se aceleró al verlo y, por inercia, quiso ir hacia el pelinegro, pero Minho reforzó su agarre y lo jalo hacia él. —Vamos. —expresó para seguir con su paso. 

—Espera yo… —Felix quería hablar con Hyunjin, pero Minho lo arrastró con él. 

Felix al pasar por su lado, miró fijamente su rostro, pero el pelinegro no lo volteó ni a ver.
Esto hizo sentir aún peor al rubio, pero aun sin mirarlo, la mano de Hyunjin agarró su brazo deteniéndolos.

—Felix parece no querer ir contigo —Los ojos del pecoso miraron con sorpresa al pelinegro que aún les daba la espalda.

—¿Ahora eres el vocero de Felix? 

—No necesitas ser un genio para darte cuenta de que no quiere ir contigo.

—¿Por qué no dejas de meterte en los asuntos de otros y te preocupas por los tuyos? —El pelinegro se dio la vuelta aun sin soltar el brazo de Felix y con una mirada fría vio a su amigo.

—Felix es mi asunto, así que suéltalo.

—Nosotros íbamos a salir, el que debería de soltarlo y dejar de entrometerse, eres tú.

—Sigues siendo tan infantil —Felix al ver que comenzaban a lanzarse odio entre sí, decidió intervenir.

—Por favor, paren —ambos miraron al joven. 

—Entonces, vámonos —expresó Minho sin pedir el consentimiento de Felix, pero este le frenó.

—Yo quisiera hablar con Hyunjin.

—Está bien, habla con él lo que tengas que hablar y vámonos —. Felix sentía pena de rechazar la invitación, pero quería estar con el pelinegro.

—Lo lamento. No quiero salir, Minho, perdóname. —Se inclinó para pedir una disculpa al rechazar su invitación. 

Al ver que no cedería. Pensó en retirarse antes de que lo comenzara a ver como alguien pesado. —No tienes por qué disculparte, ya saldremos otro día. ¿De acuerdo? —Dijo esto mientras miraba fijamente a Hyunjin con una sonrisa cínica, a lo que el pelinegro solo le veía con una mirada afilada. 

Felix afirmó con su cabeza y se marchó. —Hyunjin

—Dame tiempo —le interrumpió y se alejó del menor, cosa que Felix interpretó como desprecio. Sin embargo, esto no era así, Hyunjin solo trataba de enfriar su cabeza. 

—¿Te he vuelto a molestar, verdad? —Pronunció cabizbajo —. No lo volveré a hacer —dijo mientras se daba la vuelta para irse. Hyunjin de inmediato se dio la vuelta y tomó su muñeca.

—¿Quieres dejar de pedir disculpas? Me haces sentir como una mala persona. No estoy molesto contigo, solo necesitaba calmar mis nervios para no ir tras de Minho y golpearlo.

—¿Por qué quieres golpearlo? 

—Es algo que no importa, además no quiero hablar de él. Te daré un consejo: no confíes en él.

—¿Por qué no?

—No quiero referirme a él como mala persona, él es un buen chico, pero él en estos momentos está pasando por un proceso difícil y se comporta como un idiota.

Hyunjin al ver la situación fuera de la casa de Felix, se había dado cuenta de que había caído en una de las trampas de Minho para molestarlo. Y que lo más probable que lo que había visto ese día en el restaurante, no era culpa de Felix. 
Haciéndole sentir culpable por haberlo tratado mal, cuando no lo merecía.