Secretos Oscuros Del Corazón (Supercorp) AU

CAPÍTULO XVI: NO ELEGIMOS A QUIEN AMAR, PERO PODEMOS EVITAR NO LASTIMAR.

Lena se sentía muy nerviosa, en su escritorio su asistente Jess, había traído muchas revistas y cartas con solicitudes para entrevista, dentro de dos días harían la inauguración oficial de L-Corp y el mundo podría ponerle al fin una cara a su rostro, al solo Jack haber dado la cara últimamente. Cuando sucedió lo de Lex, no todo el mundo pudo enlazarla, al haber estado lejos y no participar como familiar para abogar por él; hasta ahora, sus empleados habían firmado acuerdos de no divulgar información de ella ni mucho menos tomarle alguna fotografía hasta estar lista de que el mundo pudiera verla. Lo único que la mantenía segura, era que deseaba contarle a Kara sobre su parentesco con Lex Luthor, y tenía fe que no la juzgaría, que la oiría, que no se alejaría como las demás personas al saberlo. Confiaba en Kara, al ser una personas de buen corazón y bondadosa, no la encasillaría como todo el mundo.

—Señorita Luthor, la señora no quiso esperar a ser nombrada —interrumpió Jess con molestia, ganándose la atención de Lena.

La pelinegra frunció su entrecejo, manteniendo la serenidad al reconocer a su madre, con expresión seria y ojos calculadores, supervisando hasta las paredes.

—Está bien, Jess. Puedes retirarte, si necesito algo, te llamaré.

La asistente se fue, pero antes miró a Lillian Luthor con sospecha.

Lena se puso de pie, cruzándose de brazos ante la presencia no grata de su madre, a la cual no veía desde su regreso a EE.UU, cuando llegó a su apartamento a reclamarle sobre haber donado para el proyecto de Sam y de la cual aún estaba enojada, por lo ocurrido con las hijas de Kara. Aún tenía eso en su mente, sin saber el por qué su madre actuó de esa manera, y qué planes tenía con respecto a lo que hizo, lo que para ella, no tenía ningún sentido.

—Vaya, no entiendo cómo es posible que me entero por revista y la televisión que la pequeña Luthor inaugurará L-Corp, anteriormente conocido como Luthor Corp dentro de dos días y sin ser invitada —expresó descontenta Lillian, frunciendo sus labios al culminar.

Lena rió sin gracia, entrecerrando sus ojos verdes ante la mirada de su madre, que parecía reprobar todo de ella, cosa que siempre había sido así y de la cual estaba más que acostumbrada. Nunca iba a hacer que esa mujer le tuviera respeto u orgullo por todo lo que lograra algún día, porque nunca la quiso y eso no cambiaría nunca.

—¿En serio? Así como yo nunca me enteraría que eres secuestradora de niñas —acusó Lena, demostrando que no podía olvidar ese hecho de aquel día.

La boca de Lillian se crispó, sus ojos azules brillaron con diversión y se encogió de hombros, restándole importancia a la acusación de Lena. La pelinegra apuñó sus manos, conteniéndose de golpear a su madre, por su forma de actuar, lo cínica que era, así como Lex.

—Exacto, así como yo no me enteraría lo que pasó en Inglaterra con Lex.

El shock fue evidente en el rostro de Lena, al ver como su madre soltó esas palabras y empezaba a evaluarla. La respiración de Lena se alteró, su cerebro entró en un colapso, al querer bloquear todo recuerdo mínimo de ese tiempo mientras su corazón, quería acceder a todo ello para poder enfrentar a su madre; aguantó las ganas de llorar, como siempre se había entrenado para estos casos, en no demostrar debilidad ante sus enemigos. Y sí, su familia siempre había sido su enemigo número uno.

»—¿Entonces, Lena? ¿Qué pasó en Inglaterra?

—Señorita Luthor, perdón de nuevo pero... —Jess entró con mucha velocidad detrás de una pelirroja que Lena ya conocía.

Lo que Lena no sabía, que dicha pelirroja trabajaba con Maggie, la cuñada de Kara y a quien recién había ayudado en decorar su apartamento para pedir matrimonio a su novia. El intercambio de mirada entre ambas, no pasó desapercibo por su madre, porque Lena vio la sonrisa presumida que emitió Lillian al notar la tensión.

—Mamá Luthor visitando a su pequeña niña —expresó la agente Danvers mordazmente, Lena la había investigado aquel día de su visita.

—¿Por qué no lo haría? ¿Acaso la suya no la visita? —contraatacó Lillian.

Alex dio un paso hacia adelante amenazante, pero Maggie la detuvo, poniendo su mano en su pecho para detenerla antes que cometiera una estupidez. No perdió esa mirada del deje de tristeza en la mirada de Lena al ver la confianza y familiaridad con la que tocaba a Alex, quizás comprendiendo que era esa mujer a quien ella estaba por pedirle matrimonio; por ende, la hermana de Kara. Lo que la confundía, porque ahora entendía que Lena y Lena Luthor eran la misma persona, lo que significaba que era una amenaza para las hermanas Danvers y que, podía tener sentido que su cercanía hacia Kara y las niñas, era para hacerle daño. Si unía los puntos, ese día que las niñas desaparecieron, ella estaba junto a ellas, lo que armó todo para que su madre se las llevara.

—Agente Danvers, me sorprende su visita como siempre —mencionó Lena, dejando de ver a Maggie y enfocándose en la agente, que ahora suponía que era la hermana de Kara.

—¿Acosando a mi hija, agente? —se burló Lillian.

—¿Y usted acosando niñas?

—Alex... —advirtió Maggie, pero la pelirroja no dejaba de ver a madre e hija.

—Juro por Dios, que si usted vuelve a acercarse a esas niñas, no habrá un Lex Luthor que la salve de su miseria —amenazó Alex, señalando a Lillian y después cambiando la vista hacia Lena—-. Y tú, Luthor. También estás advertida, no cometas las mismas estupideces de tu familia.

Lena mostró su máscara, no dejando que las palabras de Alexandra Danvers le afectara y viendo como esta se marchada, seguida de la morena bajita, que le dio un asentimiento antes de salir. Su madre se giró, alzándole una ceja retóricamente por lo acontecido.

—¿Y bien? —exigió Lillian, sonriendo presumida a su hija—. ¿Asumo que Kara Danvers no sabes quién eres o sí?

Solooír su nombre, hizo que Lena estallara y lanzara todas las cosas de suescritorio al suelo, oyendo como destruía todo a su paso, sin importarle lapresencia de Lillian. A su cabeza, venía la imagen de Kara, su hermoso rostro,su sonrisa y sus brillantes ojos azules, seguido de las niñas, que siempre teníancosas qué preguntar y contar; así mismo, vino el recuerdo de su rostro enojadoy preocupado cuando las niñas desapareciendo, sintiéndose culpable porque sumadre fue causante de ello. Oyó los pasos y la puerta cerrarse tras su madre,por lo que sin pensar, tomó un jarrón de su mesa más cercana para estrellarlocontra la puerta, para gritar y caer de rodillas en el suelo, sintiendo su corazónromperse por segunda vez, como cuando Lex la traicionó... porque sin duda alguna,cuando Kara se enterara que era una Luthor, nunca volvería acercarse a ella, porqueAlexandra Danvers se encargaría de ello. 

Holis a todos

A partir de aquí, va a empezar un poco de drama, y veremos cómo Lena va lidiar con sus pensamientos, cómo abordará  el tema de que Kara se enteré quién realmente es.

Así que nos leemos pronto.