El chico nuevo ll Lawlu/KidLaw ll School AU

04

Al despertarme de mañana, después de haber hablado con Mugiwara-ya por horas la tarde del anterior día, no me sentí tan… ¿Cómo decirlo? Molesto con el simple hecho de que sea de mañana. Me sentí…ligero. Y por alguna razón, me levanté con una sonrisa en el rostro.

Igual que todos los días anteriores a ese, bajé al estar listo y uniformado. Salude a Cora-san, quien por cierto, el anterior día había tocado a la puerta de mi cuarto, preocupado de que no lo había saludado al llegar del Colegio. No recuerdo haberle respondido con más que un “Ajá”, al estar totalmente inmerso en mi teléfono, hablando con Luffy.

Esa mañana, Cora me devolvió el saludo como normalmente, sin cuestionarme nada, también parecía de buen humor.  No pude evitar sonreír sutilmente al verlo. Me senté a la mesa para recibir el desayuno que terminaba de preparar el rubio.

-Hoy no pareces de tan mal humor.- Dijo Cora mientras servía la comida y se sentaba a mi lado.

-No me siento de mal humor.- Respondí mientras agarraba los cubiertos para empezar a comer.

-¿Y será eso por alguna razón en especial? Ayer tenías una sonrisa mientras veías fijamente tu teléfono~- Me sonrojé ligeramente, aunque intente mantenerme serio.

-¿No será que te reconciliaste con Kid de la pelea que no quieres admitir que tuvieron?- Me atore con la comida de sólo recordar el rostro de mi novio. Me había olvidado de él por completo.
Inmediatamente me levanté de la mesa y recogí mis cosas, sin haber terminado de comer.

-¡Ey! ¿A dónde vas?- Dijo Corazon, se levantó también e intentó detenerme. Pero era muy tarde.

-¡Adiós, Cora-san!- Dije al salir.
Perfecto, Cora había logrado devolverme a sobre pensar las cosas sin siquiera saberlo.

Al llegar al colegio, seguí mi rutina habitual. Casillero, clase, organizar mis cosas y sentarme a esperar a que la clase empezara. Kid aún no había llegado cuando Luffy entró corriendo a mi clase, tropezando un poco en su camino.

-¡Torao!- Gritó antes de finalmente detenerse frente a mi pupitre.

Alcé una ceja. -¿Qué quieres?-

-¿Puedo… pedirte un favor?-

-Mhm.- Dije, cruzándome de brazos.

-¿Saldrías conmigo esta tarde?- No pude evitar que mis ojos saltaran de sus cuencas por un momento al escuchar eso, por poco me atoro con mi propia saliva. ¿Quería salir? ¿Conmigo?
Tosí un poco e intenté mantener la compostura. -Ah… si, claro-. Sentí mis cachetes calentarse e inmediatamente evadí la mirada de Mugiwara-ya, cubrí mi boca haciendo un puño con mi mano frente a ella.

-A…¿a dónde iríamos? ¿Puedo preguntar?-

-Oh… ¡No había pensado en eso! A donde tu quieras, supongo…-

Moví la mano que tapaba mi boca hacia mis piernas y regresé a ver a Luffy cuando sentí mis mejillas volver a enfriarse. -¿A dónde yo quiera?- Pensé por unos momentos. -La verdad es que… preferiría simplemente caminar. Oí que hoy habrá una feria cerca. ¿Te parece bien?-

Mugiwara asintió, emocionado. -¡Claro! Nos vemos luego, Torao.- Con eso, salió corriendo fuera de mi salón de clases. Los bordes de mis labios se curvaron hacia arriba, formando una pequeña sonrisa, que rápidamente borré.

Justo en ese momento, Kid llegó para arruinar la mañana. Me sonrió y me abrazó, tomándome de la cintura. ¿Qué le pasaba? Un día se portaba mal conmigo y al siguiente venía y hacia estas cosas cómo si nada. -¿De qué estabas hablando con Luffy?-

-Conque por fin te dignaste a aprender su nombre…-

Frunció un poco el ceño. -No me vengas con eso y responde.-

-Hmm… De nada. No hablábamos de nada-

Gruñó.  -Lo dejaré pasar… por esta vez. Sólo porque sé lo terco que eres.-
-En fin, ¿Qué te parecería salir esta tarde? Hace mucho que no tenemos una cita. Y no tengo ningún partido hoy…- Intenté mantener un perfil bajo, no quería que Kid se enterase de mis planes con Mugiwara-ya.

-Hoy estoy ocupado.-

-¿En serio? ¿Haciendo qué?- Pensé en una excusa rápidamente, después de todo, soy bueno haciendo planes.

-Doffy. Vendrá a mi casa a almorzar hoy.- Mentí. Kid conocía sobre mi tío, era una buena excusa. Auque quizá con una mucho menos creíble, hubiera funcionado. Kid no tiene una capacidad intelectual muy…alta.

Estuvo en silencio un momento. -Está bien, pero no digas que no te quise invitar a salir.-

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Perdón por el retraso!