Libertad sobre carbón

Burdeos

Todas las especímenes unidos en un vientre,
buscando un lugar dentro de lo ajustado,
interrumpiendo el escape de algún ser.

Hay mucha luz entre las grietas y agujeros de la lógica y los sucesos,
un baboso pegamento que nos une a nuestra piel desnuda,
obligados a compartir nuestra comida,
de una misma boca y estómago.

Somos un accidente cósmico,
quizá estoy dando demasiada importancia,
somos desechos de un planeta,
o quizá, una partícula de un planeta inútil.

Ya no soy lo que solía ser,
o quizá, nunca fui lo que creía ser,
pero eso ya no importa,
porque ahora todos nosotros unidos debemos avanzar juntos,
aunque haya aquí en esta repulsiva y apestosa masa
criaturas perezosas que no quieran mover
aunque sea su nariz para respirar,
apestando a un más con sus cuerpos muertos.

¿Por qué somos un montón de carne que se pudre,
un accidente cósmico,
un montón de huesos que se rompen,
un montón de lágrimas que se venden por un centavo?

¿Por qué deseamos tener estrellas,
cuando no sabemos tomar la arena del mar?

¿Por qué vendemos nuestras risas?

Qué me dices de las explosiones de nuestros huesos?
Qué reconfortante es una rebanada de sandía
cuando Catrina está sobre la cama de nuestros hijos?

Los sonidos de nuestra mandíbula danzan con las enfermedades y la mala conducta,
¿dónde estamos?

¿Hacia dónde se fue nuestra primera madre?
¿Dónde está el hombre que una vez se vio?

¿Por qué callar cuando la tortura de mi ser está en terrible dolor?
¿Por qué no llorar si arrancan de nosotros lo que nos ha dado lugar?

Toda la libertad que propagan nos ha vuelto aves enjauladas
que morimos al poco tiempo.

Tengo un ala rota, ¿a quién le importaba?
Me ahogo en el fango, ¿quién me ayuda?
Mi pico se ha roto, ¿quién me dará de comer?
He muerto, ¿quién me enterrará?

Estoy solo en una masa babosa de carne desnuda y carne expuesta al calor,
las tomándose con la sal de sudor de alguien más.