Una nueva guerra se aproxima a la tierra, por lo que el patriarca Shion debe localizar a la nueva reencarnación de Athena, mas nunca se imagino que en esta vida, los shinobi se involucraran con la orden de Athena
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En la aldea de la Lluvia, en la torre más alta, Pain observaba la aldea con una seriedad implacable. Los pueblerinos iban y venían, ocupados en sus tareas diarias, ajenos a los planes que se desarrollaban en las sombras.
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A su lado, el verdadero líder de Akatsuki, un hombre de cabello corto y una máscara naranja conocida como Tobi, pero en realidad Madara Uchiha, permanecía en silencio.
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Su llegada llamó la atención de Pain, quien giró ligeramente la cabeza para mirar a Madara.
Pain: ¿Han logrado encontrar a la jinchuriki del Kyuubi?
Madara, con su tono enigmático y tranquilo, respondió.
Madara: No, aún no. Han pasado seis años desde que la niña desapareció y no hemos logrado encontrarla.
Pain frunció el ceño, su mirada penetrante volviendo a posarse en la aldea.
Pain: Es crucial que la encontremos. Su poder es esencial para nuestros planes.
Madara: Nuestros informantes están trabajando en ello. La red de espionaje sigue buscando pistas. Tarde o temprano, la encontraremos.
Pain asintió lentamente, aunque la preocupación seguía pesando en su mente. Sabía que el tiempo corría y cada día que pasaba sin encontrar a la jinchuriki del Kyuubi, los riesgos aumentaban.
