La llegada

142 7 0
                                    

Harry Potter y Dudley Dursley, ambos de 10 años, se encontraban en un día normal de clases cuando repentinamente el director dio un anuncio repentino que decía a los estudiantes que llamarán a sus padres y se reunieran en la sala de juntas.

Eso hicieron y luego fueron a la sala de juntas hasta que: Petunia Dursley; madre de Dudley y tía de Harry, Vernon Dursley; esposo de Petunia, padre de Dudley y tío de Harry, de manera inesperada para Dudley y desafortunada para Harry llegó junto con ellos, la hermana de Vernon: Marjorie Dursley, tía de Harry y Dudley.

            —Diddy, mi precioso sobrino— dijo tía Marge de forma animada acercándose a Dudley—. Decidí venir a ver a mi hermano hacia una hora y quedarme un tiempo para verte pero aprovechando la llamada vine.

La mirada de tía Marge fue hacia Harry y cambió a una de molestia junto con su tono de voz:

            —Se me olvidaba que estabas aquí. —Le hizo un gesto de molestia con la mano. Estuvo a punto de decirle que tomara asiento y no fuera una molestia pero al ver que había gente alrededor Vernon le dijo que lo dejara.

            —Vete por ahi—le dijo Vernon en tono de fastidio

Harry ya pensaba hacerlo por lo que se alejó de sus tíos y su primo mientras Dudley se acercó a sus amigos: Piers Polkiss, Dennis, Malcolm y Gordon.

A la media hora ya había llegado bastante gente que hablaba entre si preguntándose para que los habían citado.

            —¿Qué creen que haya pasado para llamarnos tan de repente?—preguntó una mujer a su hijo que se encogió de hombros.

Pasaron otros 15 minutos hasta que el director Sutton decidió que ya habían llegado suficientes personas apareció en la sala con un paso apresurado y subió a la tarima seguido por un chico de 26 años con el pelo rubio y los ojos castaños que sonreía.

El director Sutton fue hacia el frente y empezó a hablar:

            —Supongo que todos se preguntarán por qué llame a una reunión de manera tan repentina y bueno... —Se detuvo como si no supiera que decir, suspiro y parecía que iba a continuar pero el chico de su lado se le acercó y le susurro algo al oído.

Luego de que el chico terminara de susurrarle al director este asintió y le cedió su lugar para que hablara.

El chico se aclaró la garganta antes de que comenzara a hablar:

            —Supongo que debo empezar presentándome, soy Edward Ted— dijo con una sonrisa—. Aunque pueden llamarme Teddy, se enteraran de mis apellidos más tarde.

Todos en la habitación se miraron extrañados y agregaron otra pregunta más a la lista: ¿Quién era ese chico y que hace aquí?

Petunia, Vernon y Marge parecían hastiados de estar en ese lugar y solo parecían querer irse.

            —¿Y si solo nos vamos?— susurró tío Vernon—. Dudo que sea algo importante si no han dicho nada aún.

Petunia asintió seguida por Marge. Dudley hablaba con sus amigos y Harry estaba sentado una fila detrás de ellos y miraba con curiosidad al chico que estaba hablando.

            —Tengo 26 años...

Iba a seguir hablando pero un hombre se levantó y dijo:

            —¿Puede decirnos para que estamos aquí? No tenemos todo el tiempo del mundo.

Muchas personas asintieron.

Muggles leyendo Harry Potter 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora