Capítulo 68: Apuesta

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—¡Glandeir! —grito Alec

El aura brillante de su espalda se transformó en un gigante hecho de luz pura, portando una armadura dorada que reflejaba su majestuoso poder.

—Un custodio de luz... —comentó el profesor Yannes

Los custodios son espíritus de nivel legendario de la especie de los golems, siendo más fuertes, resistentes y longevos que otros.

—¿Dónde consiguió tal espécimen?

Pero madame Lothrim no respondió su pregunta, seguía sin palabras, no podía expresar ningún sentimiento o angustia en su rostro, solo una mirada vacía que ojeaba la situación con suma delicadeza.

«¿Madame?... ¿Qué le sucede? Esta muy... quieta...»

—Prepárate, niño, para recibir tu castigo, ¡Por interponerte ante la justicia! —grito Alec, alzando su voluntad al máximo

Su espíritu guardián, un enorme custodio de armadura dorada y espada brillante se paró ante Cáliban. Todos en la casa observaron la situación, estaba en desventaja, o eso era lo que pensaba la mayoría.

—Maldita sea... un custodio... —susurró Catherine

—¿Conoces a ese espíritu? —preguntó Joseph

—Si, son espíritus incansables, con un poder que roza el nivel mítico, pero no solo es eso, es un espíritu de atributo luz, ningún elemento puede atravesar sus defensas, solo el atributo oscuro o sombra podría... el líder debe rendirse, no hay forma de que gane así...

—No lo creo...—interrumpió Astrid, todavía tenía en su mente la batalla en las catacumbas, recordando el poderío que mostró su capitán, la gran explosión carmesí, la belleza de su técnica de espada, la pureza, todo eso permanecía en su mente desde ese día —el líder ganara... estoy segura...

Cáliban suspiro mientras se arremangaba su camisa.

—Supongo que tendré que matar primero a esa cosa...

«¡Mi señor... espere!» —llamo Ocelotl

—¿Qué sucede?

«Permítame pelear también, no quiero ser una carga para usted, permítame demostrar mi valía»

Cáliban sonrió ligeramente.

—Me temo que, en tu forma actual, no creo que seas oponente para él...

«Tiene razón, es por ello que tengo preparado algo bajo la manga»

Se sintió intrigado por la propuesta de su familiar, así que, decidió confiar en él. De la sombra de Cáliban surgió la figura de un bello corcel de ojos brillantes, Alec alzó una sonrisa derrochadora.

—¿Un caballo? ¿Eso es todo lo que tienes?—dijo con arrogancia

Catherine asintió al mirar su espíritu.

—Si, aunque es de tipo oscuridad, no creo que pueda hacer nada, la brecha de poder es demasiado para ambos...

—Espera... algo está pasando... —comentó Similia

Ocelotl comenzó a derretirse en un oscuro charco de aguas negras, Alec se sintió mal por su oponente, toda esa palabrería y teatro para nada, entonces, del charco surgió una mano armada, todos quedaron impresionados por la metamorphosis de Ocelotl, poco a poco, un caballero oscuro comenzó a surgir hasta blandir una poderosa espada negra, sus ojos espectrales se posaron sobre el custodio, apretando el mango de su arma con fuerza. Cáliban se sintió extrañado a la vez que impresionado, al menos hasta que recordó su batalla con el Dullahan.

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⏰ Última actualización: 2 days ago ⏰

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