[me enamoré de una criminal]《rivari》

intento

Rivers

Juan, el director de la prisión, sonreía mientras me llevaban a otra sala.

"Vamos a tener una charla, Rivers", dijo.

Pero yo sabía que algo no estaba bien.

Los guardias me llevaron a una sala oscura y abandonada.

Y entonces.

Vi la verdad.

Un grupo de hombres encapuchados esperaban en la sombra.

"Vamos a deshacernos de ella", dijo uno de ellos.

Mi corazón se detuvo.

Sabía que iban a matarme.

Pero entonces.

Escuché un ruido.

Un golpe.

Un grito.

Y Ari apareció.

Con Osvaldo, Roier y Aldo detrás de ella.

"¡No te tocarán!" gritó Ari.

Los hombres encapuchados se sorprendieron.

Y mis amigos aprovecharon la oportunidad.

Lucharon contra ellos.

Y lograron derrotarlos.

"¡Vámonos!" gritó Osvaldo.

Nos fuimos corriendo.

Dejamos atrás la prisión.

Y la traición de Juan.

"Gracias", dije a Ari.

Ari sonrió.

"Siempre estaré contigo", dijo.

Y nos besamos.

Mientras corríamos hacia la libertad.

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Ari

Logramos escapar de la prisión.

Pero sabía que no estaba seguro.

Juan podría haber enviado a más hombres.

Teníamos que encontrar un lugar seguro.

Rivers me tomó la mano.

"¿Dónde vamos?" preguntó.

Sonreí.

"Conozco un lugar", dije.

Los llevé a un refugio secreto.

Donde podríamos escondernos.

Y planear nuestro próximo movimiento.

Rivers se acercó a mí.

"Gracias por salvarme", dijo.

Sonreí.

"Siempre te salvaré", respondí.

Y nos abrazamos.

Sabía que nuestra lucha no había terminado.

Pero con Rivers a mi lado.

Estaba lista para enfrentar cualquier cosa.

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