Un beso será el detonante a la curiosidad, la tentación y el deseo de dos inexpertos amigos...
*Ship: JinMin (Jin X Jimin)
*Mención de otros idols.
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Esa mañana Jimin olvidó completamente que el día lunes tenía clase de educación física, eso implicaba correr unas tres vueltas alrededor de la cancha, sin duda no era su clase favorita.
Para cuándo la hora de biología terminó y la hora de la comida llegó, Jimin sintió que el día había avanzando con lentitud. Con total emoción salió del aula de clases y fue hasta su casillero para guardar algunos libros, y luego fue a la cafetería. Había una corta fila que muy pronto se convirtió en una larga. Pasaron unos minutos y ya casi estaba cerca, fue cuando vio pasar al chico castaño y sus ojos color avellana se posaron en él.
— Taehyung, ven aquí — dijo en susurros, aunque era totalmente estúpido susurrar cuando todos a su alrededor lo estaban escuchando.
Taehyung se aguanto las malas miradas que le dieron los chicos de la fila y se acercó al rubio.
— Hola — dijo, intentando sonar amigable.
Juntos avanzaron y esperaron su turno, Jimin compró un sándwich de pollo y un jugo natural mientras que Taehyung se compró una hamburguesa y una Coca-Cola y una buena ración de papas fritas.
— Te tengo envidia — Jimin hizo un puchero mirando con atención la hamburguesa del castaño.
Taehyung se detuvo a mitad de la cafetería y observo las mesas, todas ocupadas.
— ¿Almorzaras aquí? — preguntó el castaño.
Jimin miró las mesas, Jin estaba tomando una clase extracurricular, eso significaba sentarse solo en una mesa ocupada con personas extrañas.
— ¿Quieres almorzar conmigo?
— ¿Puedo?
— Claro, pero no aquí...
Jimin sonrió hasta delinear sus ojos —. Perfecto, te sigo.
Taehyung le devolvió una sonrisa tímida y camino fuera de la cafetería seguido del rubio, ambos caminaron por el ancho pasillo hasta llegar al ala oeste donde se encontraba el auditorio. Entraron por la puerta que estaba detrás del escenario y se adentraron en silencio.
Taehyung lo guío hasta lo que usaban como camerinos y se sentaron en un viejo sofá de cuero desgastado.
— ¿Así que este es tu escondite? — pregunto Jimin.
— Si, o al menos lo es cuando los del club no lo utilizan para besuquearse o tener sexo.
Jimin se ahogo con el pequeño sorbo de jugo que había tomado.
Taehyung rio por lo bajo y le dió algunas palmadas en su espalda.
— Perdón, no lo dije por tí y Seokjin.
— N-no te preocupes — limpió su boca con el dorso de su mano.
— ¿Quieres probar? — Taehyung extendió su mano con la hamburguesa sin tocar.